Aragonés seguirá como líder en la oposición si ERC no se mantiene en el Govern tras el 12 de mayo
El presidente de la Generalitat defiende "plantar cara" desde la cámara catalana a una hipotética alianza Junts-PSC
BarcelonaPere Aragonès asegura que no se plantea otro escenario después del 12 de mayo que no sea revalidar la presidencia de la Generalitat. Pero las encuestas no sitúan a Esquerra en primera posición, sino en tercera, por detrás del PSC y Junts. ¿Qué hará Aragonés si pierde la presidencia? Él mismo ya ha descartado en varias ocasiones formar parte de un Gobierno en el que no sea el presidente por "responsabilidad" con la institución. ¿Significa esto que abandonaría la política? Hasta ahora el candidato republicano había dejado vislumbrar que podría quedarse haciendo política institucional en el Parlament. Lo confirmó este miércoles cuando aseguró que, ante un hipotético pacto entre Junts y el PSC, se quedaría haciendo oposición a la cámara. "Me correspondería quedarme como jefe de la oposición", ha afirmado en una entrevista en TV3.
Esquerra ha intentado evitar valorar durante toda la campaña un escenario en el que el partido no revalide la presidencia por no situarse en el marco que establecen la mayoría de encuestas. De hecho, en las últimas horas incluso afirmaron que las encuestas no sirven para "saber la opinión" de la ciudadanía, sino para "condicionarla", según Oriol Junqueras, que añadía que el reto de ERC era " remontar" los pronósticos. Sea como fuere, este miércoles Aragonés sí ha admitido que, si no puede volver a ser presidente para que el PSC y Junts lleguen a un acuerdo de gobierno, se quedará en el Parlament a hacer oposición. "Juntos y el PSC se pelean por la patria, pero se ponen de acuerdo a la hora de hablar de patrimonio, con un mismo modelo de desarrollismo que forma parte del pasado: si esto se acabara conformando, incluso quedando por delante de todos, me correspondería quedarme como jefe de la oposición", afirmó. Pero no aclaró qué hará si es ERC quien entra en el Govern de la mano del PSC o de Junts.
Un rato más tarde, en un acto para reivindicar las políticas feministas de la conselleria de Igualdad, Aragonès ha insistido en que su objetivo es ser "elegido presidente de la Generalitat" , pero que ante una alianza "del pasado, desarrollista, habría que plantar cara". A lo largo de toda la campaña, el candidato republicano ha utilizado un hipotético pacto entre estas dos formaciones para intentar aglutinar el voto independentista en torno a su proyecto, blandiendo el fantasma que un gobierno de Junts y PSC supondría volver a los recortes. Pero, hoy por hoy, tanto Junts como el PSC se vetan mutuamente para gobernar juntos.
A lo largo de toda la campaña, los republicanos han evitado priorizar a Junts o al PSC como socios de Govern después del 12 de mayo y Aragonès ha basado su respuesta en el "qué". El partido pone tres condiciones para los pactos poselectorales: un referéndum acordado con el Estado, negociar una financiación singular para Catalunya y un "refuerzo" del estado del bienestar y la lengua catalana. "Salvador Isla está muy lejos de estos planteamientos", ha afirmado este miércoles. Una tesis que ha ido repitiendo a lo largo de estos quince días de campaña, aunque ha evitado vetar a los socialistas. "Esperaremos al 12 de mayo", decía el lunes.