La CUP insiste en que retirará el apoyo al Govern si se diluye el pacto con ERC: "Los acuerdos se cumplen"

La CUP ha vuelto a reiterar este viernes que su apoyo a la investidura de Pere Aragonès no es un "cheque en blanco" y ha advertido de que retirará el apoyo a la gobernabilidad del nuevo ejecutivo si no se cumple íntegramente su acuerdo con ERC o queda desdibujado por el entendimiento con Junts. En su intervención en el debate de investidura de Pere Aragonès, la cabeza de lista de la CUP, Dolors Sabater, ha resaltado que se trata de "un acuerdo de mínimos para orientar el Govern a la izquierda y seguir luchando para afrontar todas las emergencias", pero ha recordado al candidato republicano su compromiso de cumplir "cada uno de los puntos logrados" con los anticapitalistas.

"Queremos señales, y si durante las próximas semanas no se para la represión en los desahucios no podremos sostener esta mayoría parlamentaria", ha avisado, haciendo referencia a las cargas que hubo la semana pasada en la expulsión de una familia en el barrio del Raval de Barcelona. "Las intervenciones de los antidisturbios en los desahucios se tienen que acabar porque hay que garantizar el derecho a la vivienda", ha añadido en este sentido. Sabater, con todo, ha instado a Aragonès a poner de manifiesto su determinación a abrir un nuevo ciclo. Y enumerando algunos de los compromisos adquiridos por ERC, como la renta básica universal o la desprivatización de los servicios públicos, ha dejado claro que "hay que demostrar que el cambio empieza desde hoy" y pasar "de las palabras a los hechos".

Como ya hizo en el anterior debate de investidura, Aragonès ha utilizado el turno de réplica para exponer su voluntad de cumplir el acuerdo con la CUP. "Tenemos toda la predisposición para profundizar en este acuerdo porque une la lucha por la justicia social con la lucha por la independencia", ha remarcado. El candidato republicano, que ha agradecido el apoyo de los cuperos a su investidura, ha puesto en valor que se haya creado un "marco de trabajo honesto" para transformar el país". "Trabajaremos este acuerdo de mínimos para encontrar los puntos compartidos y para convertir en esperanza la angustia de mucha gente", ha concluido Aragonès. A pesar de sus palabras, el diputado Carles Riera ha vuelto a advertir al candidato en la segunda intervención de la CUP, criticando que en el entendimiento con Junts no figuren algunas de sus demandas. "Este acuerdo de mínimos es irrenunciable", ha insistido.

Por este motivo, Riera ha emplazado a Aragonès a hacer efectivo el derecho a la autodeterminación, tal como se detalla en el documento subscrito entre las dos formaciones. "Hemos acordado un embate democrático para ejercer la autodeterminación en esta legislatura, y los acuerdos se cumplen", ha expuesto Riera, que no ha ahorrado reproches al aval en la mesa de diálogo al acuerdo de gobierno. "No dará ningún resultado, como máximo alguna medida de gracia a cambio de estabilidad, cuando lo que hace falta es generar un espacio de lucha, movilización e inestabilidad para hacer tambalear las estructuras del régimen del 78", ha espetado. En la misma línea se había expresado previamente Sabater, que ha reiterado que no participarán en la mesa de diálogo porque es "una vía muerta". "Les pedimos que desencallemos el diálogo en Catalunya y hagamos efectivo el pacto nacional por la autodeterminación para hacerla posible y sostener su resultado", ha exigido la exalcaldesa de Badalona, que ha denunciado que la mesa de diálogo "no conducirá a la resolución del conflicto", sino que "servirá de pretexto para estabilizarlo".

Sabater ha hecho un llamamiento a la unidad para hacer frente a una represión que, a su entender, "ha agudizado el partidismo para llegar a la presidencia de la Generalitat", y ha reclamado superar "esta etapa de rifirrafes y abrir un nuevo ciclo de lucha". La cabeza de lista de los cuperos, de hecho, ha instado al independentismo a construir "una nueva hoja de ruta sin ninguna tentación de rendición", recordando que el SNP escocés ya ha reclamado un nuevo referéndum después de ganar las elecciones. "Basta de sumisión, basta de monarquía, basta de vasallaje, la confrontación es imprescindible porque dentro del Estado no caben nuestros derechos y es una obligación desbordarlo", ha asegurado en un llamamiento "a romper las costuras del Tribunal Constitucional".

Después de recordar que el independentismo es mayoritario desde 2012, también ha lamentado que "la única respuesta del Estado haya sido la represión, con un Govern disuelto, la prisión, el exilio o la negativa a encontrar una salida democrática", y que esta política no haya variado con el PSOE. Y ha cerrado su discurso con un mensaje al presidente español, Pedro Sánchez: "Tenemos una muy mala noticia: seguimos de pie y nos levantaremos tantas veces como haga falta".