El Govern avisa al Estado de que renunciar a los Juegos sería perder una "oportunidad histórica"

Barcelona / MadridCada día que pasa se acumulan nuevos interrogantes sobre la viabilidad de la candidatura catalano-aragonesa para los Juegos Olímpicos de Invierno, marcada por la falta de entendimiento entre gobiernos. A pesar de que la Generalitat quiere mantener viva la llama de que organizar el certamen es posible, es consciente de que cada día hay más señales de alerta. Este martes la portavoz del ejecutivo catalán, Patrícia Plaja, ha avisado al Comité Olímpico Español (COE) y el gobierno de Pedro Sánchez que renunciar a la candidatura sería "perder una oportunidad histórica". "Nos extrañaría que fuera así", ha resuelto. A pesar de las dudas, tanto desde Catalunya como desde Aragón y La Moncloa se asegura que no hay nada perdido.

La Generalitat se pronuncia en estos términos después de que el ARA publicara este lunes que la candidatura está contra las cuerdas, hasta el punto de que el desenlace podría ser inminente y que el COE podría comunicarlo esta misma semana. Desde la plaza Sant Jaume de Barcelona se asegura que "ni oficialmente ni extraoficialmente" se les ha comunicado nada sobre esta cuestión. Ahora bien, Plaja ha evidenciado que la Generalitat sabe que existen problemas. "Estamos a la espera. Tenemos casi tantos interrogantes como ustedes", ha dicho a los periodistas desde la sala de prensa del Palau de la Generalitat.

Por ahora, el Govern busca ganar tiempo e insistir que, si hace falta, Catalunya podría "liderar" la candidatura e incluso organizar los Juegos en solitario. Pero la última palabra es del COE, que no ha conseguido convencer a Aragón de que aceptara los términos en los que se pactó el proyecto inicialmente. La Generalitat siempre ha lamentado que hubo un "acuerdo técnico" inicial a tres bandas –entre Catalunya, Aragón y el COE– y que, a la hora de la verdad, el gobierno del socialista Javier Lambán se desdijo. "No queremos pensar que el problema sea que lo lidera Catalunya", ha resuelto la portavoz.

Últimos movimientos

En términos estrictamente catalanes, renunciar a la candidatura sería un contratiempo serio para el Govern. En primer lugar, porque es una de las prioridades de la legislatura expresadas por el president Pere Aragonès –sale en el plan de Govern–. En segundo lugar, porque la Generalitat ha sufrido el desgaste de los opositores al certamen y, si no hay Juegos, también supondría una decepción para los partidarios. Unos partidarios que, según una encuesta del Govern, eran mayoría a los territorios afectados por el evento deportivo.

Desde La Moncloa tampoco se ha querido confirmar que todo esté perdido. Preguntada la portavoz Isabel Rodríguez por las dudas cada vez más crecientes, ha expuesto que el ejecutivo español "lo que desea es que el COE presente candidatura ganadora y tenga opciones". Y en este sentido ha habido movimientos en Aragón sobre la materia. El líder del PSC, Salvador Illa, se ha reunido en Zaragoza con el presidente Lambán para abordar el tema. Según fuentes conocedoras del encuentro, los dos protagonistas han coincidido en "la necesidad de entendimiento" para conseguir deshacer el desacuerdo. En declaraciones a los medios, Illa ha abogado por "hacer cesiones" y trabajar "hasta el último minuto". Sea como fuere, ninguna de las partes puede garantizar ahora mismo que se acabe presentando la candidatura.

El decreto de la consulta

A medida que se ha ido acercando la fecha tope para cerrar la candidatura, los Juegos han sido una fuente inagotable de controversias. La última se ha conocido este martes, y es que el gobierno español ha enviado un requerimiento a la Generalitat amenazando con impugnar el decreto que hizo el Govern para poder celebrar la consulta de los Juegos, prevista para el otoño. El ejecutivo de Pedro Sánchez considera que el decreto invade competencias y pone en entredicho que desde Catalunya se puedan organizar votaciones de este tipo.

"Es otro ataque del gobierno español hacia nuestras competencias", ha lamentado Plaja, que ha asegurado que el decreto es plenamente legal y que la consulta de los Juegos no se podrá "frenar". "El problema no es la legalidad del decreto, que la tiene toda, sino los nervios que aparecen en Madrid cada vez que se habla de consultar a los catalanes", ha dicho. A pesar de la vehemencia de los reproches, el Govern confía en llegar a un acuerdo con el gobierno español –en concreto, con los ministerios del Interior y de Política Territorial– y que finalmente no concrete la impugnación del decreto ante el Tribunal Constitucional.

De momento se ha abierto un periodo de ocho meses entre las dos administraciones para negociar. Según la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, lo que hay hoy por hoy son conversaciones con la Generalitat para llegar a un acuerdo y que la norma "sea conforme al ordenamiento español". A priori, pues, la consulta sobre los Juegos no tendría que peligrar. Otra cosa es que finalmente no haya una candidatura para someter a votación.