Carol Tavris: "No admitimos errores por mantener nuestra autoestima"

¿Por qué cuesta tanto decir "Lo siento, me he equivocado"? Ésta es la pregunta que los psicólogos Carol Tavris y Elliot Aronson intentan responder a través de las casi cuatrocientas páginas del libro Se han cometido errores (pero yo no he sido), publicado en 2007 pero que ha reeditado y actualizado en castellano la editorial Capitan Swing. Con referencias que se mueven desde Trump hasta las relaciones amorosas, los autores revelan cómo los errores están profundamente conectados con la autoestima y la relación con los demás.

Lo que mata el amor es la autojustificación. ¿Por qué?

— ¿Cuál es la discusión de las parejas? Yo tengo razón y tú estás equivocado, ya sea a la hora de recordar algo que ha pasado, la forma correcta de poner en marcha el lavavajillas o cómo criar a los hijos. Cada uno cree que su forma de hacer las cosas es la correcta. Y por eso cuando hay dos formas que entran en conflicto, lo que hacemos es autojustificarnos. Es una respuesta a la disonancia cognitiva.

¿Disonancia cognitiva?

— Dos ideas que entran en conflicto. Por ejemplo, yo me considero una persona amable, pero me dices que no he sido amable cuando he hecho esto o lo otro. En lugar de cuestionarlo, el cerebro tiene un mecanismo para justificarlo y poder decir: "Lo he hecho porque tú antes has hecho no sé qué". Y de esta forma yo puedo seguir siendo una persona amable. Es un mecanismo inconsciente que nos permite seguir pensando en que tenemos razón y mantener nuestra autoestima.

También sirve para pensar que tomamos las decisiones correctas.

— Escogí a Eduard, pero podría haber sido Robert. ¿Fue un error? Y lo que hará nuestro cerebro es enfatizar las cosas buenas de Eduard y las que no nos gustan de Robert. Ocurre con el trabajo, o lo que sea, buscamos la consonancia cognitiva entre lo que escogemos y lo que encontramos.

Y dice que utilizamos la memoria para justificarnos.

— Antes de la invasión de Irak, alrededor del 46% de los demócratas [votantes del Partido Demócrata estadounidense] lo apoyaba. En 2006, sólo el 21% decían que lo habían hecho.

O sea, reescribimos el pasado.

— Tengo un hermanastro que fue criado por un padrastro que él consideraba terrible, siempre decía que era muy exigente. Muchos años después, hablando de su otro hermanastro me dijo: "Bill ya no recuerda lo difícil que era él de pequeño. Y era tan problemático que nuestro padre fue mucho más estricto con él que conmigo". Si no incluimos esto en el relato de nuestra historia, ¿cómo reflexionar sobre lo que hicimos?

Recordemos lo que queremos, y también pensamos que procesamos la información de forma lógica.

— Es mi sesgo preferido: pensar que no somos sesgados, que vemos las cosas claramente como son, por lo que si alguien no está de acuerdo conmigo es porque está sesgado. De alguna forma, aquí comienza la disonancia cognitiva.

Y dice que admitimos menos nuestros errores cuanto mayores han sido las consecuencias.

— Es la lección que hemos extraído. Son las personas más poderosas y con mayor nivel educativo las que pueden estar más motivadas para justificar las creencias. Por ejemplo, durante muchas décadas los cirujanos pensaban que ante un cáncer de mama debía extirparse la mama entera e incluso tejido del hombro y el brazo. Cuando algunos médicos propusieron sacar sólo el bulto, les acusaron de estar condenando a las pacientes a muerte. Las pruebas demostraron que carecían de razón, pero es difícil aceptarlo, porque quiere decir que has estado 25 años extirpando todo el pecho, desfigurando el cuerpo de las mujeres, cuando no era necesario.

En el libro se relatan casos dramáticos en los tribunales.

— Como los cinco de Central Park. Cinco adolescentes negros e hispanos condenados por una violación. Netflix hizo una serie sobre su historia. Cuando llevaban años en prisión, un hombre confesó el crimen. Su ADN coincidía con lo encontrado en la víctima. Pero la fiscala del caso dijo entonces: "En realidad siempre habíamos pensado que eran seis". No había ADN de los otros chicos, no se conocían con ese hombre, pero la fiscal nunca ha admitido haberse equivocado. Porque su error hizo que hubiera chicos en prisión durante 13 años de forma injusta.

