Los Mossos se especializan para vigilar mil delincuentes sexuales

BarcelonaCada día, al menos trece personas son víctimas de un delito sexual en Catalunya. Solo en el primer semestre del año, los Mossos d'Esquadra atendieron a 2.412 víctimas e investigaron 2.063 denuncias, un 16% más que durante el mismo periodo del 2022. Ocho de cada diez son mujeres y una de cada tres tiene menos de dieciocho años. El crecimiento sostenido del número de casos e investigaciones ha llevado a los Mossos a crear un nuevo sistema especializado para luchar contra la violencia sexual. Una nueva unidad central de inteligencia del cuerpo seguirá y vigilará a un millar de delincuentes sexuales potencialmente reincidentes.

Se trata de crear una "UCAS 2.0", decía la portavoz del cuerpo, Montserrat Escudé este jueves, en referencia a la Unidad Central de Agresiones Sexuales (UCAS) creada en 2020 y que ha asumido casos tan importantes como el del último violador en serie que se ha detenido en Catalunya –un falso rider condenado a once años de prisión–, la violación de una menor en Igualada o el caso Dani Alves. La nueva unidad se integrará en el Área Central de Violencias Sexuales, que ampliará los recursos basándose en la "hiperespecialización".

Como explicaron este jueves en una rueda de prensa el conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, y la portavoz de los Mossos, el cuerpo centralizará en esta área el seguimiento y control de todos los reincidentes sexuales potenciales que constan en Catalunya, un total de 998. Además, dibujará los criterios que deben guiar las investigaciones. Para ello, el Área Central de Violencias Sexuales aumenta el personal de 27 a 52 agentes. Bajo el área se incluirán dos UCAS especializadas: la unidad de inteligencia encargada de generar perfiles de los autores de delitos sexuales que permitan diseñar nuevos modelos de seguridad y un Grupo de Atención a la Víctima (GAV).

¿A quién se vigila?

Entre los delincuentes sexuales que tienen un alto riesgo de reincidencia hay 18 personas que ya han cumplido condena por un delito sexual y que tienen un riesgo alto de reincidencia –por eso la Fiscalía ordena un seguimiento–, 38 delincuentes sexuales condenados en otros países y que están ahora en Catalunya y 937 presuntos agresores que tienen medidas judiciales como órdenes de alejamiento o de salida del país porque todavía cumplen condena o están siendo investigados. A este grupo se suman cinco hombres que han entrado en el territorio con órdenes de detención europeas por delitos de violencia sexual. Mediante la Unidad Central de Inteligencia, los Mossos pretenden realizar una "escala de peligrosidad que indique el riesgo de reincidencia" y que permita disponer de los "perfiles de candidatos de reincidencia".

El área establecerá los criterios del seguimiento, que transmitirá a las unidades territoriales para su realización. Por eso se basará en la inteligencia obtenida, que actualmente consta de 631 informes hechos por la UCAS. Posteriormente, se controlará que se estén cumpliendo las indicaciones realizadas. En el caso del área metropolitana de Barcelona, que acumula el 70% de los perfiles vigilados, según Escudé, el seguimiento será realizado directamente por la nueva área.

El precedente

La portavoz de los Mossos d'Esquadra se ha mostrado "absolutamente convencida" del sistema, que se pondrá en marcha después del verano. Escudé ha explicado que la idea de crear inteligencia en la investigación de delitos sexuales tiene un precedente, el caso del violador en serie que se hacía pasar por repartidor. "Es el modelo en el que ya trabajábamos".

Este caso supuso un punto de inflexión por la implantación de la inteligencia en la investigación y resolución de los casos de violencia sexual. Por primera vez, se analizó la conducta del agresor para poder establecer un patrón que permitiera vincularle a las cuatro víctimas. Un analista del Grupo de Análisis de la Conducta Criminal de la UCAS participó, en calidad de perito experto, en el juicio contra el acusado en la Audiencia Provincial de Barcelona. Su testimonio fue clave para condenarle por todas las agresiones juzgadas. La participación del analista, a instancias de la Fiscalía, ha motivado la petición de otros fiscales para realizar otros periciales conductuales, según informan los Mossos.

"Protegemos a la víctima, perseguimos al agresor"

La presentación del área que centralizará el tratamiento de las denuncias y el seguimiento de casos de violencia sexual se enmarca en la campaña que el departamento de Interior y los Mossos d'Esquadra han puesto en marcha el miércoles con el lema "Protegemos a la víctima, perseguimos al agresor". Según ha explicado el conseller, quiere hacerse valer la nueva estrategia de los Mossos en delitos sexuales. "Queremos intensificar la presión y firmeza contra el agresor y el seguimiento, al tiempo que seguimos situando a la víctima en el centro", ha dicho Elena.