Mazón intenta pasar página de la DANA atizando el anticatalanismo

ValenciaFuera del Parlamento valenciano, una protesta convocada por las asociaciones de familiares de víctimas y damnificados por la DANA para pedir la dimisión de Carlos Mazón. Dentro del hemiciclo, un presidente que ha obviado cualquier autocrítica sobre la gestión hecha el día de la gota fría, que ha alardeado de las medidas adoptadas tras la catástrofe, ha acusado al gobierno español de haber abandonado la Comunidad Valenciana y ha atizado la bandera del anticatalanismo. Éste es el resumen del debate de política general que este martes se ha celebrado en Les Corts y que supone el pistoletazo de salida de un mes clave para comprobar si el jefe del Consell ha logrado desinflamar la indignación ciudadana o, por el contrario, debe continuar recluido en los actos institucionales.

Para intentar cambiar el foco mediático y complacer a sus socios de Vox, Mazón ha optado por un discurso de casi cinco horas –el más largo que se recuerda en el parlamento– en el que ha anunciado que promoverá una modificación de la ley de la Academia Valenciana de la Lengua. La nueva norma debería "perimetrar" su actuación e incluiría un cambio de nombre para que el ente se llame Academia de la Lengua Valenciana. "Sería acorde con el propósito fundacional, que no es otro que defender nuestra lengua como propia, única, singular e inigualable", deja claro Mazón. Se trata, sin embargo, de un anuncio que difícilmente se podrá llevar a cabo porque para su aprobación serían necesarios los votos del PSPV y Compromís, dado que requiere una mayoría de tres quintas partes de Les Corts porque se trata de una institución incluida en el Estatuto de Autonomía.

En la misma línea, el jefe del Consell se ha comprometido a aprobar una ley de señas de identidad para "proteger y promocionar las singularidades del pueblo valenciano" que, seguro, tendrá un sello anticatalanista y que en este caso PP y Vox sí podrían salir adelante con sus votos. "Es nuestra forma de recoger el sentir mayoritario del pueblo valenciano hacia este modelo de convivencia democrática y solidaria que amenazan a quienes quieren vernos convertidos en ciudadanos de segunda", detalló. También en el ámbito identitario, avanzó que impulsará que los estudiantes que tengan que hacer la prueba de la PAU puedan elegir examinarse de valenciano o castellano y elegir cuál de las dos notas los computa.

"No para de mentir"

Junto al presidente, los damnificados y familiares de las víctimas de la DANA han sido los grandes protagonistas del debate. Primero, cuando protestaron a las puertas del parlamento con gritos de "Mazón dimisión", "Mazón en prisión" y "No están muertos, son asesinados". Más tarde, cuando abandonaron la sección para los invitados del hemiciclo después de que el jefe del Consejo afirmara que él no ha elegido "entre víctimas buenas o malas", que está a su disposición "estén asociadas o no" y que algunos familiares le han transmitido su rabia por los intentos de "manipularlas" y ser "señaladas" por reunirse. En declaración a los medios, la presidenta de la Asociación Víctimas Mortales DANA 29-O, Rosa Álvarez, ha aclarado que han dejado el pleno porque el dirigente del PP "no para de mentir".

Las críticas no han alterado la hoja de ruta de Mazón que ha prometido 30 millones de euros para la compra de nuevas viviendas para los ciudadanos con los inmuebles dañados por las inundaciones, cheques para las familias con bebés, ayudas de 500 euros para la compra de material escolar y un millón de euros.

Para trasladar el foco más allá de la DANA, el presidente valenciano también ha hecho un resumen de las políticas fiscales y sociales aplicadas en los últimos doce meses, como la consulta sobre la lengua en la educación. Además, ha anunciado que en breve impulsará nuevas medidas para incrementar la agilidad de la administración –aunque esto implique suprimir mecanismos de control– y aprobar más rebajas de impuestos.

"Anomalía democrática"

Como era de esperar, los argumentos de Mazón no han convencido al portavoz socialista, José Muñoz, de que le ha acusado de estar "fuera de la realidad" y ha calificado de "anómalo" que el político alicantino continúe en el cargo, "insultando a las víctimas en la DANA". En la misma línea, ha dicho que hasta que el dirigente conservador "no se vaya", los valencianos "no podrán pasar página". "No puede ser el líder de la reconstrucción la persona que el día de la DANA estaba de fiesta", insistió antes de reclamarle que aclare dónde se encontraba la tarde de la catástrofe tras el almuerzo con la periodista Maribel Vilaplana y antes de acudir al Cecopio. Igual de duro fue el portavoz de Compromís, Joan Baldoví, quien relató que los familiares de las víctimas se quejaron de que Mazón "intente comprarlas" con sus ayudas. "Sabemos que tuvimos al peor gobierno en el peor momento", resumió el portavoz valencianista antes de pedir al jefe del Consell que acuda a declarar ante la juez y explique que hizo el día de la catástrofe.

Nueve de Octubre convulso y funeral de estado

Convencido de que su futuro todavía no está escrito, el dirigente del PP ha sorteado las peticiones de nuevas elecciones que le formula el PSPV y de dimisión que le reclama Compromís. Para ignorar a la oposición, el político conservador dispone del aval de su partido, que le ha autorizado a intentar revertir la situación; esto es, a intentar remontar en las encuestas. Y es que, según un sondeo que publicó el diario Levanteen mayo [que coincide con un de posterior del CIS], el 80% de la población considera que el presidente valenciano debería dejar el cargo. Para seguir en el Palau de la Generalitat, el jefe del Consell también cuenta con el apoyo de Vox, que le sostiene en la silla, dado que, con la desgastada figura de Mazón y el enfado ciudadano por la insuficiente respuesta de la administración ante la crisis de la DANA, es el partido que más crece tras la tragedia.

El debate de este martes supone el inicio de un período fundamental para el futuro de Mazón. En el horizonte destaca la celebración del Nou d'Octubre, una efeméride que plantea al presidente una disyuntiva difícil: si participar o no en la tradicional procesión cívica de la Diada del País Valencià. Aunque se trata de un acto en el que la mayoría de los asistentes son de posiciones conservadoras, también participan representantes de la extrema derecha. Además, este año podrían acudir damnificados y familiares de las víctimas de la DANA, así como otros colectivos críticos con la actuación del jefe del Consell. Todo ello abona el peligro de que el político del PP sea abucheado e, incluso, sufra algún intento de agresión, dado que se trata de un desfile por la calle.

Pero no asistir supondría reconocer que, un año después, no puede salir a la calle con normalidad. Preocupados por la seguridad de Mazón, desde el Palau de la Generalitat por ahora todavía debaten cuál es la mejor opción. También se contempla convulso el primer aniversario de la catástrofe, cuando con casi toda seguridad la manifestación que cada mes pide la dimisión del presidente valenciano incrementará su participación. Una protesta a la que se añadirá la emotiva celebración del funeral de estado el próximo 29 de octubre.