Lo que no ocurrió en Port Aventura

La idea no fue de ellos, fue de los padres de Lara, que, del grupo de amigos, eran los más motivados. Dijeron que ir a Port Aventura. Y entonces –de eso se acuerda, la señora Marcè– ella se encargó de encontrar las entradas, bien de precio. Fueron Pau, Pau, Blai, Jan, Jana y la suya, Maria. Ella y el señor Marcè, entonces, se querían.

Todo fue mal, porque a quien hacía gracia la salida era, sobre todo, a los padres. A Jana y Blai las atracciones les gustaron mucho. Subieron a por todas, y muchas veces. En cambio, a la suya, a Pau ya Jan no les gustaron nada y empezaron a llorar. Primero ella, Maria. Entonces los demás se lo copiaron. Su hombre, enfadado, le dijo a la niña que si seguía soñando se marcharían, que no habían venido para soportar dramas. Que si no quería subir a ninguna parte, se marchaban.

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La señora Marcè se acuerda de que, a pesar del mal humor del marido por culpa de la niña, estaban bien entonces. No era como ahora, que siempre le reprocha cosas a ella oa la hija. Entonces, si la hija perdía un zapato o ella perdía el teléfono, él no se enfadaba. Ahora sí, claro. Se enfada mucho. Como si fuera el dueño de los zapatos y teléfonos del mundo, como si él nunca perdiera nada. Ellas –que son ya mayores– se lo toman con resignación, pena y normalidad. Se enoja y no se puede hacer nada. La señora Marcè escucha las noticias. Un árbol se ha caído en una de las atracciones de Port Aventura. Hay heridos críticos.

Piensa en ese día. El día en que la niña de ellos lloraba porque no quería subirse a la atracción y el señor Marcè se enfadó tanto que gritó y dijo que volvían a casa. Si en ese momento, antes de marcharse, cuando la forzaban a subir a esa montaña rusa, hubiera caído el árbol de hoy... Sonríe. Qué suerte, qué suerte que no ocurrió. Pudo pasar y ahora seguiría llorando. Pero no. No ocurrió. Constantemente piensa en momentos de éstos, instantes no ocurridos. Y ya le da igual que el señor Marcè haya llamado, por quién sabe qué, antes de ir a la siesta. No pasa nada.