España retrocede en la operación en el mar Rojo por el desacuerdo interno
El gobierno español bloquea el apoyo europeo a la misión de Estados Unidos contra los ataques de los houthis
BarcelonaPrimer estirabot del gobierno español en política internacional esta legislatura. Hacía días que España huía de estudio sobre su posible participación en la misión naval desplegada por Estados Unidos en el mar Rojo frente a los ataques de houthis de Yemen en las rutas comerciales de la zona. Por último, y sin dar explicaciones oficiales, el gobierno español se ha desmarcado del consenso en el Consejo de la UE y ha bloqueado el apoyo europeo a la misión americana, según informa Europa Press. El alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, había dado aval expreso a la intervención europea para garantizar "la libertad de navegación" en el mar Rojo ante los ataques de los houthis, que cuentan con el apoyo del Irán. El refuerzo europeo debía concretarse modificando el mandato de la operación que la UE tiene activa contra la piratería en el océano Índico, estrechando la colaboración con los americanos. España tiene un peso importante en esta operación, que recibe el nombre de Atalanta.
La polémica comenzó después de que el Pentágono emitiera un comunicado en el que informaba de que la operación Prosperity Guardian en el mar Rojo contaría con la participación de España, aparte de otros países. La ministra de Defensa, Margarita Robles, salió al paso asegurando que la contribución española quedaba sujeta a las decisiones de la UE y la OTAN. Incluso el vicealmirante español que comanda la división española en la operación Atalanta acabó borrando un mensaje en X en el que confirmaba que España se sumaba al apoyo europeo.
Malestar en Sumar
La posible participación española en la operación americana había generado malestar en Sumar. La vicepresidenta y líder de la formación, Yolanda Díaz, criticó que la comunidad internacional se active tan rápidamente cuando hay “intereses comerciales” en juego mientras que se mantiene de brazos cruzados ante la masacre en Gaza a manos de Israel. En esta carpeta, PSOE y Sumar han acordado una hoja de ruta que debería ahorrarles futuros encontronazos, basada en el reconocimiento del estado de Palestina. El futuro del Sáhara y el pacto migratorio en la UE son, en cambio, asuntos en los que las discrepancias entre socios de coalición siguen vivas.