La justicia española investiga por primera vez la operación Catalunya

BarcelonaEl juzgado número 13 de Madrid ha admitido la querella presentada por el expresidente del Barça Sandro Rosell y ha ordenado investigar al excomisario José Manuel Villarejo y otros mandos policiales por la llamada operación Catalunya, un entramado político, policial, judicial y mediático que se habría dedicado a fabricar pruebas contra personas vinculadas al proceso independentista. La Audiencia Nacional había rechazado investigarlo, pero según han avanzado La Vanguardia y Crónica Librela Fiscalía avala la competencia del juzgado, y el magistrado –que además de a Villarejo ha imputado al inspector Alberto Estévez, al exinspector Antonio Giménez y el exagregado del FBI en la embajada de los Estados Unidos en Madrid Marc L. Varri– sostiene que los hechos denunciados "hacen presumir de la posible existencia de delitos de organizaciones criminales".

La querella de Rosell vincula la operación Catalunya con los casi dos años que pasó en prisión preventiva por un supuesto caso de blanqueo de capitales y apropiación indebida. Varias informaciones publicadas en los medios han apuntado desde entonces que fue víctima de los movimientos de Villarejo en el marco de la operación Catalunya. Según unos audios publicados en El Mundo hace unos meses, fue la expresidenta del PP en Catalunya Alícia Sánchez-Camacho quien aconsejó al excomisario que investigara a Rosell por sus conexiones con el independentismo.

Si bien la justicia española investiga desde hace tiempo las operaciones y negocios opacos de Villarejo, hasta ahora había rechazado hacerlo específicamente por la campaña política, policial y mediática dedicada a encontrar trapos sucios o a fabricar pruebas falsas contra dirigentes y personas de la órbita independentista. La Audiencia Nacional, de hecho, había inadmitido la querella presentada por el mismo Rosell argumentando que las acciones que se relataban no cumplían los presupuestos legalmente previstos para reconocerle la condición de perjudicado directo en el caso Tándem –que investiga precisamente al excomisario Villarejo–. El mismo tribunal archivó en octubre del año pasado la única pieza de esta causa ligada a la operación Catalunya.

"Mucho ruido" con los Pujol y "el tema de los okupas" de Trias

Ligado a esta trama, este mismo martes El País publica numerosos mensajes de Whatsapp que se intercambiaron entre 2015 y 2019 los entonces secretario de estado de Interior, Francisco Martínez, y director adjunto operativo de la Policía Nacional, Eugenio Pino. Estos mensajes, ahora incorporados al sumario del caso Kitchen, revelan la estrategia de la guerra sucia contra el independentismo y también contra Podemos. Después de que en octubre de 2015 la Audiencia Nacional ordenara el registro en los domicilios y empresas de la familia Pujol, por ejemplo, Martínez pedía "hacer mucho ruido" y una "puesta en escena" con el operativo.

También hablan de supuestas cuentas en Suiza vinculadas a Convergència y sobre Xavier Trias, sobre el cual se difundieron informaciones falsas sobre dinero suyo en el país helvético. "Interesa mover mucho el tema de los okupas en Barcelona, especialmente el alquiler que les pagaba Trias cuando era alcalde. ¿Quién nos puede enviar una copia rápida sobre esto? Y sobre okupas y Colau", dice Martínez en un mensaje de 2016. "No te preocupes, ahora mismo me pongo", responde Pino. "Ya me están ofreciendo la cuenta de [Íñigo] Errejón. Pero con la condición hablada esta mañana, que salga en uno de los dos periódicos", dice el exjefe policial en otro mensaje aquel mismo año.