El PDECat pone punto final a su historia

BarcelonaEl PDECat ha decidido poner punto y final a su historia. El presidente del partido, David Bonvehí, ha anunciado la decisión a todos los militantes a través de una carta remitida este sábado, después de que el congreso de la formación haya decidido "dejar paro y no continuar" la actividad política por una amplia mayoría . La determinación llega después de un proceso de reflexión que abrió el propio Bonvehí tras las elecciones españolas del 23-J, en las que el PDECat se quedó sin representación. La candidatura encabezada por el exdiputado Roger Montañola, llamada PDECat-Espai CiU, obtuvo sólo 31.687 votos. Un resultado que él mismo calificó de "derrota sin paliativos".

Ahora bien, éste no era el primer fracaso que se llevaba el PDECat en unas elecciones, ya que el golpe más duro llegó hace dos años, cuando Àngels Chacón tampoco logró representación en el Parlament de Catalunya en las elecciones del 14 de febrero. Tras aquel episodio, el Congreso de Diputados era la única cámara parlamentaria en la que el PDECat estaba allí, ya que sus cuatro diputados se habían escindido del grupo de Junts cuando Bonvehí y el expresidente Carles Puigdemont partieron peras (el 2019 todavía se habían presentado conjuntamente).

¿Qué quedaba, pues, ahora, del Partido Demócrata? Cuenta con 187 concejales y alguna alcaldía –la más importante, Mollerussa, con Marc Solsona–, pero bajo una marca blanca llamada Ara Pacte Local –en las últimas municipales ya no se presentaron con las siglas visibles del PDECat.

Concurso de acreedores

Con la decisión de cerrar la barraca, existe la posibilidad de que el partido se vea ahora inmerso en un concurso de acreedores, aunque todavía no lo ha anunciado oficialmente. La pérdida de representación en las cámaras parlamentarias fue un golpe importante para sus ingresos, por lo que Bonvehí se quedó con poco margen para seguir con la acción política. Ahora han sido el conjunto de militantes los que han decidido ponerle fin, después de una historia llena de turbulencias desde la creación del partido en el 2016.

El PDECat nació en julio de hace siete años, después que Convergència decidiera su autoliquidación. Sus primeros líderes fueron Marta Pascal y David Bonvehí, que nunca acabaron de entenderse con el máximo líder institucional de ese momento: Carles Puigdemont. Pese a compartir espacio político, el PDECat siempre apostó por una vía más pragmática que el jefe del ejecutivo catalán, manteniendo fuertes discrepancias durante el Proceso y, sobre todo, en el referéndum del 1-O. A raíz de esta desconfianza, Puigdemont decidió impulsar su propio partido, Junts per Catalunya, en 2017, del que Bonvehí se acabó desmarcando en 2020: las dos formaciones se escindieron y decidieron hacer su propio camino . Ahora, después de tres años de emprender la aventura en solitario, la trayectoria del Partido Demócrata ha terminado.