El petróleo llegará a su pico en el 2030 sólo si se cumplen los compromisos climáticos
El informe anual de la Agencia Internacional de Energía revisa al alza el crecimiento a corto plazo del gas natural y prevé un reavivamiento de las nucleares en todos los escenarios
BarcelonaEl consumo energético global batió récords de 2024 en todas sus formas: el carbón, el petróleo, el gas natural o las renovables, los cuatro alcanzaron su punto más alto hasta ahora. Pero el único de todos ellos que con toda certeza puede decirse que se reducirá en un futuro es el carbón, para lo que se prevé que llegue al pico de demanda antes del 2030 y después empiece a bajar. En cambio, petróleo y gas natural sólo dejarán de crecer si los gobiernos del mundo cumplen sus compromisos climáticos, es decir, los planes que han presentado ante la ONU para reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero. Así se concluye del informe anual de la Agencia Internacional de la Energía, el World Energy Outlook, que se hizo público este miércoles en el marco de la cumbre climática de la ONU de Brasil, la COP30.
El informe plantea tres escenarios de futuro posibles: el de seguir con las políticas energéticas actuales, el de cumplir los compromisos declarados y el de ir incluso más allá y llegar a las cero emisiones en 2050. En el primer caso, el de seguir como hasta ahora, petróleo y gas natural seguirían creciendo indefinidamente, y nos llevaría a un aumento de la temperatura global a finales de siglo de 3ºC respecto a la era preindustrial, dice la AIE. Pero en el segundo escenario, si los gobiernos cumplen las promesas, el petróleo llegaría a su pico de demanda en el 2030, mientras que el gas natural tardaría algo más hacia el 2035 y empezaría un lento descenso.
En todos los escenarios, las energías renovables crecen más rápidamente que cualquier otra fuente de energía, lideradas por la energía solar fotovoltaica, pero, sin embargo, si se mantienen las políticas actuales, no llegarán a sustituir ni el gas natural ni el petróleo. Otro elemento común en todos los escenarios es el resurgimiento de la energía nuclear. La Agencia Internacional de la Energía prevé un aumento de la inversión tanto en plantas tradicionales como en otros proyectos, de forma que después de dos décadas estancada, la nuclear aumentará a escala global al menos en un tercio de aquí al 2035, dice la AIE.
Ola de inversión en gas natural licuado
El informe de este año ha revisado al alza sus previsiones de crecimiento del gas natural, a la vista de que en 2025 han aumentado las decisiones de invertir en proyectos de gas natural licuado (GNL). Esta "oleada prevista de suministro de gas natural en los próximos años" comportará un aumento del 50% del suministro mundial de GNL disponible en 2030, dice el informe, a falta de ver si más tarde se logra llegar a un pico en caso de que los gobiernos cumplan el recorte de emisiones prometida. Esto se debe principalmente a la crisis del gas ruso que ha llevado a Estados Unidos y otros países a incrementar la producción. El gas natural emite un 25% menos de CO₂ que el petróleo pero, sin embargo, emite, porque es un combustible fósil, pero la Unión Europea lo ha incluido en el listado de energías limpias, que reciben incentivos a la inversión para la transición energética.
Analistas de la transición energética explican que durante el último, la AIE ha sido objeto de presión por parte de los republicanos estadounidenses y de la administración Trump para que su informe anual refleje un futuro prometedor para los combustibles fósiles. Pero el informe alerta de que ese crecimiento del gas natural y del petróleo a corto plazo "no es motivo de complacencia" sino que significa que "el mundo no está alcanzando los objetivos que se fijó: el acceso universal a la energía y la lucha contra el cambio climático".
El pico del petróleo depende de la electrificación
El pico del petróleo dependerá, de hecho, de la electrificación, puesto que el 45% de la demanda de este combustible viene del transporte rodado, es decir, de la gasolina para los coches. Si se cumplen los compromisos climáticos de los gobiernos, el porcentaje de coches eléctricos en el parque móvil se duplicaría en 2030 y subiría aún más del 50% en 2035, lo que permitiría llegar al pico en la demanda del petróleo en 2030.
de energía". Hoy en día, la electricidad sólo representa en torno al 20% del consumo final de energía a escala mundial. "El año pasado, dijimos que el mundo se estaba moviendo rápidamente hacia la Era de la Electricidad, y hoy queda claro que ya ha llegado", ha dicho el director general de la AIE, Fatih Birol, y destaca que al contrario de la tendencia de la última década, hoy "el aumento del consumo de electricidad ya no se limita a vertiginoso de los centros de datos y la IA también están impulsando el consumo de electricidad en las economías avanzadas”.
El informe admite que la prioridad de los gobiernos ahora mismo es "la seguridad energética" y que una cuestión crucial para esta seguridad es garantizar que se implementan unas redes eléctricas eficientes, con sistemas de almacenamiento y otras fuentes de flexibilidad del sistema eléctrico. "De momento, algunos de estos elementos se están quedando atrás", dice el informe, que destaca como muestra de ello el apagón general en la península Ibérica de este año.