Acoso sexual

Eduard Pujol afirma que la restitución como militante de JxCat es un "primer paso" para rehabilitar su imagen

Califica la decisión de "gesto importante" pero insuficiente

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Eduard Pujol en una imagen de archivo

Barcelona"Respeté la decisión de mi partido, a pesar de ser profundamente injusta. Que ahora me haya levantado la suspensión de la militancia es un primer paso hacia mi rehabilitación pública". Así se expresa el ex portavoz de JxCat en el Parlament Eduard Pujol en un comunicado hecho público este martes a primera hora de la mañana, reafirmándose en su "inocencia" después de que el partido le haya pedido disculpas y lo haya decidido reparar. "Restituiré mi honor", promete.

Desde que lo apartaron de sus cargos por denuncias internas de presunto acoso sexual, las afectadas no han acudido a la justicia. Un hecho que, según explicó ayer el secretario general de Junts, Jordi Sànchez, ha hecho que el partido haya revisado su posición inicial.

Pujol, tal como remarca el comunicado, sí ha acudido a los tribunales, y ha interpuesto dos demandas por injurias, calumnias y amenazas a las mujeres que habían elevado las quejas. Según el exdiputado –un cargo que ya no puede recuperar–, las personas que lo "difamaron", en alusión a las personas que se quejaron internamente, eligieron "este camino expresamente". "Ellas solo buscaban divulgar mentiras públicamente sin que les importara nada más. A estas personas no les han importado ni la verdad, ni la protección de ningún derecho, ni tampoco el daño que hacen", sentencia en el escrito.

Un "gesto muy importante"

Después de la decisión de restituirlo como militante –cosa que Pujol destaca que ha sido por "unanimidad" de la ejecutiva–, el exdiputado considera que es "un gesto muy importante" por parte del partido, puesto que nos encontramos en una sociedad –añade él– que no está acostumbrada a la "rectificación". "Sabía que este momento llegaría porque las mentiras, al final, caen por su propio peso", opina.

A su entender, con esta decisión se "inicia" un camino que tiene que continuar, a pesar de que fuentes del partido descartan que tenga un peso orgánico específico en la formación. Y es que para Pujol se trata de un movimiento necesario pero "insuficiente" a la vez. "No desfalleceré. Mantengo la voluntad de llegar hasta el final, por mí y porque este tipo de situaciones –la difamación y el linchamiento público gratuito– no se vuelvan a producir", acaba el exdiputado en el comunicado.

Pujol se encontraba en esta situación desde el mes de octubre, cuando después de varias denuncias internas de presunto acoso sexual la dirección del partido lo forzó a apartarse del cargo y dejar su escaño de diputado. Sànchez reconoció ayer en rueda de prensa que esto es difícil de revertir, pero afirmó que revisarán su actuación para asumir "lecciones" aprendidas. En todo caso, defendió la actuación del partido para no dar una sensación de "impunidad" ante este tipo de acusaciones.

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