Collboni propone un nuevo ente metropolitano que agrupe también al Vallès, el Maresme y el Garraf

BarcelonaJaume Collboni ha puesto este martes sobre la mesa un debate que hace tiempo que sobrevuela la política metropolitana. La necesidad de impulsar –él ha dicho antes del 2030– un nuevo organismo que agrupe a los municipios de Barcelona y el área metropolitana pero también a los de la segunda corona. Una especie de AMB ampliada que incluya también el Maresme, el Vallès Occidental y Oriental y el Garraf. Un ente, ha explicado, que tendría la capacidad de coordinar las políticas de la región metropolitana. Esta propuesta, sin embargo, ya la había intentado poner sobre la mesa a la anterior alcaldesa, Ada Colau, hace tres años, pero entonces suscitó el rechazo de la gran mayoría de ayuntamientos socialistas del área metropolitana.

Este martes, sin embargo, en una conferencia ante el empresariado barcelonés en Foment del Treball y bajo el título "Impulsar la metrópoli federal", Collboni se ha hecho suya la propuesta y se ha fijado como objetivo que dentro de cinco años existe un sujeto político que reúna "la Barcelona de los 5,5 millones". ¿Qué función tendría? El alcalde ha explicado que en debates como el de la movilidad privada las decisiones que se toman en Barcelona –como dónde se sitúan las estaciones de autobús– tienen efectos en el resto de municipios de la región metropolitana. Por ello, expuso también la importancia de unificar criterios en asuntos como la aplicación de la zona de bajas emisiones o los servicios de sharing de bicicletas o patinetes, así como la adopción de medidas coordinadas para hacer frente a los problemas de vivienda.

Para ello, Collboni se ha inspirado en el proceso de devolution que, ha dicho, se está llevando a cabo en Reino Unido para dotar de instrumentos efectivos a las áreas metropolitanas no sólo de Londres, sino también por ejemplo de Manchester. ¿Y en qué consistiría ese proceso? Pues básicamente en que tanto los ayuntamientos afectados como también la Generalitat o el Estado cedieran algunas de sus competencias actuales a este nuevo ente metropolitano para que pudiera llevar a cabo sus políticas. Sin embargo, el alcalde no ha entrado en el detalle de qué competencias cree que debería ceder la Generalitat, a quien sí ha apuntado explícitamente como la administración que más debería ceder.

El debate, que debería canalizarse a través del desarrollo del PDU Metropolitano –que debe sustituir el plan de 1976–, promete ser intenso, sobre todo porque la creación de un ente de estas características obligaría a replantear los diferentes niveles administrativos en Catalunya y podría convertirse en un contrapoder decisivo en la presidencia de la Generalitat. Sin embargo, este martes Collboni ha evitado entrar en cómo debería gobernarse esta institución ni en sí tendría una especie de alcalde metropolitano elegido por los 5,5 millones de ciudadanos que viven en la zona.