Alimentación, facturas y transporte: los costes adicionales de vivir solo

BarcelonaEconómicamente hablando, ¿es más fácil o más difícil vivir solo? A priori, las personas solteras deben hacer frente a muchos gastos cotidianos que, en el caso de las familias, se reparten entre los distintos miembros. La principal es el coste de la vivienda -el alquiler o las cuotas de la hipoteca-, pero no es la única.

Alimentación

Junto con la vivienda, la alimentación es uno de los principales gastos de cualquier hogar, independientmente de la cantidad de gente que viva ahí. La idea generalizada es que, cuanto más numerosas sean las familias, el gasto por persona será inferior, aunque por ser más, lo que se gasta en total será más elevado que lo que gasta una persona que vive sola. El hecho de ser más permite comprar muchos alimentos en mayores envases y, por tanto, más económicos a largo plazo. Si una persona soltera compra un paquete demasiado grande de jamón, por ejemplo, corre el riesgo de que se le estropee en la nevera, mientras que si en casa hay más gente, se consumirá antes.

Sin embargo, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) matiza esta idea. En 2019, la asociación de defensa de los consumidores alertó de que algunas marcas utilizaban los envases grandes como reclamo para vender más anunciándolos como ahorro, pero que, en realidad, el precio por unidad o por kilo era superior al de los envases pequeños del mismo producto. "Antes de meter el producto en el carro, compara su precio por unidad de medida (kilo, litro, por dosis, por rollo), que es un dato obligatorio", que por ley debe mostrarse en el etiquetado de los estantes de los supermercados y tiendas, apunta la entidad.

Limpieza del hogar e higiene personal

Al igual que con la alimentación, el tamaño de los envases o productos de limpieza e higiene, tales como detergentes, jabones, pasta de dientes o champú, varía. Sin embargo, la diferencia es que una persona que viva sola puede comprar igualmente los envases más grandes, porque son productos que, a diferencia de los alimentos, no caducan. Las consideraciones de la OCU sobre cómo algunas marcas inflan el precio por unidad de los envases grandes también sirve para los artículos de limpieza e higiene.

Electricidad, gas y agua

El número de personas que vive en un hogar también afecta a lo que se paga en energía o agua. Cabe recordar que las facturas de la luz, el gas natural o el agua tienen una parte del coste variable que depende de cuánto se consuma y que, por tanto, será más elevada si en una vivienda viven más personas. Pero también existe una parte fija que es indiferente de la gente que vive en ella y que corresponde principalmente a la potencia contratada en el caso de la electricidad; el peaje de acceso en el del gas, o el consumo mínimo en el del agua (éste último varía por municipio). Además algunas tasas son fijas, mientras que otras dependen del consumo mensual.

Tanto el gas como la luz tienen una tarifa regulada por el gobierno y otras del mercado libre, donde cada empresa realiza las ofertas que desea, por lo que los precios pueden ser muy diferentes. "En dos años, las comercializadoras eléctricas del mercado libre han multiplicado por cuatro el margen que cargan por kilovatio de potencia contratada", avisó la OCU en un informe publicado el pasado mes. Estos aumentos de precios coincidieron, según la entidad de consumidores, con cambios para abaratar los costes fijos de la factura de la luz para la tarifa regulada. Es por ello que las familias tienen que poner atención a todos los elementos de la factura, pero en el caso de las personas solteras, especialmente a los costes fijos.

Transporte y vacaciones

El transporte público es uno de los ámbitos en los que no existe diferencia entre vivir solo o no, con la excepción de los descuentos por familia numerosa, que reducen las tarifas. Sin embargo, con el transporte en coche, ser más personas en casa representa una clara ventaja. El coste de comprar un vehículo, mantenerlo y contratar un seguro se reparte en el caso de las familias, sobre todo si entra más de un sueldo. En cambio, estos costes deben asumirlos todos una persona soltera.

A la hora de viajar, el sobrecoste principal en el que incurren las personas solteras es a la hora de contratar habitaciones de hoteles. Es habitual que los hoteles vendan habitaciones dobles indiferentemente de si se alojan una o dos personas, aunque algunos establecimientos sí tienen opciones de habitaciones individuales más pequeñas y, por tanto, más económicas.

Fiscalidad

Los impuestos son iguales para todos, pero las personas casadas tienen una ventaja a la hora de realizar la declaración de la renta: pueden elegir hacerla individual o conjuntamente como matrimonio. Las diferencias no suelen ser muy grandes, pero sale a cuenta realizarla conjuntamente sobre todo en las parejas en las que uno de los cónyuges no trabaja.