Junqueras avisa al PSOE: "No sería la primera vez que tumbamos unos presupuestos"

En pleno congreso del PSOE para reforzar el liderazgo de Pedro Sánchez, ERC redobla la presión sobre los socialistas para que muevan ficha si quieren su apoyo a los presupuestos del Estado. Cuando faltan poco más de quince días para que las cuentas se sometan al debate en la totalidad en el Congreso (3 y 4 de noviembre), Oriol Junqueras ha lanzado un aviso a la Moncloa: "No sería la primera vez que nos vemos obligados a tumbarlos". El presidente de Esquerra ha dejado claro ante el consejo nacional de los republicanos que en estos momentos queda "mucho camino por recorrer" para hacer posible el sí de su partido a los números estatales. Pero el ex vicepresidente del Govern no ha hecho referencia al portazo del gobierno español al traspaso de vías de Cercanías ni de la comisaría de Vía Laietana, o a un acuerdo inminente para blindar el catalán en la nueva ley del audiovisual, caballos de batalla del independentismo en la negociación. Se ha limitado, por el contrario, a señalar que el ejecutivo del PSOE y de Unidas Podemos "tendría que ser consciente y haber aprendido que, si quiere aprobar unos presupuestos, tienen que ser buenos para la ciudadanía".

Y esto, ¿en qué se traduce? "Que se cumplan", ha resuelto el líder republicano, y ha puesto como "condición indispensable" para el sí de ERC que se ejecuten las partidas previstas para Catalunya. "De nada sirven promesas y declaraciones de inversiones que nunca llegan", ha argumentado. Los datos de ejecución presupuestaria han perjudicado históricamente a Catalunya –el primer semestre de este año solo se había recibido el 11% del total– en relación con otros territorios como Madrid, y es en este punto al que Junqueras se ha agarrado para presionar a Sánchez. Su discurso, en todo caso, ha concedido al presidente español una de cal y otra de arena. A pesar de amenazar con un rechazo a las cuentas –ERC es clave para que salgan adelante–, también ha dejado claro que si los presupuestos resuelven los incumplimientos del pasado es "evidente" que tendrán su apoyo. Y ha acabado lanzando un mensaje para los recelosos con el entendimiento con los socialistas: "No apoyamos los presupuestos de un partido o de un gobierno concreto, apoyamos y aprobamos los que son buenos", ha sentenciado.

La "solidaridad" con Puigdemont

La intervención de Junqueras, que ha insistido en que cada día hay más "razones" para ser independentista, ha evitado vincular las exigencias sobre de los presupuestos del contexto de judicialización. Esto no ha evitado que arrancara el discurso descargando la artillería sobre el Tribunal de Cuentas, que esta semana tumbó el aval del Institut Català de Finances (ICF) para cubrir la fianza de 5,4 millones de euros de la treintena de encausados, entre los cuales está mismo líder de ERC. Según su parecer, el tribunal no es sino un órgano "puramente político" que cumple una "misión política" por encargo de aquellos partidos que nombraron sus miembros (el PP y el PSOE, además de IU). Y ha denunciado el especial ensañamiento con el independentismo: "Lo que pretenden embargar no son nuestras casas, ¡son también las casas donde viven nuestros hijos!", ha denunciado.

Ante esta ofensiva, el republicano ha subrayado la necesidad de unidad y ha reivindicado la "solidaridad" de ERC. Lo ha hecho después del choque de este viernes entre su partido y JxCat por el hecho que los republicanos pagaran, entre otros, la fianza por la acción exterior del expresident Carles Puigdemont. "No queremos ni nos podemos permitir el lujo de dejar a ningún independentista solo, no queremos dejar a nadie por el camino", ha defendido. Desde Junts critican que se había pactado hacer los pagos en nombre de la Caixa de Solidaridad, y añaden que su socio en el Govern no se ha puesto en contacto con Puigdemont "en ningún momento" para "ninguna gestión relacionada con este tema". Junqueras ha obviado las críticas y ha insistido que ERC ponía "todas las herramientas y recursos" al servicio de la causa anti represiva. "Lo hacemos con modestia pero también con orgullo", ha remachado.