Aznar también rechaza la coalición con Vox en Castilla y León

El PP exige a Sánchez romper con ERC y Bildu a cambio de hacer lo mismo con la extrema derecha

3 min
L'expresident del gobierno español José Maria Aznar durante un acto al Círculo Ecuestre de Barcelona este miércoles

Madrid"Ni puedo responder, ni tengo que hacerlo, ni quiero", ha asegurado José María Aznar cuando le han preguntado si el PP tendría que gobernar en coalición con Vox en Castilla y León. Pero se ha entendido perfectamente que no es partidario. En una charla en el Círculo Ecuestre de Barcelona esta tarde, ha señalado que el Reagrupamiento Nacional francés es uno de los referentes de Vox y que no vería las "ventajas ni para España ni para Francia de que Marine Le Pen estuviera en el gobierno". La extrema derecha ya ha pedido entrar en el ejecutivo de Alfonso Fernández Mañueco si quiere sus votos y Santiago Abascal dijo la noche electoral que a Juan García-Gallardo, su candidato, se le estaba "poniendo cara de vicepresidente", cosa que ha extrañado Aznar. "¿Quieres que sea vicepresidente de una cosa que te quieres cargar?", se ha preguntado el expresidente español, recordando que Vox recela del estado de las autonomías y, particularmente en Castilla y León, defiende las provincias. "Eso [Vox] lo tendrá que explicar", ha añadido.

A pesar de las diferencias incluso personales, Aznar ha avalado así a Pablo Casado, que el martes también marcaba distancias con la formación ultra para defender el gobierno en solitario de Mañueco. El presidente del PP remarcó el carácter "constitucionalista y europeísta" del PP y lo diferenció del de Vox, que se alinea con las extremas derechas europeas como la húngara de Viktor Orbán, aliado de Vladímir Putin contra la Unión Europea. Pese a los recelos del PP a pactar una coalición con Vox, otra cosa es que consiga no hacerlo.

La opción de una abstención del PSOE se presenta complicada. Tal como hizo este martes en el Senado, el presidente español, Pedro Sánchez, ha vuelto a poner una serie de condiciones: "El PP tiene que pedir ayuda, explicar por qué la ultraderecha no puede entrar en los gobiernos y decir si es para cada día, por siempre jamás y en todos los territorios", ha apuntado durante la sesión de control en el Congreso. Dirigiéndose directamente a Casado, el secretario general del PSOE le ha dicho: "Ha de decidir si abre las puertas a un gobierno del PP con la ultraderecha o no". Sánchez ha sido todavía más explícito que el martes, pero es un escenario que casi descartan los dos bandos.

¿Sánchez o la extrema derecha?

Fuentes socialistas se muestran convencidas de que los conservadores "ya lo tienen hecho" con la extrema derecha y que por eso no piden a los socialistas la abstención. Desde el PP restan credibilidad al ofrecimiento de Sánchez y allanan el terreno para explicar un hipotético pacto con Vox, que en todo caso dejan en manos de Mañueco. El portavoz del partido, José Luis Martínez-Almeida, sin embargo, se ha encargado de legitimarlo. "El problema de España no es que Vox entre en un gobierno, sino el gobierno de Pedro Sánchez. No me parece tan importante para el futuro de España que Vox entre como que Sánchez continúe siendo presidente del gobierno español con el apoyo de Bildu y ERC, que quieren acabar con el régimen constitucional del 78", ha afirmado en declaraciones a los medios. El alcalde de Madrid, de hecho, ha exigido al PSOE que se comprometa a no pactar más con ERC y EH Bildu si quiere que el PP rompa con Vox.

Este martes, Casado ya puso en marcha el relato de equiparar el "populismo de izquierdas y el de derechas" y de poner en el mismo saco al independentismo y a Vox. Y en esta misma línea, Casado ha preguntado a Sánchez si está "del lado de las víctimas o de los verdugos", sin obtener respuesta por parte del presidente. "Es muy grave", subrayan en la dirección del PP, que se afana en normalizar una nueva etapa con Vox.

stats