¿Qué se sabe de Eris, la variante del covid detectada en Francia, Reino Unido y EE.UU.?
La OMS avisa de que la mutación, que todavía no se ha secuenciado en Catalunya, sería más transmisible
BarcelonaOficialmente, el mundo ha dado carpetazo a la emergencia sanitaria del covid, pero el virus no ha desaparecido: sigue expandiéndose y en las últimas semanas se ha observado un repunte de los contagios en buena parte de Europa y Estados Unidos. Epidemiólogos de todo el mundo monitorizan la aparición de nuevas variantes y algunos atribuyen el incremento de casos a la última mutación identificada. Se trata de EG.5, conocida como Eris, detectada ya en Francia, Reino Unido y Estados Unidos y calificada, de momento, de "bajo riesgo" por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Subvariante
Más transmisible, pero con síntomas similares a los de otras variantes
Parece que se transmite más rápido que otras variantes de ómicron, pero nada hace pensar que cause enfermedades más graves y más hospitalizaciones. De hecho, se espera que los tratamientos y las vacunas disponibles sigan siendo efectivas. Esta sería, de momento, la caracterización de la nueva subvariante Eris. "Parece que tiene algo más de capacidad de transmisión, pero no sabemos en qué proporción porque siempre existe el dilema de la información que proviene del laboratorio: observamos unas características de ventaja, pero la forma en que se transmite en el mundo real después puede ser diferente", plantea el epidemiólogo Antoni Trilla.
El EG.5 nace de la familia ómicron, una variante que empezó a circular a finales del 2021 y es madre de varias mutaciones, como la XBB.1, predominante hasta ahora. Se notificó por primera vez el 17 de febrero y, de momento, ya se ha detectado en más de cincuenta países. "Aunque ha mostrado una mayor prevalencia, una ventaja de crecimiento y propiedades de escape inmunitario, no se han registrado cambios en la gravedad de la enfermedad hasta ahora", afirma la OMS en un comunicado.
De hecho, sus síntomas no parecen diferentes a los de las variantes anteriores y siguen pareciéndose a los del resfriado y la gripe, como dolor de garganta, secreción nasal, congestión, tos y fiebre. "No sabemos si provoca enfermedades distintas. Todo apunta a que no. EE.UU. ha visto más casos pero no una desestabilización clínica", anticipa Trilla. Aunque el epidemiólogo cree que su presencia "seguramente" irá creciendo, afirma que hoy en día no es predominante.
Expansión
La OMS hace seguimiento, pero no eleva ninguna alerta
En Francia Eris estaría detrás del 35% de los casos que se analizan, y en Estados Unidos y Reino Unido supone ya una de cada seis infecciones. Las autoridades sanitarias de estos países señalan que hay indicios de que se transmite más rápido, pero no la catalogan como una amenaza. De hecho, la OMS ha empezado a realizar seguimiento de este linaje, pero lo ha etiquetado como variante de interés, y no de preocupación, el primer paso para considerar que una cepa pueda ser un peligro de salud pública. Por ahora, y teniendo en cuenta que la alerta puede cambiar en cualquier momento, el organismo sanitario califica de "bajo riesgo" esa cepa, pero advierte de que será la responsable de un aumento de las infecciones en todo el mundo.
La secuenciación de las muestras que se hace en Catalunya y España aún no ha permitido identificar la variante Eris. "Desde hace un año y medio la variante predominante era el ómicron y hemos tenido una temporada claramente representada por la subvariante XBB. En otros países ya ha aparecido una subvariante similar, Eris, que supone un porcentaje creciente de las cepas que se están secuenciando", dice Trilla. El epidemiólogo asegura que no han dejado de aparecer variantes –y probablemente habrá más–, y que cuando una circula en un país, es probable que se expanda. "Aún más en temporada de viajes. En unas semanas sabremos si ha habido una ola este verano", añade.
Expectación
No se ha detectado en Catalunya, pero existe un repunte de contagios
Catalunya ha vivido en las últimas tres semanas una aceleración de los contagios, pero el epidemiólogo señala que, según los datos más recientes, la escalada de casos está frenándose, ya que se están declarando menos casos nuevos que la semana pasada. "Desde que no tenemos emergencia sanitaria, se han restringido las pruebas a la población con factores de riesgo (edad y enfermedades crónicas) o por indicación médica, lo que nos da una información muy precisa en determinados segmentos de la población, como hacemos con la gripe, pero de la mayoría de la población solo tenemos estimaciones, bastante cuidadosas, pero estimaciones", explica Trilla.
Sí hay un repunte de hospitalizaciones, pero que probablemente responde al patrón de la enfermedad. "Cuando aumentan los casos, unas semanas después crecen los ingresos. Ahora bien, los datos son bajos", subraya Trilla. Esta semana, los hospitales catalanes atienden a 440 personas con covid, 64 más que la semana anterior, pero las entradas en las unidades de cuidados intensivos (UCI) se mantienen estables con 13 enfermos. El 75% de las personas ingresadas tiene más de 60 años.
Vigilancia
Proliferan nuevas variantes, pero se sustituyen más lentamente
Las variantes del covid no han dejado de proliferar desde la irrupción de la pandemia, pero el patrón de sustitución ha cambiado. "Si antes se veían desplazamientos muy nítidos de variantes en poco tiempo, en el último año y medio, aunque lleguen a dominar, las nuevas variantes no se imponen de forma repentina e inmediata, sino progresivamente", reflexiona Trilla. Ahora bien, el experto pide calma y prudencia. "Debemos mantener todo el respeto hacia este virus que nos dio la vuelta a la vida, entre otras cosas porque todavía no es una enfermedad estacional, pero poco a poco se irá incorporando a la cartera de virus con la que convivimos", afirma.