Los decanos piden que ser maestro sea más difícil: prueba de acceso al máster y carrera más larga

BarcelonaDecisión ajustada pero contundente de los decanos de Educación de las universidades de todo el Estado: este martes han acordado que pedirán al ministerio de Educación que alargue y haga más difícil la carrera para poder ser maestro o profesor. En los últimos dos días se han reunido más de sesenta profesionales de la Conferencia de Decanos y Decanas de Educación para debatir y aprobar los libros blancos de las titulaciones de educación, es decir, las bases que deberían marcar cómo deben ser los planes de estudio de los grados y másteres de este ámbito. Por último, los decanos han aprobado cambios relevantes para el grado de educación primaria y del máster por ser docente de secundaria.

En cuanto al del grado de educación primaria, los decanos han acordado pedir que la carrera por ser maestro se alargue hasta los cinco años; una medida que, según Efe, recibió 20 votos a favor, 16 en contra y 11 abstenciones. Así, el grupo ha decidido que quieren que haya un grado habilitante de cuatro años como hasta ahora, pero también un máster que habilite realizar determinadas especialidades, que hasta ahora dependen de las menciones que se eligen al grado. También piden que estas especialidades se definan entre el ministerio, las comunidades autónomas y las universidades.

"Todo el alumnado podría acceder a la profesión docente después de cursar el grado, con la posibilidad de optar posteriormente por una especialización que ampliara sus oportunidades profesionales, tanto en el acceso a la función pública como en otras funciones educativas específicas", señala el texto del documento al que ha tenido acceso Efe.

Todavía en cuanto a la carrera universitaria, los decanos piden que para poder acceder se haga una prueba de acceso a los aspirantes para estudiar, tal y como ya se hace en Cataluña y en Baleares con las PAP (las pruebas de aptitud personal que dan acceso a los grados por ser maestro). En este sentido, el futuro estudiante podría tener que realizar pruebas de comprensión lectora y razonamiento lógico matemático, o una evaluación de atributos no académicos, con entrevistas múltiples o con tests de juicio situacional (cuando a un candidato se le presentan escenarios laborales hipotéticos y debe escoger la mejor respuesta).

Esta posibilidad la ve "poco probable" el doctor en pedagogía de la Facultad de Educación de la Universidad de Barcelona (UB) Enric Prats, que ha estado presente en algunos de los encuentros previos de los decanos de educación. "Están cogiendo como modelo el de Baleares, que es más exhaustivo que los demás. Ellos, en las PAP, hacen más pruebas e incluso piden al candidato que haga un vídeo", detalla. Prats insiste en que el modelo balear funciona muy bien, pero que "puede hacerse así porque tienen pocos candidatos". "En Catalunya, con 5.000 candidatos cada año, sería imposible, y también sería difícil extender el modelo al resto del Estado", dice.

Las sociedades españolas de didácticas específicas –APICE (didáctica de las ciencias experimentales), AUPDCS (didáctica de las ciencias sociales), SEA (educación artística), SIDLL (didáctica de la lengua y la literatura) y SEIEM (educación de libro de de decanos. En un comunicado alertan de que "reduce el conocimiento didáctico-disciplinario a un papel marginal y sustituye la imprescindible articulación entre disciplinas y su enseñanza por enfoques pedagógicos generalistas".

Prueba de acceso al máster de secundaria

Donde no ha habido choque de opiniones ha estado en la aprobación del libro blanco sobre el master habilitante para ser profesor de secundaria, bachillerato y formación profesional (FP). Los decanos están de acuerdo en pedir que para acceder al máster deba superarse una prueba de acceso como ocurre en Catalunya con los grados de educación y las PAP. Lo que plantean es una prueba de acceso obligatoria a escala estatal para todas las universidades (públicas y privadas) donde se evalúe tanto los conocimientos de la especialidad como las aptitudes y actitudes docentes.

Además, los decanos también plantean que este máster se alargue y que tenga más prácticas. Proponen que tengan una duración de un año y medio o dos —y no uno como hasta ahora— y que tenga el doble de horas de prácticas. Actualmente, se hacen 350.

No vinculante, pero relevante

Hace dos años el ministerio de Educación pidió a los decanos de las facultades de educación de todo el Estado que hicieran una propuesta sobre los cambios que consideraran que era necesario introducir en los grados de educación infantil, educación primaria, educación social y pedagogía, y también en el máster de secundaria, que habilita a un profesional para poder dar clase en la ESO y en el bachillerato. El motivo era que la nueva ley de universidades española (Losu), aprobada en 2023, establece que es necesario reformar y actualizar los títulos universitariospero también porque hace 15 años que los planes de estudios de la formación inicial de los docentes no se actualizan.

Si bien las propuestas acordadas este martes en la conferencia de decanos no son vinculantes, sí deberían tener un peso importante cuando el ministerio de Educación decida los cambios para actualizar la formación de los futuros docentes.