El debate migratorio también sacude a ERC
El partido defiende tener mensajes "claros" ante cuestiones como la seguridad y los críticos con Junqueras alertan de un giro en el centro
BarcelonaAunque el crecimiento de Aliança Catalana va principalmente en detrimento de Junts, las últimas encuestas también reflejan un estancamiento de Esquerra. La cuestión migratoria, históricamente, no ha estado en un primer plano entre las fuerzas de izquierdas, tampoco en ERC. Ahora bien, con la extrema derecha pisando los tacones de los partidos tradicionales, la mayoría han redefinido sus estrategias, no sin que esto haya provocado debate interno. La dirección que pilota Oriol Junqueras se ha propuesto hablar "claro" y dar respuestas a los "problemas de la gente". Oriol Junqueras contaba en una entrevista reciente en El Nacional que la Catalunya de los 10 millones no debe ser ahora una "prioridad", sino que el foco debe estar en solucionar problemas como el de la vivienda o el del transporte y poner un refuerzo en los servicios públicos. El líder republicano, además, enviaba mensajes contra la multirreincidencia y los "empleos de carácter delincuencial". Ahora bien, el sentido de sus mensajes, consensuados con la dirección, no ha gustado a todo el mundo dentro del partido.
El debate, según varias fuentes consultadas por el ARA, llegó en el encuentro que mantuvieron los diputados del grupo parlamentario en el Parlament el pasado viernes en Vacarisses. Algunos diputados cuestionaron la línea estratégica del partido en este aspecto, porque consideran que existe el riesgo de alejarse del ADN que ha representado a Esquerra históricamente: que no se aborde este debate desde un prisma de los derechos humanos y que el partido vire hacia el centro. Una tesis que defienden otros cuadros del partido más allá del debate en el grupo parlamentario. "Es una mala idea esquematizar el planteamiento político, corres el riesgo de seguir la estela reaccionaria", apunta una fuente crítica con la dirección actual, que añade: "Podemos hablar claro y de lo necesario, pero no ir a remolque de la ola reaccionaria". "La ciudadanía necesita respuestas claras a los problemas", responde, en cambio, una fuente cercana a la dirección, que defiende que esto no implica ningún viaje ideológico al centro.
Los militantes críticos con el planteamiento de la dirección defienden abordar la cuestión migratoria, pero sin renunciar a la identidad de Esquerra y que el partido no se vea condicionado por el contexto actual. "No podemos comprarles el marco mental", apunta otra voz. Desde la dirección aseguran que no han abandonado línea ideológica alguna en la cuestión migratoria. Ahora bien, también defienden no rehuir ningún debate. "La seguridad es de izquierdas porque la derecha ya se la paga", defienden fuentes de la dirección republicana, que replican a las voces críticas que no existe ningún cambio de estrategia del partido, sino que Esquerra lo que hace es dar respuestas a los problemas actuales, también al de la seguridad, sin vincularla a la inmigración.
Y en este sentido defienden, por ejemplo, que ante la multirreincidencia, la justicia debe actuar más "rápido". De hecho, Junqueras decía en una entrevista en TV3 hace pocos días: "La multirreincidencia debe perseguirse". De hecho, desde el territorio, la mayoría de voces consultadas piden no rehuir ningún debate. "Desde la izquierda la tendencia es no hablar de algunos temas, entonces regalamos el relato a la derecha", apunta un alcalde republicano, que también añade, eso sí, que ese relato siempre debe marcarle la defensa de "derechos y oportunidades para todos". "Hay que hablar de todo, pero también combatir el fascismo y no asumir su discurso", apunta al ARA otro alcalde de ERC.
Esquerra no quiere abordar el debate migratorio de forma independiente de otras cuestiones como es el refuerzo de los servicios públicos o el problema de la vivienda, porque son debates interconectados. Ahora bien, a algunos militantes les chirría que Junqueras, aparte de poner énfasis en la defensa del derecho a la vivienda, también haya incluido un mensaje en defensa de los pequeños propietarios. "Debemos proteger el derecho de una persona a disfrutar de los beneficios de esta vivienda", dijo el líder republicano en la misma entrevista de TV3. Hablaba de una persona que, con sus ahorros, hubiera comprado un piso y lo hubiera puesto en alquiler "para tener un complemento en su jubilación". Pero algunas voces de ERC no debería ser el foco del mensaje, sino que debería ir al resolver, por ejemplo, uno de los problemas que ven más urgentes: generar más vivienda pública. "Somos un partido con vocación de mayorías", se defienden desde la dirección.
Las pugnas en Girona y Tarragona
Más allá del debate sobre la cuestión migratoria, en el partido siguen latentes las pugnas internas. La evidencia fue en Girona, en las primarias para elegir al alcaldable de la ciudad que se disputaron Marc Puigtió y Adam Manyé. El primero tenía el aval de Oriol Junqueras y el segundo había sido ubicado en Nueva Izquierda Nacional –la candidatura que le disputó el liderazgo en Junqueras en las primarias de hace un año–. Puigtió ganó la votación por tan sólo un voto y con polémica, porque se anuló un voto que había marcado la candidatura de Manyé con un adhesivo. Ahora el caso está en la comisión de garantías, que debería emitir una resolución de cara a la próxima semana, informa Mariona Ferrer i Fornells.
En Tarragona, Xavier Puig, actual concejal en el consistorio de la ciudad, fue el primero que se postuló para liderar a los republicanos tarraconenses, y se enfrentará con Saül Garreta, ex director del puerto de Tarragona. Puig formó parte de la candidatura de Foc Nou, de Helena Solà y Alfred Bosch, en las primarias del partido de hace un año, mientras que Garreta apoyó a Oriol Junqueras y actualmente forma parte de la ejecutiva nacional como secretario de transición ecológica y deportes. Puig tiene el aval del exalcalde de Tarragona, Pau Ricomà, que se puso junto a Nueva Izquierda Nacional, mientras Garreta hizo la presentación oficial de su candidatura acompañado de personas como la portavoz de ERC en el Parlament, Ester Capella, o el ex diputado en el Congreso, Joan Tardà. Puig parte con ventaja en la carrera porque recogió 124 avales frente a los 77 de Garreta. El fallo se decidirá en la votación del 4 de octubre.