PSOE, amnistía sí, financiación no
Pedro Sánchez hizo el corazón fuerte y pagó el precio de los indultos y de la amnistía con una sonrisa de compromiso para las cámaras. Al fin y al cabo, la alternativa era hacer presidente a Feijóo y que subiera el descontento interno de un PSOE que se mantiene razonablemente unido porque ya se sabe que el poder es el cemento más eficaz.
Pero ahora que vienen las elecciones en Catalunya, los socialistas necesitan subrayar que no se han bebido el entendimiento, no sea que les marchen al PP los votos de los que se habían pasado del PSC en Ciutadans cuando el pico del Proceso y poco a poco habían ido volviendo. Por eso la vicepresidenta Montero se ha puesto el tricornio y ha declarado que no permitirán "que haya ningún alejamiento del orden constitucional" y que "el PSOE no permitirá que se atraviese ningún límite". Lo dice por el recurso al TC que el gobierno español ha presentado contra la mesa del Parlamento por haber admitido a trámite una ILP para declarar la independencia (que también ha sido una decisión tomada por los partidos independentistas con sonrisa de compromiso ante las cámaras).
amnistía ni nada de eso" a hablar de la concordia, y volverá al conocido mensaje de los "problemas reales de la gente". Si de verdad quieren ocuparse de los problemas materiales de los catalanes, los socialistas deben hacer una propuesta de mejora del financiación que no sea el bla, bla, bla habitual de la legislación vigente y acabar diciéndole a Cataluña que continúe en la cola del régimen común como todo el mundo.Con los indultos y la amnistía, los socialistas han hecho números y han visto que les salía a cuenta, pese al desgaste que hay que reconocer que han tenido, pero cuando llegamos a la cuestión de la financiación, se les acaba la imaginación y la valentía política. Qué paradoja, porque si Catalunya pudiera disponer de su dinero, la desactivación independentista que tanto desean los socialistas avanzaría notablemente.