¿Por qué Feijóo no ha atacado a Sánchez con la cita de Ábalos en el Supremo?

MadridPedro Sánchez no esperaba que Alberto Núñez Feijóo dejara de lado en la sesión de control en el Congreso sus habituales preguntas macedonia, en las que mezcla todo tipo de ataques al presidente español para retratar a un gobierno tocado de muerte, y se centrara en las nuevas cotizaciones de los autónomos para 2026. "Ha convertido a España en un país caro para el trabajador y barato para el sinvergüenza", ha protestado Feijóo, quien ha advertido a Sánchez de que los ciudadanos están "cansados ​​de pagar la malversación y los privilegios de sus gentes". "Con usted vale la pena ser un picudo. Si trabajas, pagas; si robas, cobras", ha denunciado, aludiendo también al caso de presunta corrupción que salpica a sus dos exsecretarios de organización en el PSOE, Santos Cerdán y José Luis Ábalos, este último citado en declarar este miércoles al Tribunal Supremo.

Pero Feijóo no ha centrado su intervención en Ábalos. Al menos hay dos hipótesis posibles. Una es que al PP le podía salir mal la petición al juez Leopoldo Puente de imponer la cárcel provisional —tal y como ha sucedido, porque el magistrado la ha rechazado—, y otra es que el líder conservador se haya dado cuenta de que su oposición no puede basarse en comentar la presunta corrupción del gobierno español o caer en los temas que son patrimonio de de extrema derecha le pisa los talones –ninguna como la del CIS, ciertamente–. Un posible aumento en la cotización de los autónomos era un caramelo para Feijóo, aunque el PP votó en 2022 la reforma del sistema que ya preveía que en 2026 se revisarían las cifras.

Sánchez no ha tenido la agilidad para recordárselo y se ha limitado a defender la "decencia" del gobierno que Feijóo había cuestionado en su pregunta. El presidente español recordó que el Fondo Monetario Internacional mejoró las previsiones para el Estado y se agarró al argumentario que ya tenía preparado contra el PP. "Deje de hablar de cajas B, que si existieron ha sido en su partido", ha dicho el jefe del ejecutivo del Estado. Feijóo se había quejado de que "las familias que sufren para llegar a fin de mes ven como en el PSOE y en el ministerio de Transportes que dirigía José Luis Ábalos corren los billetes como en un prostíbulo".

Improvisación

Las últimas no han sido unas buenas semanas para Feijóo, y Sánchez se ha ocupado de enumerar los diversos temas que le han dejado en mal lugar: la posición de Isabel Díaz Ayuso sobre el aborto —fuentes del PP subrayan que cumplirán la ley, pero si la Comunidad de Madrid no hace el registro de objetos— Moreno en Andalucía por los cribados sobre el cáncer de mama y las mentiras reconocidas del jefe de gabinete de Ayuso, Miguel Ángel Rodríguez, sobre el caso del fiscal general del Estado. La última apuesta del líder conservador ha sido realizar propuestas sobre inmigración, pero en la opinión pública ha quedado la sensación de que lo ha hecho a rebufo de Vox.

Habrá que ver si Feijóo aparca la improvisación y opta por consolidar una oposición basada en un proyecto alternativo a Sánchez, como ha insinuado este miércoles con la cuestión de los autónomos. Una de sus flaquezas es que contraponer el modelo del PSOE con el del PP en las comunidades autónomas es arriesgado, vistos los precedentes recientes. O el 27 o el 30 de octubre forzará la comparecencia de Sánchez en la comisión de investigación del caso Koldo/Ábalos en el Senado, coincidiendo con el primer aniversario de la dana en la Comunidad Valenciana. De tan evidente, a Feijóo la maniobra de distracción puede girársele en contra.