Diecisiete años sin discutir ni una sola vez con su pareja

Hay una foto de Fel Faixedas a los 17 años haciendo de Lúcifer en los Pastorets. En el fondo, representando al infierno, aparecen muchos demonitos pequeños. Uno de aquellos demonitos, Irene, sería un día la madre de sus hijos. Claro que entonces nadie lo sabía. “De hecho, no lo supimos hasta que décadas después le enseñé la fotografía y me dijo: “¡Eh, esta soy yo!”. 

En realidad tuvieron que pasar muchos años desde aquellos Pastorets para que Fel e Irene intercambiaran algunas palabras. “Ella era diez años más joven que yo y no estábamos en el mismo grupo de amistades”, detalla el actor. Todo cambió una noche del año 2005 durante una fiesta en Arbúcies. “Empezamos a charlar y allí yo me pillé bastante”. Irene, sin embargo, no se lo puso fácil: “En aquella época éramos muy mediáticos y ella tenía miedo de que me aprovechara de una chica más joven. No era el caso, y siempre le digo en broma que me hizo sudar mucho: me hizo demostrar que iba seriamente”, rememora Faixedas.  

Aquella primera noche durmieron –y solo dormir– juntos. “Yo, que soy muy nervioso, percibí ya aquella noche que Irene era una chica con mucha paz y mucha calma. Todavía ahora me aporta siempre calma y tranquilidad”, explica el actor, que después de aquel primer contacto decidió recurrir al humor para ganarse el corazón de Irene.  

Al humor, y también a la cultura y a la gastronomía. “Los primeros días que nos encontrábamos era para ir a algún concierto o a algún espectáculo. En la primera o segunda cita fuimos a un restaurante donde estaba el fútbol puesto y yo me puse de espaldas. Le dije que no me interesaba, pero mentí: ¡me apasiona el fútbol!”. 

Un año después de aquella primera noche en Arbúcies, Irene decidió que el actor iba seriamente y se convirtieron en pareja. El primer viaje juntos lo hicieron al País Vasco, donde ella le descubrió la gastronomía y él el vino. Todavía ahora, uno de los planes ideales cuando hace buen tiempo es “comer un buen arroz con una botellita de vino, estirarse en la playa o escuchar un concierto de jazz en una terraza tranquila”. “A ella le gusta mucho viajar, pero a mí me cuesta porque enseguida echo de menos a los niños”, explica el actor. 

Ahora ya hace 17 años que están juntos y sus hijos tienen 11 y 13 años. Una curiosidad de la pareja, revela Faixedas, es que en estas casi dos décadas juntos no han discutido “ni una sola vez”. “De verdad, ni una. Creo que es porque siempre nos hemos respetado muchísimo”, asegura.