El PP cierra la campaña presentándose como el antídoto a los socialistas para intentar neutralizar el efecto Vox

BarcelonaEl estancamiento a las encuestas ha hecho que en los últimos días el PP haya intensificado sus dardos a Vox para intentar evitar un probable sorpasso de la candidatura de Ignacio Garriga. En la recta final de la campaña, Alejandro Fernández ha pasado de obviar a la extrema derecha como había hecho al inicio de la campaña a presentarlo como un partido populista que busca el "conflicto" para intentar pescar entre la bolsa de indecisos que se podrían decantar por Vox. El caso Bárcenas ha truncado las expectativas al alza de los populares, tal como ha admitido el mismo Pablo Casado, y las últimas encuestas ya no les pronostican doblar los resultados como lo hacían hace unas semanas. Todo lo contrario, los conservadores volverían a quedarse en último lugar del arco parlamentario con los mismos cuatro diputados. "Ha sido una campaña muy difícil. Ha empezado con todas las trampas y juego sucio que solo sabe hacer la izquierda. Han intentado por tierra, mar y aire boicotear el proyecto de Alejandro Fernández", ha criticado Casado en el acto final de campaña que el partido ha hecho en Barcelona.

Los populares no rentabilizarían, pues, los fichajes de la exdiputada de Ciudadanos Lorena Roldán y la número dos de Manuel Valls en el Ayuntamiento de Barcelona, Eva Parera. No le habrían servido a Alejandro Fernández para demostrar que el PP es el partido paraguas que puede aglutinar todo el espacio constitucionalista, tal como se había marcado como objetivo para esta campaña. A pesar de todo, Casado ha insistido: "El PP es la casa común del centro derecha, del constitucionalismo". El líder estatal ha vuelto a presentar al PP como el "líder del constitucionalismo" como el partido que defiende la libertad ante Vox. "Nosotros estamos aquí desde hace 40 años y lo estamos sufriendo desde hace años. Otros no estaban", ha reprochado Casado al partido de Abascal ante las "amenazas" de las últimas semanas, que Casado ha condenado.

De hecho, Casado ha querido presentar el PP como el único que hace años que defiende la libertad "y España" ante Vox. Y en este sentido, ha enviado un dardo directo a Santiago Abascal, reprochándole que haya diputados de Vox que defiendan salir de la Unión Europea. "¿Dónde estaría la libertad ante el independentismo? ¿A qué estamos jugando? ¿Nos quieren sacar de la Constitución y la Unión Europea? Es lo mismo que Puigdemont, por eso comparten grupo parlamentario en el Parlamento Europeo", ha afirmado.

No solo es el caso Bárcenas lo que podría haber truncado las perspectivas al alza de los populares, sino que otro de los factores que podría haber influido es haber tenido que apartar al secretario general del partido, Daniel Serrano, justo pocos días antes de empezar la campaña por una denuncia por presunta agresión sexual a una compañera del partido.

El líder estatal, Pablo Casado, se ha volcado en la campaña del PP por el 14-F, pero esto no parece que haya hecho revertir la tendencia de los últimos días. De hecho, Pablo Casado hace meses visita Catalunya, desde el mes de noviembre lo ha hecho de forma semanal. "Iba a decir aquello de 'Ya estoy aquí", pero como estoy todas las semanas, me siento un catalán más", ha empezado su intervención el líder estatal. En los 15 días de campaña, Casado ha estado siete veces en Catalunya y este viernes ha prometido que continuará viniendo después del 14-F.