Salud

La ampliación millonaria que llevará a Vall d'Hebron al siglo XXI

Las obras para hacer el complejo más moderno, verde y accesible requerirán una inversión de 276 millones de euros hasta 2028

6 min
Vista aérea de cómo será el futuro Campus del Valle de Hebrón.

BarcelonaEl Hospital de Vall d'Hebron de Barcelona, el complejo sanitario más grande de Catalunya, es un centro líder de ámbito europeo en calidad asistencial, investigación e innovación biomédica. Pero su estructura no le hace justicia. Los pendientes insalvables por la orografía de Collserola y la circulación de los coches hacen poco accesibles algunos de los espacios, e incluso imposibilita que los vecinos del distrito de Horta-Guinardó puedan moverse libremente. Además, el hecho de que la mayoría de edificios sean muy antiguos ha obligado a diseñar un entramado de módulos prefabricados para atender, desde hace una década, a miles de personas diariamente y para que millares más de profesionales hagan investigación. El exconseller de Salud, Toni Comín, llegó a calificar la situación de "barraquismo hospitalario". Ahora todo esto está a punto de cambiar: el Vall d'Hebron vive un proceso de transformación interna y externa para adecuar las instalaciones a su excelencia. 

El hospital barcelonés pronto estrenará un helipuerto integrado en el complejo –el actual está al otro lado de la ronda de Dalt– e incorporará varios edificios de nueva creación para reordenar los servicios de urgencias y las consultas externas. Pero esta última cuestión solo si el Ayuntamiento de Barcelona da el visto bueno. También, y sin una fecha concreta, se construirá un vestíbulo que enlazará el hospital con la ronda de Dalt y se creará un área verde para facilitar la movilidad y el acceso a los servicios con escaleras mecánicas que sustituirá el asfalto y las vallas que rodean ahora los accesos.

De momento se han hecho intervenciones con una inversión de 17 millones de euros, entre las cuales está la creación de las nuevas consultas externas de pediatría y la Sala Ronald McDonald para acompañar a las familias de los niños hospitalizados. Pero los cambios que se prevén para el Vall d'Hebron, una reforma imprescindible que fue anunciada en 2017, son todavía más ambiciosos y requerirán una inversión de al menos unos 276 millones de euros hasta 2028. "Esta es una transformación muy ambiciosa de uno de los barcos insignia de nuestros hospitales. Queremos estar al frente de Europa y del mundo", ha afirmado el conseller de Salud, Josep Maria Argimon.

Así será la entrada en el Hospital Vall d'Hebron.

Una de las piezas clave de esta transformación que quiere preparar el centro para los próximos 50 años es la pacificación de los barrios de Montbau y Sant Genís dels Agudells, con un camino horizontal, y la unión del paseo del Vall d'Hebron con el Parc Natural de Collserola, con uno vertical. Los barrios están separados precisamente por el espacio que ocupa el hospital y el nuevo proyecto los quiere reconciliar urbanísticamente. "La Vall d'Hebron no es solo un hospital de referencia en Barcelona. Lo es para Catalunya, y podríamos mencionar ejemplos como la unidad de quemados o trasplantes, pero también es un hospital comunitario, y esta transformación urbanística para abrirse en el barrio es muy importante", ha destacado el consejero. 

Consultas e investigación

Algunas de las transformaciones previstas en el plano director se terminarán en 2025, pero otras muchas se alargarán en el tiempo. El mismo Argimon ha reconocido que querría que la reforma se hiciera "a una velocidad todavía más rápida", pero lo ha supeditado en los presupuestos, no solo de 2022 sino de los próximos años. "Por esto necesitamos que los presupuestos no decaigan por la mejora del covid. Necesitaremos varios años para ponernos al día después de la pandemia", insistió. De hecho, el miércoles ya reclamó públicamente al Estado que mantenga los fondo extra, como mínimo, hasta el año que viene, pero la ministra de Sanidad, Carolina Darias, que este jueves ha visitado Barcelona, no ha querido confirmar si lo harán. “El gobierno de España ha hecho un esfuerzo impresionante durante toda la pandemia, con una financiación sin precedentes”, se ha limitado a decir.

De momento el proyecto más avanzado –la obra ya está licitada por el consistorio y en fase de concurso público– es el edificio Teixonera, de 36.000 metros cuadrados y con un coste de cerca de 70 millones de euros. "Sin este edificio no podría hacerse el nuevo Vall d'Hebron, porque permitirá 'absober' muchos metros cuadrados del complejo", ha afirmado el gerente del hospital, Albert Salazar, que calcula que las obras acabarán dentro de cuatro años.

