El PSC pacta con los independentistas una reforma para que Puigdemont pueda votar en el Parlament

BarcelonaAcuerdo para regular el voto telemático en el Parlament entre el PSC, Junts, Esquerra, los comunes y la CUP. Los cinco partidos registraron este viernes una propuesta de modificación del reglamento de la cámara para oficializar lo que hasta ahora había sido una práctica acordada en la mesa para permitir la votación en los plenos de los diputados en el exilio, pero sin amparo legal. El PSC había recurrido al Tribunal Constitucional las decisiones de la mesa aceptando el voto telemático de Lluís Puig a lo largo de la anterior legislatura, pero ahora firma este acuerdo para regularlo dentro del reglamento de la cámara. El voto telemático se permitirá "en situaciones excepcionales" y para los diputados que "tengan compromisos de representación institucional en el extranjero".

Además, se modificarán las normas sobre el voto delegado para ampliar los supuestos en los que es de aplicación –ahora sólo lo es durante permisos de paternidad y maternidad y por enfermedad grave–. También se aceptará en "situaciones excepcionales debidamente justificadas a criterio de la mesa" en las que "se considere suficientemente justificado". Esta circunstancia se dará por acreditada en el caso de los diputados afectados por la amnistía hasta que sus expedientes no queden resueltos, según consta en una disposición transitoria de la norma. Todo ello debería permitir que Lluís Puig, Carles Puigdemont y Ruben Wagensberg, todavía en el exilio, puedan votar a distancia sin obstáculos legales. En el caso de Wagensberg, hasta ahora su voto delegado se amparaba en una baja médica. El pacto llega mientras los socialistas siguen negociando con Esquerra y con los comunes para investir al candidato del PSC, Salvador Illa.

La negativa del PSC a aceptar fórmulas para que los diputados en el exilio pudieran votar había sido un punto de fricción importante entre socialistas y republicanos la pasada legislatura. El pacto gira la tortilla y las reacciones de la derecha no se han hecho esperar. El líder del PP catalán, Alejandro Fernández, ha acusado a los socialistas de estar "liderando" el Proceso después de haber prometido ponerle fin. "Y todavía hay algunos que nos exigen apoyar a Isla...", ha dicho a X. Vox también ha cargado contra el pacto.

Cambios en el grupo mixto

El acuerdo también incluye una propuesta para modificar las normas sobre los grupos parlamentarios, lo que permitirá que los cuperos no tengan que compartir el grupo mixto con Aliança Catalana. En estos momentos, el reglamento no permite que un grupo deje un diputado a otro grupo sólo para que llegue al mínimo para tener un grupo propio (5 diputados) y después vuelva al suyo, tal y como se ha hecho en el Congreso de los Diputados. La reforma pactada prevé que el diputado cedido pueda volver a su grupo los cinco primeros días de cada período de sesiones. Excepcionalmente se podrán realizar estos cambios en los diez días siguientes a la entrada en vigor de esta reforma, según otra disposición transitoria. De esta forma no será necesario que la CUP se espere en el nuevo período de sesiones, y ya se podrá separar definitivamente de la extrema derecha independentista.

Los cinco grupos también han aprovechado la ocasión para pactar otro cambio: a partir de ahora será suficiente con una mayoría de dos tercios en la junta de portavoces para aprobar una declaración institucional del Parlament. El reglamento requiere ahora que se firmen por una unanimidad que, durante la pasada legislatura, ha sido imposible en muchas ocasiones por la negativa de Vox a sumarse a declaraciones que sí concitaban un amplio consenso en la cámara. Las declaraciones de la junta de portavoces, como hasta ahora, requerirán mayoría; la presidencia del Parlamento también podrá hacerlo en su nombre.

La idea es que todas estas modificaciones se incorporen al reglamento este julio, por lo que ya podrían estar operativas si se celebra un debate de investidura. Los grupos han solicitado que se realice por el procedimiento de lectura única.

Intentos fallidos

La reforma del reglamento para actualizar la regulación del voto telemático y el delegado lleva cola desde la pasada legislatura. ERC y la CUP registraron entonces una propuesta en este sentido y para frenar los discursos de extrema derecha en la cámara –sobre este punto, sin embargo, no hay ninguna novedad en el acuerdo hecho público hoy–. En ese momento el PSC ya se abrió a estudiar la posibilidad de llevar al reglamento el voto telemático para algunos supuestos (así se hizo, por ejemplo, durante la pandemia), pero en la mesa los socialistas continuaron votando en contra de permitir al de Puig argumentando que, si quería ejercer de diputado, debía acudir presencialmente a la cámara catalana. La propuesta de los republicanos y cuperos para reformar el reglamento decayó cuando se disolvió en el Parlament, porque nunca llegó a pasar de la comisión competente.