Las familias de la escuela La Vall en Osor piden que los niños puedan ir sin mascarilla

El 70% de los alumnos no han ido a clase este martes para exigir que se les escuchen

Maria Garcia
3 min
Els pares i mares de l'Escola La Vall d'Osor durant la protesta que han dut a terme aquest dimarts per demanar que els infants puguin anar sense mascareta

OsorClamor de la mayoría de familias de la escuela La Vall en Osor (Selva) para pedir al Departament d'Educació que permita a los alumnos del centro ir sin mascarilla. La escuela sólo tiene dos grupos estables, el de infantil y el de primaria, y en total son veinticuatro niños. "Creemos que se están vulnerando los derechos de los niños y, además, en nuestra escuela hay espacio de sobra: las aulas son amplias y están muy ventiladas y no se acaban todo el patio que tienen", ha defendido la presidenta de la Asociación de Familias de Alumnos (AFA), Ruth Alemany. Con el objetivo de presionar y que la consejería los escuche, las familias han empezado este martes una protesta y diecisiete de los veinticuatro alumnos no han ido a clase.

Con el eslogan "En la escuela queremos respirar", los padres y madres de diecisiete alumnos han iniciado un mes de movilizaciones para reclamar a la consejería de Educación que permita a los progenitores decidir si los niños tienen que llevar o no la mascarilla. "Se pasan muchas horas dentro del aula, cuando aquí hay espacio para poder cumplir las medidas de distanciamiento y mucho aire libre", ha indicado Alemany, que también ha asegurado que los niños empiezan a notar efectos negativos: "Dolores de cabeza, rozaduras detrás las orejas... Y no creemos que sea muy sano estar todo el día respirando con una mascarilla húmeda".

Además, la presidenta de la AFA recuerda que, en los dos grupos estables, hay cinco hermanos repartidos y que, en caso de un positivo, igualmente tendrían que confinar toda la escuela. "Muchos niños también se mezclan en las actividades extraescolares, algunas de las cuales hacen juntos y sin mascarilla porque hacen deporte", ha añadido. Alemany también ha lamentado que, al principio, Educació dijera que se revisaría cada quince días si se tenía que utilizar la mascarilla en las aulas y no lo esté haciendo.

La AFA se ha puesto en contacto con Inspecció y con los servicios territoriales de Educació en Girona para hacerles llegar su demanda. Además, paralelamente, han empezado un mes de protestas que se alargarán hasta el 20 de noviembre, Día Universal de los Derechos de los Niños. Hoy diecisiete alumnos no han ido a clase y una vez a la semana volverán a hacer absentismo escolar, sustituyéndolo por actividades con los niños. El 20 de noviembre harán una manifestación ante la sede de la Generalitat en Girona.

Excepciones en las escuelas rurales

La de Osor no es la única escuela de Catalunya con esta exigencia. Hace unas semanas, las familias de la escuela Finestres en Mieres (Garrotxa) también pedían que los niños pudiesen ir sin mascarilla. Argumentan que al tratarse de una escuela rural, en la práctica los niños son como un grupo estable de convivencia. En este caso, sin embargo, el delegado de Educación en Girona, Martí Fonalleras, lo descartó "por sentido común, seguridad y solidaridad".

En otras poblaciones como Sant Jaume de Llierca (Garrotxa), Banyoles o Temple (Pallars Jussà) hay padres y madres que también se están movilizando para pedir a Educació y Salut que tengan en cuenta la realidad que viven las escuelas rurales y permitan que los niños de más de seis años también puedan ir sin mascarilla .

"No se puede aplicar la misma normativa en las escuelas rurales que en las ciudades o pueblos grandes. Aquí los niños se pasan cinco o seis horas al día con mascarilla, pero después, al salir, están todos juntos compartiendo la merienda. No tiene sentido", ha opinado Sara Castells, una de las madres del Pallars Jussà que, junto con más familias, ha pedido a Educació que se permita a los niños ir sin mascarilla si los progenitores firman una declaración de autorresponsabilidad. "Si las escuelas se cerraron en marzo, creemos que ahora no es ni sano, ni pedagógico, ni educativo que abran de este modo, porque los niños están sufriendo y supone un atentado contra sus libertades", ha sentenciado Castells.

stats