¿Es difícil pedir perdón?

— ¿Sabes cuándo se entiende por qué es tan difícil? Cuando te acercas a las personas que sí enfrentan las consecuencias de sus actos. Porque ves que son historias de angustia y dolor, asumir que has destrozado la vida a alguien es terrible.

¿Cómo dejar de justificarnos?

— La disonancia es universal y seguramente inevitable, pero cuando nos encontramos en este estado tenemos la capacidad de poner las dos ideas disonantes una en cada mano y sopesarlas antes de tomar una decisión impulsiva. Esto sirve para todo: amor, negocios, política... ¿Te pongo un ejemplo?

Adelante.

— En 1985, el presidente de EEUU, Ronald Reagan, acudió al cementerio de Bitburg, Alemania, en un acto en señal de amistad entre ambos países, enfrentados durante la Segunda Guerra Mundial. Despertó mucha polémica, porque en el cementerio donde se hacía el homenaje había enterrados oficiales nazis. Se le preguntó al entonces primer ministro de Israel, Shimon Peres, por la visita y él dijo: "Reagan es un amigo que ha cometido un error. La amistad sigue siendo amistad, pero el error seguirá siendo error". Es lo contrario de lo que hace la gente con la disonancia cognitiva: o rompen la amistad o minimizan el error.

Al final del libro hablan de Trump.

— Nos interesaba ver qué ocurre con la gente que le vota. Y vimos que cuando hacía cosas que no esperaban, tendían a justificarlo, y que cada justificación hacía más difícil ir atrás y poder decir: "Ostras, me he equivocado". Hasta el punto de que esto ha evolucionado y ahora funciona más bien como una secta.

¿Una secta?

— Hemos investigado mucho el papel de los evangélicos en su victoria, y le apoyan a pesar de que es el político menos cristiano que existe. Entonces, ¿por qué lo hacen? En 2019 empezó a verse que sus formas eran poco compatibles con la verdad y el perdón de Jesucristo, pero siempre han encontrado una justificación en la Biblia. Afirman, por ejemplo, que la Biblia dice que se necesita un liderazgo fuerte y cosas así. Y de esta forma reducen la disonancia que existe entre el apoyo que dan a Trump y lo que él dice o hace.

¿Trumpe siente disonancia cognitiva?

— No. Me lo preguntan a menudo. Para sentir disonancia cognitiva debes ser capaz de sentir vergüenza, arrepentimiento, empatía. No quiero diagnosticar a este hombre a distancia, pero viendo su comportamiento, está muy lejos de estas cualidades emocionales. De hecho, parece no tener conexión emocional con las personas. Para sentir disonancia debes tener vergüenza, porque justamente lo que vas a buscar es reducir esa disonancia para sentir menos culpa, menos vergüenza, menos arrepentimiento, etc.

Pero le votan…

— Cuando apareció internet, debía ser la voz de la democracia, pero la red ha sido corrompida por botes que ahogan a la gente en mentiras. Porque esto es lo primero que hacen los demagogos y los autoritarios. Ya nos lo dijo Orwell hace muchos años: si puedo persuadirte de que una mentira es verdad, estoy a medio camino de controlarte. Y ya vimos desde la primera administración de Trump cómo bombardeaban con noticias falsas. Lo recogen los republicanos en el proyecto 2025.

Explicamos lo que es.

— Son mil páginas en las que se describe la hoja de ruta de todo lo que ha pasado este año. Dicen: "Crearemos el caos durante los primeros 3 meses con tantos anuncios que nadie podrá seguir la pista de lo que pasa, nos desharemos de los jueces liberales, recortaremos los fondos para la investigación, haremos una campaña masiva para deportar a inmigrantes…" Y Trump no es suficientemente inteligente para idear esto, pero tiene al lado a gente que sí lo es. Y la historia nos cuenta cosas. Como casi todos los líderes fascistas y demagogos son escogidos legalmente, y después intentan eliminar las elecciones... Esto es lo que la administración Trump está intentando hacer.