El socialista Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha
25/01/2024
2 min

“Seamos serios. ¿De verdad alguien cree que es comparable el Proceso con el terrorismo que sufrió España durante décadas? Lo que todos entendemos por terrorismo, lo que sufrió España durante décadas, está fuera de la amnistía”, ha dicho el ministro de Justicia y Presidencia, Félix Bolaños, en la toma de posesión del fiscal general del Estado.

Evidentemente, el terrorismo es un hecho concreto, y todos estamos de acuerdo. El terrorismo –por ejemplo, quienes atentaron en la sala de fiestas Bataclan o quienes atentaron contra el Hipercor– busca, a través de la violencia, sembrar el terror. Cuando digo violencia digo muerte. A través de explosivos, por lo general. Y de forma indiscriminada. Hay víctimas del terrorismo, por ejemplo, que se han quedado sin piernas, brazos. Algunos han muerto, claro.

Esto no habría que explicarlo, pero como hay quien utiliza las palabras con total y espumante ligereza, en interés propio, nos toca caer en la trampa y explicar que los manifestantes que acudieron al aeropuerto, a pie, durante los días del Proceso, amparados por Tsunami Democrático, no eran terroristas. Ni sembraron terror, ni hicieron más que manifestarse. Terrorismo, por ejemplo, fueron los atentados de la Rambla.

Pero claro. Qué debes contarles a unos señores que durante este Proceso nos dijeron nazis con toda la tranquilidad y banalidad. Algunas marcas comerciales llevan a cabo prácticas comerciales que llamamos pink washing. Se lavan la cara con el feminismo por bandera. A esto podríamos llamar yellow dirtying. Empastillas intencionadamente con el Proceso. Como cuando el barón del PSOE y presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, dice que "el terrorismo debe estar fuera de la amnistía". No es terrorismo. Y es amnistía porque los líderes del Proceso fueron condenados (por ejemplo, los Jordis) por el delito de sedición. Quizá lo que ocurra es que la corriente política de este presidente no es tampoco socialismo.

stats