Aragonés rechaza detener el Hard Rock: "Si lo hago, el PSC se retirará y vamos a perder los presupuestos"
Los comunes le exigen que frene el macroproyecto para apoyar las cuentas mientras el presidente pide ya los votos de los demás partidos
BarcelonaLos presupuestos de la Generalitat de 2024 cuelgan de un hilo. Se ha constatado este miércoles durante la sesión de control del Parlament al presidente, Pere Aragonès, que ha admitido que no puede detener el Hard Rock como le reclaman los comunes para apoyar los presupuestos porque perdería los votos del PSC. Interpelado por la líder de los comunes, Jéssica Albiach, para que detenga el macroproyecto, el presidente catalán le ha respondido indignado: "Vale, fuera, el Hard Rock, tendremos 41 diputados [de 135]. Me están pidiendo una lo que, si lo acepto, comportará que un grupo [el PSC] se retire y perderemos los presupuestos". "Con la actual composición en el Parlament no podemos detener el Hard Rock", ha insistido, en referencia a que PSC y Junts, con 33 diputados cada uno, quieren el proyecto. En todo caso, la consellera de Economia, Natàlia Mas, ha vaticinado en una entrevista en RTVE que no se acabará desarrollando: "Yo apostaría más que no [se acabará haciendo] que por que sí", ha afirmado.
Para resolver la situación, el presidente ha pedido a los comunes negociar las cuestiones que tienen que ver directamente con el presupuesto, porque este año no se prevén partidas relacionadas con el Hard Rock. Un argumento que no convence a Albiach, que se ha mantenido firme después de presentar ayer una enmienda a la totalidad en el texto: "No hay ni un euro, pero es una idea nefasta para Cataluña por su impacto en el territorio, en la salud mental y porque perpetúa un modelo productivo propio del desarrollismo", ha argumentado. A su juicio, se trata de una "decisión política" detener al Hard Rock, porque es una cuestión que ha puesto sobre la mesa al PSC. "Quien puso el macroproyecto en el corazón de la negociación de los presupuestos fueron los socialistas y ustedes lo aceptaron. Le pedimos que para el bien del país subsanen el error. ¡Rectifiquen!", ha clamado Albiach.
Ahora mismo, el Gobierno no tiene garantizados los votos de las cuentas a una semana del debate a la totalidad en el pleno. Si no los consigue, la oposición le tumbará los presupuestos por primera vez esta legislatura.Esquerra cuenta con el apoyo del PSC, pero necesita la abstención o el apoyo de otro grupo para que salgan adelante.Durante el pleno Aragonés ya ha pedido el apoyo de los demás grupos.Le ha reclamado a la CUP, que ya ha presentado otra enmienda a la totalidad, y también a Junts, que ha puesto como condición que se suprima el impuesto de sucesiones y se cree, entre otras cosas, una unidad antiempleo en los Mossos d'Esquadra. Según fuentes de Junts, el ejecutivo no se ha puesto en contacto con ellos en los últimos días ni les ha dado un retorno completo de sus propuestas. De hecho, las mismas fuentes se quejan de que no les han respondido sobre las demandas de rebaja fiscal: aparte de sucesiones, también reclaman deflactar un 5% el IRPF en todos los tramos y la deducción del 15% por gastos de salud. Ahora bien, ¿qué ocurre si el ejecutivo aceptara sus demandas? Desde Junts consideran que hay margen de negociación, pero avisan de que no apoyarán "a cambio de nada". El Govern prevé reunirse mañana con el grupo para abordar los presupuestos; fuentes de los junteros precisan, sin embargo, que el encuentro todavía "no está cerrado".
Durante la sesión de control, el presidente del grupo parlamentario, Albert Batet, ha tendido la mano a Aragonès durante el pleno si opta por "la alternativa" que propone su partido para las cuentas: "Modelo de país, equilibrio territorial, menos impuestos y menos burocracia". Pero también le ha criticado: se ha referido al "guirigay con tics de tripartito" en Catalunya y ha censurado que Esquerra haya apoyado las cuentas estatales en los últimos años a pesar de la baja ejecución presupuestaria.
Aragonés también se ha dirigido a la CUP para pedir un acuerdo para los presupuestos: "Si podemos contar con su voto serán mejores", ha afirmado. Pero el rechazo de los anticapitalistas ha sido frontal, con reproches por renunciar a la mayoría independentista y de izquierdas del inicio de la legislatura. "No se puede distinguir el proyecto del Gobierno del del PSC y la patronal", espetó la diputada Mar Ampurdanés, que también lamentó "uno de los mayores cierres de líneas públicas de la historia" en el sistema educativo.
Reunión Gobierno-comunes
Para intentar salir del callejón sin salida, ha habido una reunión este miércoles por la tarde entre comunes y Gobierno, pero no ha servido para desbloquear la negociación. Los comunes plantean que la pista de aterrizaje sea una moratoria a macroproyectos como el Hard Rock mientras dure la sequía, una medida que, en público, la Generalitat descarta argumentando que supone una injerencia en la tramitación urbanística sin amparo legal. Fuentes del grupo parlamentario recalcan, sin embargo, que el ejecutivo catalán todavía no les ha dado una respuesta al respecto. Por su parte, fuentes del Govern aseguran que ha reiterado que lo que proponen "no es viable". "Sobre Hard Rock las posiciones están en el mismo punto", añaden las mismas fuentes, que consideran que hoy se ha avanzado en la carpeta de propuestas sociales.
¿Aceptarían los socialistas una moratoria? Hasta ahora, el PSC ha dicho que ningún proyecto debe quedar al margen de las restricciones por falta de agua. Ahora bien, también se han encargado de remarcar esto es aplicable a los lugares donde exista emergencia por sequía; y en el Camp de Tarragona, donde debería ubicarse el Hard Rock, la situación es de prealerta. El Gobierno no tira la toalla y tiene la esperanza de encontrar una fórmula que no haga saltar de la ecuación a los socialistas. En cualquier caso, los comunes y el equipo negociador de la Generalitat han acordado volver a verse esta semana para tratar de avanzar en la negociación.
Isla reivindica el acuerdo y presiona a los comunes
Quien se ha situado este miércoles junto al Govern ha sido el PSC. El líder de los socialistas, Salvador Illa, lamentó la posición de Jéssica Albiach sobre los presupuestos afirmando que era "curioso" que sea una "cuestión insalvable" lo que "el año pasado no lo era", en referencia al Hard Rock. El socialista ha reivindicado "la política útil" que dice practicar su partido y lo ha hecho aplaudiendo el contenido de los presupuestos. Sin embargo, no ha sido de cargar contra "la excitación y el ruido" que se ha escuchado en la cámara con críticas a las cuentas.
Precisamente, la derecha unionista ha criticado el contenido de los presupuestos por "continuistas". Ciudadanos ha lamentado "la década perdida", "priorizando construir nación identitaria", y el líder del PP, Alejandro Fernández, ha tenido un enganche con el presidente por el "no a todo" que atribuye al Gobierno a proyectos como la ampliación del aeropuerto de El Prat, el Cuarto Cinturón y el Hard Rock: "¿Pero a qué demonios pretenden que se dedique la gente? Del rastaflautismosólo pueden vivir los niños de papá".