TarragonaHan pasado cinco años de las lluvias que desbordaron el río Francolí. Yo no cubrí aquella trágica noticia porque todavía no vivía en el Camp de Tarragona, pero estos días, preparando el reportaje para el quinto aniversario de los aguaceros, he visitado la Espluga de Francolí y he hablado con muchos de sus vecinos. Aún me cuesta creer que este río, por donde normalmente sólo baja un hilo de agua mezclado con los residuos de alguna fábrica, tuviera tanta fuerza aquel 22 de octubre del 2022. Pero lo que aún me sorprende más es que el al día siguiente aquello estuviera lleno de voluntarios para echar una mano y ayudar a los afectados a reponerse. La solidaridad siempre emociona y más cuando es espontánea, pero los vecinos de l'Espluga fueron más allá y se organizaron a contrarreloj. Aprovecharon la fundación de un vecino para encauzar las donaciones; buscaron artistas para realizar conciertos y también famosos para que apoyaran; hicieron cios de los árboles caídos en el río... Y en total consiguieron 150.000 euros para el pueblo y la inyección de una dosis de moral necesaria para volver a levantarse. ¡Coi, si incluso ha vuelto a brotar el platanero que había en la rotonda donde desapareció la famosa bodega!
Todo esto me ha hecho pensado en la fuerza de la gente y en el poder que tenemos. Cierto es que actualmente formar parte de nuestra especie da vergüenza –por las guerras injustificables, por el racismo creciente o por las agresiones al medio ambiente–, pero me ha parecido acertado recordar que también somos capaces de hacer cosas magníficas. He recordado la manifestación del año 2003 en Barcelona contra la guerra en Irak y también las protestas que, un año más tarde, evitaron un trasvase del Ebro que ya se había aprobado en el Congreso y que, incluso sin embargo, ya tenía su primera piedra, cortesía de José María Aznar. También he recordado el 1-O y los desahucios que cada día detienen a miles de voluntarios. Y también he pensado en el futuro: ¿se acabará haciendo la línea de muy alta tensión que debe unir Terol con el Llobregat? ¿Y el Hard Rock, que se hará? Pues dependerá de la gente.
