ENTREVISTA

Joaquim Forn: "Algo bueno de la prisión es que hemos salido con las convicciones todavía más fuertes"

4 min
Antoni bassas entrevista a Joaquim Forn

BarcelonaJoaquim Forn (Barcelona, 1964) atiende al ARA desde casa mediante un Zoom. Admite que todavía no se ha hecho a la idea de que no tendrá que volver a la cárcel de Lledoners.

Antes de salir se les vio discutiendo si tenían que poner cara de alegría o de entierro. Me sorprende que no lo tuvieran claro.

— No, no. Es evidente que todos estábamos contentos, pero la pregunta que nos hacíamos era: ¿Tenemos que demostrar una excesiva euforia cuando todavía hay gente en el exilio o con todos los que están encausados? Creo que es una pregunta muy normal.

¿De quién fue la idea de la pancarta de Freedom for Catalonia?

— Hablamos con Josep Rull, que me preguntó si tenía alguna de aquellas pancartas de los Juegos y le dije que sí. Y coincidimos que era el mensaje que queríamos enseñar a todo el mundo. Pedí a mi mujer que nos la trajera.

¿El gran batacazo que usted sufre en prisión es cuando sueltan a todo el mundo, en diciembre del 17, excepto a los Jordis, a Oriol Junqueras y a usted?

— Sin duda. Fue muy duro porque pensaba que saldríamos todos y era cerca de Navidad. Pero a partir de aquel momento ya me hice fuerte.

¿Todavía piensa aquello de “Fui conseller tres meses y medio y he estado más de tres años y medio en prisión”?

— No, porque los tres meses y medio los disfruté y estoy muy orgulloso de todo lo que hice con dos episodios como los atentados del 17-A y el 1-O. La organización del referéndum, y hacerlo desde el Govern, para mí ha sido el máximo orgullo que podía tener.

Empezamos a mirar hacia el futuro. ¿Podrá ir a ver al president Puigdemont?

— Tengo que esperar que lo confirmen con mi abogado pero una de las primeras cosas que quiero hacer es ir a verle. No nos vemos desde el 31 de octubre de 2017.

¿Cuál será el mensaje para el president Puigdemont?

— Pues trasladarle nuestro agradecimiento porque nuestra situación se ha podido resolver gracias también a muchas decisiones que se han tomado en Europa. Por lo tanto, nuestra prioridad será trabajar para que esta llama después de más de tres años y medio continúe encendida.

¿La afecta de alguna manera a la hora de hablar el hecho que los indultos sean reversibles?

— No, yo no puedo vivir con esta amenaza que durante seis años no puedo cometer ningún delito grave. De entrada yo no reconozco haber cometido ningún delito grave, ni ahora ni antes. Y ahora que estoy en libertad es para decir lo que pienso, para hacer lo que creo que es más conveniente. Una de las cosas buenas de la prisión es que hemos salido con las convicciones todavía más fuertes.

¿Se entiende su condena y a la vez la absolución de Trapero?

— Es incomprensible y este será uno de los fundamentos del recurso en el TEDH. La Audiencia Nacional sentenció que la actuación de los Mossos durante el 1-O fue modélica.

¿Esto es lo que lo convierte en un preso político?

— Sin duda. Una de las veces que Llarena me deniega la libertad escribe que es porque continúo con mis ideas independentistas. Era el contexto de cuando Torra era president y se mantiene la voluntad de llegar a la independencia.

Los indultos tienen muchos padrinos pero quizás quien lo acaba de ligar es Oriol Junqueras con su artículo en el ARA en el que critica la vía unilateral. ¿Aquí ha habido un protagonismo más grande de ERC?

— Es evidente que ERC ha ayudado. He hablado con Oriol y sería injusto no reconocerlo. Desconozco las negociaciones que hubo pero no creo que haya habido renuncias. Anteayer llamé también al abogado Francesc Jofresa, que es el primero en pedirlo. Y también le he querido mandar un mensaje a Jaume Asens.

Pedro Sánchez dice que ha querido ser magnánimo.

— Esta magnanimidad es relativa porque el estado español empezaba a recibir varapalos importantes desde Europa por la desproporción de las penas, admitida incluso por magistrados del TC.

La ANC teme que los indultos limiten la ambición de Junts y ERC.

— En absoluto. Nosotros no hemos negociado nada y ninguno renunciará a continuar trabajando. Lo haremos de una manera diferente porque no estaremos en el frente, pero en el compromiso personal no hay ningún cambio. Para mí tenemos que ver cómo damos cumplimiento a lo que la gente votó en el 1-O.

Jordi Sànchez escribió en el ARA que el 1-O era para forzar al gobierno español a negociar.

— Es una polémica sin sentido. Era evidente que después del 1-O tenía que haber una negociación con el Estado. No creo que nadie se pensara que se haría la independencia y ya está.

¿Cómo valora la posición de los obispos catalanes a favor de los indultos?

— Como creyente estoy muy decepcionado con algunos obispos. El cardenal Omella me ha decepcionado como católico. Le pedimos que nos viniera a ver y adujo que no estábamos en su diócesis. Es un gesto absolutamente contrario al mensaje de los Evangelios.

¿Usted qué le dice a la gente que pasó miedo en octubre de 2017?

— Tenemos que reconocer que entre algunos sectores no nos supimos explicar lo suficientemente bien. En una visita, Jaume Collboni me explicó el caso de una persona que retiraba su dinero porque creía que habría un corralito .

stats