Los tentáculos del ayusismo en Génova
Dos dirigentes de confianza de la madrileña aterrizan en puestos clave en la dirección estatal
MadridNo hay polémica con Pedro Sánchez en la que Alberto Núñez Feijóo no tenga que compartir protagonismo con Isabel Díaz Ayuso cuando se trata de opositar al presidente del gobierno español. A diferencia del resto de varones del PP, la presidenta madrileña marca constantemente perfil en la política estatal. Tanto es así que en las respuestas espontáneas recogidas en los barómetros mensuales del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) aparece el nombre de Ayuso –y no de otros presidentes autonómicos del PP– como una de las opciones preferidas para ser la próxima presidenta del gobierno español –en el último barómetro, de los 5% del PP 2023 la eligen a ella y no a Feijóo, por quien apuestan un 39%–. Esta huella de la líder de los populares madrileños en la opinión pública es uno de los factores que hace que a menudo la opinión de Ayuso acabe marcando el ritmo en Génova.
Es lo que ha pasado esta semana con el posicionamiento sobre Gaza –la dirección estatal del PP se ha adaptado a la línea dura– y es lo que ya se había producido con otros asuntos como la condonación de la deuda de parte del fondo de liquidez autonómico (FLA) –el rechazo frontal de Madrid ha empujado al PP a hacer un frente común en contra del ofrecimiento del gobierno español por mucho que otras comunidades populares verían la condonación con buenos ojos–. Ante los desafíos de Ayuso a Feijóo, el líder del PP ha optado por no confrontar y evitar el choque con una posible contrincante interna que ya ha demostrado que tiene suficiente poder –orgánico y mediático– para descabalgar a alguien de la presidencia del partido, como ocurrió con Pablo Casado en el 2022. En ese momento, cuando Feijóo tomó las riendas del PP, con ese desafío interno tan reciente protagonizado por Madrid, diseñó una primera dirección estatal más decantada hacia la. Tenían un peso muy relevante andaluces cercanos a Juanma Moreno, máximo exponente del otro alma del partido, contrapuesta a la que encarna Ayuso.
Ahora bien, en el último congreso del PP celebrado a principios de julio, Ayuso ha ganado peso en la cúpula del partido. El primer guiño de Feijóo al ayusismo fue situar su mano derecha en el PP madrileño, Alfonso Serrano, como principal responsable de la organización del cónclave, celebrado en la capital española. La ubicación –la anterior fue en Sevilla–, el endurecimiento discursivo del ideario para competir con Vox, así como su formato –con referencias al "me gusta la fruta"– ya daban pistas de este acercamiento de Feijóo a las tesis y formas del ayusismo. Entre las nuevas incorporaciones a la dirección popular, además, se encuentran dos vicesecretarios del PP de Madrid. Una de ellas, la eurodiputada Alma Ezcurra, es especialmente relevante en el rumbo de Génova por su rol de coordinadora sectorial. No es menor el hecho de que Ezcurra haya incorporado a su equipo como coordinador de migración a Rafa Núñez, que es del círculo de confianza de Ayuso.
Núñez es diputado en la Asamblea de Madrid y en el 2022 Ayuso le situó como coordinador del comité de estrategia para que rearmara ideológicamente al PP madrileño. Es una persona que además tiene vínculos con Vox. Según ha reconocido Santiago Abascal, fue Núñez quien le propuso el nombre del partido cuando estaban ideando la marca de extrema derecha y fue también responsable de comunicación de una fundación, Denaes, afín a Vox. Génova, además, ha anunciado esta misma semana una nueva incorporación del entorno de Ayuso. Se trata de la consejera madrileña de Economía y Hacienda, Rocío Albert, una de las caras visibles de la plantada en el gobierno español contra la condonación y en la cruzada contra la financiación singular para Cataluña. Será la coordinadora de pymes, autónomos e innovación en la vicesecretaría de Hacienda, pilotada por el andaluz Juan Bravo.
Volviendo a subir un escalón en la estructura orgánica, el otro vicesecretario del PP madrileño es Jaime de los Santos, responsable de Educación e Igualdad. De los Santos fue uno de los anfitriones de Feijóo en el acto de inicio de curso del PP de Madrid, celebrado en su lugar de origen, el municipio Arganda del Rey. El líder popular optó por rodearse de la presidenta madrileña y de los suyos en lugar de asistir al acto de apertura del año judicial como forma de protesta por la presencia del fiscal general del Estado, que es uno de los antagonistas de la presidenta madrileña por la investigación contra su pareja por fraude fiscal. Un gesto que fue una muestra más de los tentáculos que ha logrado desplegar Ayuso en Génova.