Dolors Feliu: "Las negociaciones con el PSOE no llevan a ninguna parte"

BarcelonaLa presidenta de la ANC, Dolors Feliu (Roda de Ter, 1964), confía en que la comunión entre la calle y un nuevo espacio político independentista impulsado por la Asamblea sea clave para reactivar el Proceso.

En un momento en que todo el mundo reivindica la unidad usted dice: "La unidad somos nosotros".

— No quería decir la ANC. Me refería a la gente que había manifestándose, a la gente de a pie.

¿Y qué vínculo había entre esa gente? Unos quizás quieren negociar la amnistía, otros, como ustedes, preparan una lista cívica... Hay tantas estrategias como actores.

— La independencia efectiva. No me da la sensación de que el objetivo de la gente sea hacer un viaje de treinta años o empezar a negociar pequeñas cosas. Hace mucho tiempo que hay intentos de negociación y las grandes reivindicaciones de país nunca acaban de resolverse.

¿Se puede conseguir la independencia de repente y no paso a paso?

— Los pasos que nos liberan algo de la represión o dan algo de reconocimiento a nuestra lengua no son pasos hacia la independencia.

¿La amnistía es un paso hacia la independencia?

— Nadie habla de amnistía en el sentido de reconocer el fondo de la cuestión, que es que España no reconoce el derecho de autodeterminación de Cataluña. De hecho, ya dijeron que para ellos es una línea roja. ¿De qué hablamos entonces? ¿De un indulto 2.0 a actuaciones que fueron totalmente pacíficas? Sería una amnistía si dijeran que antes no se podía hacer el referéndum y ahora sí.

¿Una amnistía sin autodeterminación no debería ser suficiente para investir a un presidente español?

— No lo vemos así. Y después de la investidura entendemos que será muy difícil conseguir nada. Pero también decimos que, si se abre alguna puerta, algún resquicio, en estas negociaciones en Madrid para reconocer el 1 de Octubre, los partidos independentistas deberían asumir una declaración unilateral de independencia en el Parlament.

El gobierno español ya ha dicho que no, pero desde el independentismo también existen actores que no consideran efectivo el mandato del 1-O.

— El presidente Puigdemont reclama un reconocimiento del 1 de octubre. Por tanto, diga lo que diga el Estado, si es él quien tiene que investir y los votos de Junts son definitivos... También es verdad que cualquier paso para hacer efectivo el 1 de Octubre debe contar con el reconocimiento del Parlamento actual.

¿Le ha dicho el presidente Aragonés que hoy una DUI no tendría ningún efecto práctico?

— Lo que pedimos a la Diada fue que hablen las fuerzas políticas del Parlament para hacer efectiva esta DUI suspendida en el 2017. El presidente actual dijo en el discurso de investidura que sería quien culminaría la independencia de Catalunya, se pactó dos años de negociación y otros dos de implementación de la independencia.

¿Pactaron dos años de negociación y otros dos para "a ver qué hacemos después"?

— Exacto, y nosotros lo que vemos es que nada se ha hecho efectivamente. Por eso decimos presentar una lista cívica para que realmente se haga la independencia.

¿Cómo la harían la independencia?

— Por un lado, con acciones concretas. Evidentemente, una es arriar la bandera española, pero debe haber dos elementos clave: la decisión del Parlament y la movilización de la calle, una movilización sostenida.

¿Movilizaciones como las del aeropuerto o las que bloquearon la AP-7?

— Creemos que la gente está ahí. Tenemos toda la experiencia del 2017. Cuando Tsunami decía que cortáramos el aeropuerto, la gente no sabía muy bien por qué se hacía.

¿Ahora que Junts también negocia con el PSOE la investidura, cree que existen diferencias con ERC?

— De momento las hay, porque ponen sobre la mesa el reconocimiento del 1-O, pero deberemos estar al acecho.

¿Entiende que Puigdemont negocie personalmente después de seis años en el exilio?

— No me parece ni bien ni mal, cada partido negocia como le parece. El presidente Puigdemont es un gran referente de país y también de Junts y, por tanto, no me parece extraño.

¿Qué le parece que el presidente Aragonés vuelva a participar en la manifestación?

— Bien.

¿Y qué le parece su liderazgo de la estrategia del diálogo?

— Esta estrategia no da frutos para la independencia y ha supuesto una pérdida de votos flagrante del independentismo. Es más, durante esta legislatura el presidente Sánchez se ha jactado, orgulloso, de haber aplicado el 155 en Catalunya.

Ayer el PSOE volvía a recordarlo.

— Por eso mismo entendemos que estas negociaciones no han llevado a ninguna parte, no llevan a ninguna parte, y si esto no tiene más recorrido, pues evidentemente pensamos que se debe tirar por otra vía.

800.000 manifestantes según la ANC y 115.000 según la Guardia Urbana. ¿Cómo puede haber tanta diferencia en las cifras?

— Ayer la Guardia Urbana no apareció, hasta el punto de que la gente tuvo que cortar las calles y tuvimos que llamar al 112. No sé de dónde han sacado estas cifras.

Hace algunos años, la ANC hacía suyas las cifras de la Guardia Urbana. ¿Por qué ahora dan ustedes?

— No sé, yo cuando llegué ya se daban y así se hace.

¿Han renunciado al papel de mediadores dentro del independentismo y han dejado que sea Òmnium quien lo ejerza?

— El papel de la Asamblea no es ejercer de mediador entre partidos, sino ejercer la independencia.