El Govern responsabiliza a Sánchez del conflicto con Aragón por los Juegos

BarcelonaEl conflicto abierto por el liderazgo de los Juegos de Invierno de 2030 amenaza con abrir un nuevo frente entre los gobiernos catalán y español. Después de que el presidente de Aragón, Javier Lambán, plantara a Pere Aragonès, con el que se tenía que reunir este viernes en Balaguer para tratar de acercar posiciones sobre el proyecto olímpico en los Pirineos, la consellera de Presidencia, Laura Vilagrà, ha responsabilizado a Pedro Sánchez de haber provocado la discrepancia con el gobierno aragonés. En declaraciones a RAC1, Vilagrà ha afirmado que el presidente español "hizo una promesa que no podía hacer": repartir la organización de la candidatura al 50% entre Catalunya y Aragón. "Tendrá que ser muy técnica y ponderada en los activos que tiene cada territorio, y entrar a valorar el 50% es absurdo", ha argumentado la consellera, que cree que hablar de porcentajes significaría convertir la candidatura en "política".

Con sus palabras, Vilagrà se ha remontado a las declaraciones que Sánchez hizo en septiembre en Aragón justo después de la reunión de la mesa de diálogo con la Generalitat. En lo que el Govern interpreta como un juego de equilibrios con barones socialistas como Lambán, reticentes a la negociación con Catalunya, el jefe del ejecutivo español afirmó entonces que las dos comunidades autónomas estarían implicadas en el impulso de los Juegos "en pie de igualdad"; esta es una premisa a la que se agarra ahora el presidente aragonés para rechazar que la Generalitat lleve la voz cantante. Vilagrà, que ha criticado el "desaire" de Lambán, ha denunciado un intento de llevar los Juegos al terreno del "conflicto político y la guerra entre territorios" y ha dejado claro que el Govern no lo abonará. "Hablando se llega a posiciones razonadas", ha asegurado, y ha destacado que seguirán trabajando con el Comité Olímpico Español (COE) los aspectos técnicos de la candidatura, que están muy avanzados y generan un acuerdo casi total.

Desde la Moncloa, sin embargo, han situado precisamente la polémica en una pugna entre Catalunya y Aragón, y se han inhibido del conflicto. La ministra de Transportes, Raquel Sánchez, ha pedido desde Barcelona "dejar trabajar" a las dos partes con la confianza de que de este modo los dos gobiernos autonómicos llegarán a un "consenso". La también dirigente del PSC, de hecho, ha evitado esta vez mojarse sobre cómo se tendría que repartir el peso en el liderazgo de los Juegos. "Ahora es el momento de que se trabaje entre las dos comunidades autónomas [...]. Creo que es el momento de no introducir elementos de distorsión", se ha limitado a decir.

Quejas a Aragonès

A la espera de cómo se resuelve el frente político con el Estado, las diferencias con los Juegos también se han hecho notar en Catalunya. Si esta semana tanto los comuns como la CUP, los principales socios del Govern, han expresado su oposición a la candidatura por motivos ambientales y de tipo de proyecto socioeconómico de país, la Síndica de Aran, Maria Vergés, ha defendido esta mañana en TV3 que el Comité Olímpico Español "planteó que la candidatura tenía que ser en igualdad" y ha rechazado la "preeminencia de un territorio respecto al otro": "El Pirineo es de todo el mundo", ha dicho abonando las tesis de Aragón.

Mientras tanto, el president Pere Aragonès se ha encontrado este viernes en la Noguera –donde se ha desplazado igualmente a pesar de la suspensión de la reunión con Lambán– con un abucheo de la veintena de personas que han asistido a la convocatoria de la Plataforma Stop Juegos Olímpicos. Minutos después, el jefe del ejecutivo se ha reunido en privado con dos de los contrarios a la candidatura del Pirineo para oír sus reivindicaciones. El portavoz de la Plataforma, Bernat Lavaquiol, ha criticado que el Govern quiera hacer una consulta "sin disponer todavía de un proyecto" para tener –ha dicho– "carta blanca" y después "hacer lo que quieran" si se aprueba.