Diplomacia

La vuelta al mundo en siete días de Pedro Sánchez

UE, Iberoamérica y China: el presidente español intensifica la agenda internacional después de la moción de censura

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El primer ministro belga De Croo se encuentra con su homólogo español Sánchez en Bruselas.

MadridEl presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, se ha visto este jueves por la mañana con el primer ministro belga, Alexander De Croo, en su residencia de Bruselas antes de participar en el Consejo Europeo que se celebra en la capital belga. El encuentro se enmarca en los preparativos de la presidencia española de la UE, que empezará el 1 de julio. Este es, sin embargo, el primero de un maratón de contactos internacionales que Sánchez tendrá los próximos días y que acabará los días 30 y 31 de marzo con una visita oficial a China.

Precisamente, uno de los argumentos esgrimidos por el socialista Patxi López durante la moción de censura es que, con Sánchez, España había recuperado protagonismo internacional, en contraposición a la época de Rajoy, "cuando se estaba en un rincón esperando las decisiones". Y en la Moncloa esperan exprimir al máximo la agenda internacional del presidente aprovechando su buena imagen exterior. Es cierto que, en Europa, España ha aumentado su influencia de la mano de dos vicepresidentas como Nadia Calviño, que ya trabajó en el ámbito económico, y Teresa Ribera, que ha liderado el debate energético.

De Bruselas, Sánchez irá directamente a Santo Domingo, donde este fin de semana se celebra la XXVIII Cumbre Iberoamericana, a la que también acudirán el rey Felipe VI y el ministro de Exteriores, José Manuel Albares. También se da la circunstancia de que el candidato de la moción de censura fracasada, Ramón Tamames, subrayó que estas cumbres habían perdido peso diplomático. En todo caso, Sánchez lo aprovechará para explicar a los 22 jefes de estado y de gobierno que participan en el encuentro que uno de los objetivos de su presidencia europea será fortalecer los lazos con el continente americano.

Desde Santo Domingo Sánchez volará hacia Madrid y se espera que antes de volver a coger el avión para viajar a China lo aproveche para hacer una mini crisis de gobierno forzada por el hecho de que las ministras de Industria y Sanidad, Reyes Maroto y Carolina Darias, tienen que salir del ejecutivo porque serán candidatas a las elecciones municipales. La primera será la cabeza de lista del PSOE en Madrid y la segunda en Las Palmas. De momento, la Moncloa ha sido muy cuidadosa y no se ha filtrado ninguno de los nombres que podrían optar a los cargos.

El plan de paz chino

El plato fuerte de la agenda internacional de Pedro Sánchez será, sin embargo, la visita a China, donde será recibido por el presidente Xi Jinping, justo después del viaje que este último ha hecho a Moscú para presentar al presidente ruso, Vladímir Putin, su plan de paz para Ucrania. Sánchez llega con una postura completamente alineada con la de la UE y la OTAN, que recelan del plan de paz chino porque no incluye la retirada de las tropas rusas de territorio ucraniano.

Aun así, el peso principal de la agenda será el económico. Xi visitó España a finales de noviembre de 2018, cuando apenas hacía unos meses que Sánchez había llegado a la Moncloa después de la moción de censura a Rajoy. En aquella ocasión se firmaron una veintena de acuerdos comerciales y el mandatario chino invitó al español a visitar Pekín. El objetivo de la delegación española es conseguir que empresas chinas de alta tecnología, por ejemplo microchips, se instalen en España. Finalmente, casi cinco años después, la visita se hace realidad en un momento especialmente propicio para Sánchez, después de salir reforzado de la moción de censura fallida de Vox y antes de las elecciones municipales y autonómicas del 28-M.

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