Sánchez enseña el camino de salida del PSOE a Ábalos: "Quien la hace la paga"
El exministro de Transportes afirma en una entrevista en 'El País' que valorará su dimisión con el partido
MADRIDAyer fue la número 2 del PSOE y vicepresidenta primera del gobierno español, María Jesús Montero, y este sábado fue el propio secretario general del partido y presidente español, Pedro Sánchez, quien enseñó la puerta de salida como parlamentario al Congreso de los Diputados al ex ministro de Transportes, José Luis Ábalos, a raíz del caso sobre las mascarillas de Koldo García, su exasesor. "Quiero reafirmarme en que la lucha contra la corrupción debe ser implacable. Venga de donde venga, caiga quien caiga", ha dicho Sánchez durante su intervención en el acto de apertura del consejo de la Internacional Socialista que este fin de semana se reúne en Madrid.
La corrupción no es una cuestión irrelevante para el presidente del ejecutivo español, que no ha dudado en recordar que si hoy el PSOE gobierna es, precisamente, fruto de la moción de censura a Mariano Rajoy en 2018, tras la sentencia del caso Gürtel. "Este es un gobierno que nació con la necesidad de acabar con la corrupción de la antigua administración del Partido Popular y que ha hecho de su ejemplaridad y de la ejemplaridad su bandera. Una ejemplaridad absoluta y total que no entiende de colores", ha dicho Sánchez. "Ante quienes amparaban la corrupción y expulsaban a quienes la denunciaban, transparencia absoluta. Quien la hace la paga. Así ha sido estos últimos seis años, y así seguirá siendo los próximos cuatro [años]", ha asegurado el presidente del gobierno español en medio de aplausos.
Así pues, mientras la presión sobre Ábalos crece, el exministro ha apuntado que, por ahora, no piensa dimitir, puesto que el caso de comisiones irregulares en la compra de mascarillas durante la pandemia desde el ministerio de Transportes no va dirigido contra él sino contra su exasesor. En una entrevista este sábado aEl País, Ábalos se muestra a "disposición" del PSOE, pero pide hablar de ello con calma. Ha dicho que no ha hablado ni hablará con el presidente español y líder del partido, Pedro Sánchez: "Sé cómo piensa, qué espera y sabe que soy leal". El exministro de Transportes resaltó que la acusación contra él de momento sólo es "política y mediática, no judicial" y dejó claro que lo que seguro que no hará es dimitir por la presión del PP: "Quien me pide 'escaño? ¿El PP? ¿La derecha? ¿Tengo que darle?", se pregunta el exministro. "Hay que pensar si esto sirve para algo o para allanar la campaña de la derecha", afirma.
Denuncia del PP
El caso se inició, precisamente, con una querella del PP de Madrid que denunciaba irregularidades en contratos públicos millonarios del año 2020, el primer año de pandemia, licitados con trámite de urgencia y salpicando a los ministerios de Transportes y de Interior. Este miércoles Koldo García fue detenido con una veintena de personas más en una operación policial con registros en todo el Estado. El juez ha levantado el secreto de sumario de la causa, que está abierta por delitos de organización criminal, blanqueo y cohecho, entre otros. El PP también avisó de que pedirá personarse en la causa.
Según los investigadores, Koldo García adquirió bienes por valor de 1,5 millones de euros entre 2020 y 2022, cinco meses más tarde de que se adjudicaran las compraventas de mascarillas durante la pandemia que el juez investiga como una presunta trama de corrupción. La Fiscalía Anticorrupción sospecha que el dinero que utilizó para comprarlo proviene de comisiones que podría haber cobrado por facilitar transacciones de diferentes administraciones (desde empresas del ministerio de Transportes, como Adif y Puertos del Estado, hasta los gobiernos autonómicos de Baleares y Canarias). En el caso de Baleares, el gobierno autonómico reclamó a la empresa una parte del dinero que pagó, dado que la remesa de mascarillas no había sido satisfactoria y el sumario del caso apunta a que García maniobró para impedirlo.
Según ha podido confirmar el ARA, en los autos del juez instructor del caso, Ismael Moreno, se menciona una conversación donde se sugiere que García y Ábalos pidieron "favores" en la trama de cobro de comisiones ilegales por la compra de mascarillas para diversas administraciones, entre ellas el ministerio de Transportes.