Cupra llega al millón de coches
La marca aspiracional de Martorell se consolida como una de las de crecimiento más rápido en Europa
Pocos podían imaginar el gran éxito de Cupra cuando en 2018 esta filial de alto rendimiento se independizó de Seat para convertirse en una marca aspiracional, apenas situada en el segmento del mercado entre los fabricantes generalistas y los premium, convirtiéndose en la marca juvenil y de acceso a los coches deportivos de Audi o Porsche. Siete años después, y pese a la sacudida que supuso la pandemia, la crisis de los semiconductores, los problemas geoestratégicos en Ucrania y Palestina y el encarecimiento de las materias primas, Cupra celebra la salida de su modelo un millón de la planta de Martorell convertida en una de las marcas europeas de mayor éxito y crecimiento de los últimos años.
El modelo que ha hecho un millón no deja de estar cargado de simbolismo, ya que este honor ha recaído en un Cupra Formentor e-Hybrid de color Magnetic Tech, un modelo híbrido enchufable con una potencia de 272 CV y una batería de litio de mayor capacidad, que ahora ya llega. Y es que el fomento de la electrificación y el modelo Formentor han sido los dos grandes puntales de crecimiento de Cupra en los últimos años, dos argumentos que han gravitado la apuesta comercial de la marca.
El primer modelo de la nueva Cupra independiente fue el Cupra Ateca, una versión potente y especial que quería generar impacto en el mercado, seguido de las versiones Cupra del León. Pero lo realmente decisivo y que marcó la evolución de la marca fueron los primeros modelos exclusivos, en concreto el eléctrico Cupra Born (el primer coche 100% eléctrico de la marca), el Cupra Tavascan (el primer SUV eléctrico de la marca) y el Cupra Terramar, un todocamino deportivo con vocación familiar. La gama crecerá en breve con el nuevo Cupra Raval, un urbano eléctrico que se fabricará en Martorell y que debe ser el sustituto conceptual del Seat Ibiza (modelo con el que aún convivirá un tiempo).
Pero el Cupra Formentor ha sido, sin lugar a dudas, el coche estrella y nave insignia de la marca. El Formentor es, en realidad, un León con una carrocería elevada, una puesta a punto específica y un diseño cautivador que se ha convertido en el gran activo de Cupra, hasta el punto de convertirse en el modelo más exportado de la historia de la marca. La acogida de Cupra (en especial del Cupra Formentor) en los principales mercados europeos ha sido magnífica, y algunos países como Alemania, Austria, Reino Unido o Francia se han convertido en mercados clave para su crecimiento, que a diferencia de Seat no necesita el mercado español para consolidarse.
Un horizonte de crecimiento
Cupra es una de las marcas del grupo Volkswagen que más ha crecido en los primeros nueve meses de 2025, con un porcentaje superior al 4%, y de momento no ha generado síntomas de agotamiento. De hecho, la planta de Martorell está a punto de terminar las labores de adecuación de la línea 1 de producción, donde se fabricarán el Cupra Raval y el Volkswagen ID.Polo, con una inversión de más de 300 millones de euros.
El Cupra Raval debería ser el primer coche totalmente eléctrico con una clara vocación de masas, gracias a su estética y puesta a punto dinámica, un diseño juvenil y una clara vocación urbana. Sin embargo, la marca aún tiene dos grandes asignaturas pendientes: el desembarco en Estados Unidos (pospuesto sine die debido a los aranceles de la administración Trump) y la expansión de la marca en Oriente Medio, si bien deberá hacerlo con modelos de combustión, que son los que dominan el mercado del golfo Pérsico y de la península Arábiga.