Obras en el hospital Vall d'Hebron de Barcelona

En este espacio, previsiblemente de diez plantas y que se ubicará en el otro lado de la ronda de Dalt –en un solar de titularidad municipal donde hace años que están las cocheras de la L3 del metro, un aparcamiento de coches y un depósito de la grúa municipal–, se centralizarán todos los servicios ambulatorios de adultos –las consultas externas, los gabinetes de exploración, el hospital de día, el diagnóstico por la imagen, las extracciones y las áreas administrativas– en 250 consultas y un centenar de gabinetes. Las consultas pediátricas, en cambio, ya se integran en el hospital infantil. "Ahora ya estamos absolutamente tranquilos de que la obra sale adelante", ha asegurado Salazar después de que el gobierno de Ada Colau haya aprobado la edificación. 

Hoy el Campus de Vall d'Hebron está formado por tres edificios principales y varias construcciones satélite, como la de Vall d'Hebron Institut de Investigación (VHIR, por sus siglas en catalán). Este centro de búsqueda sobrevive en unos barracones a pesar de la importancia que tiene para la asistencia y la investigación biomédica. “Nuestro ritmo inversor en salud es bajo y esto hace que nuestros edificios y la tecnología se vuelvan cada vez más obsoletos", ha admitido el conseller de Salud.

Por eso el futuro de este recinto hospitalario implica dotar al VHIR de un edificio propio. Este proyecto, que todavía no se ha empezado a ejecutar, tendrá un coste de unos 40 millones de euros y se espera que a corto plazo se celebre un acto simbólico de colocación de la primera piedra. La mitad de estos recursos, ha concretado Argimon, irán destinados a crear el primer acelerador de partículas para fármacos de titularidad pública. De momento, ya hay un espacio operativo de 1.400 metros cuadrados y la idea es construir uno de 7.000 metros cuadrados que comunique con el Centro Cellex (la sede del Instituto de Oncología de Vall d'Hebron, el VHIO).

Espacios inteligentes y un helipuerto nuevo

También está en mantillas la construcción del edificio de Farmacia, Urgencias y Logística (el edificio FUL), un proyecto que se ha incorporado recientemente en el plan y que se destinará principalmente a abrir un espacio para centralizar las urgencias de adultos. Este nuevo edificio se instalará en el terreno que hay entre la Escuela de Enfermería, que se derrocará, y el hospital de traumatología, Rehabilitación y Quemados, y tendrá una cubierta ajardinada para integrarse en la montaña de Collserola. El edificio FUL conectará de manera subterránea las instalaciones actuales del hospital general con las del hospital de traumatología para garantizar "una atención más rápida" a los pacientes.

El edificio FUL, que contará con 28.730 metros cuadrados, se instalará en el terreno que ahora es de la Escuela de Enfermería, junto al hospital de Traumatología, Rehabilitación y Quemados.

Este edificio, todavía en fase de redacción, tendrá 28.730 metros cuadrados y costará unos 90 millones de euros. Se habilitará una "farmàcia del siglo XXI", con una plataforma robotizada, y será un centro neurálgico para la logística, puesto que se destinarán 10.000 metros cuadrados a la cocina, la lavandería, las áreas de mantenimiento y los almacenes. En este caso, Salazar ha concretado que se trata de un edificio "complejo" y ha vinculado su consecución en la convocatoria de los fondos europeos Feder, de forma que se espera que la obra se ejecute a largo plazo, aproximadamente en 2028.

Lo que sí que entrará en funcionamiento de aquí pocas semanas, cuando se arregle un tecnicismo en los permisos de uso, es el nuevo helipuerto del Vall d'Hebron, que ha costado 3,5 millones de euros. Este elemento importantísimo para un centro receptor de enfermos de toda Catalunya, pero también del Estado, estaba situado en el otro lado de la ronda, en la Teixonera, y ahora operará en el ala oeste del hospital de traumatología. Es decir, estará integrado en el Campus. Esta nueva ubicación hará que los pacientes graves que lleguen en helicóptero accedan al servicio que necesitan desde el mismo helipuerto, sin salir del edificio, "a través de un recorrido más ágil y moderno".

Así es el nuevo helipuerto de Vall d'Hebron.

Entre el resto de intervenciones que se harán los próximos años destacan la transformación de casi medio millar de metros cuadrados de la unidad de cuidados medios y básicos de neonatología en doce habitaciones familiares, así como la puesta en marcha del nuevo área de radiofarmacia y el Centro de Simulación Clínica Avanzada, con 1.148 metros cuadrados, donde profesionales y estudiantes podrán ensayar con herramientas innovadoras y casos clínicos para estar más preparados para la vida real. También se inaugurará un espacio de 540 metros cuadrados para diagnosticar y controlar las arritmias, se construirá la unidad de psiquiatría infantil y adolescente, un nuevo área del ictus y otro del corazón, el laboratorio de anatomía patológica y el Trauma Center.

stats