Barriteca: teca tradicional en el barrio del Poblenou
Una bodega clásica renovada que ofrece cocina casera que nunca pasa de moda
Barriteca
- Dirección : Calle de Marià Aguiló, 86, Barcelona (Barcelona)
- Carta : catalana tradicional
- Obligado : meloso de carrillada de ternera Black Angus con parmentier de patata
- Vino : carta corta pero con referencias interesantes
- Servicio : cercano y atento
- Local : bodega clásica renovada
- Precio pagado por persona : 55 € con vino
Cuando Urruti detuvo el famoso penalti a Mágico González y le dio una Liga al Barça once años después, Ferran prácticamente no había aprendido a andar. Fue el 24 de marzo de 1985 cuando miles de catalanes sintieron por la radio la expresión inolvidable que popularizó el maestro Joaquim Maria Puyal, que desde Valladolid clamó "¡Urruti, te quiero!" para celebrar esa histórica intervención del portero del Barça en el minuto 87 de partido. Ahora, más de cuarenta años después, Ferran López, propietario de la Barriteca, un restaurante de cocina casera en el Poblenou, ofrece en su carta un postre con este nombre: "Urruti era cliente habitual del restaurante que tienen unos amigos en San Sebastián y siempre pedía este postre [jugo de naranja, helado de vainilla y Grand Marnier." explica. El Barça y la gastronomía son sus dos grandes pasiones. A lo largo de su vida ha podido aprender de algunos de los mejores chefs, como Paco Pérez o Martín Berasategui, hasta encontrar un local en Poblenou donde poder hacer realidad el proyecto que siempre había soñado.
"Me gusta mucho todo lo que es retro o vintage, y enseguida nos enamoramos de este local, donde durante treinta años había habido una casa de comidas", recuerda Ferran mirando las paredes de la Barriteca, que tiene el diseño de una bodega clásica de nuestra casa renovada. fogones del Hotel Almanac: "Siempre se interesó mucho por nuestra gastronomía, le encanta la cocina catalana, y ahora hace un fricandó y un capipota espectaculares", reconoce él. Y a eso hemos venido hoy, a comprobar que en este pequeño restaurante de barrio se sirve buena comida casera.
Hagamos un "Urruti, te quiero!"
Leemos la carta mientras degustamos unas rostas de Soria crujientes y sabrosas que nos vemos obligados a repetir. Compartimos la bomba catalana (rellena de trinchado, butifarra del perol y romesco picante), la tortilla de cocoches de bacalao y pimientos verdes con emulsión de pil-pil, los raviolis de pies de cerdo y manzana con salsa de pollo asado y jamón ibérico, y el guis gamba roja y su suquet. Para acompañar la comida, Ferran nos recomienda una botella de Alma del Priorat 2024 de la bodega Casa Gran de Siurana (DO Priorat). Compartimos también los segundos: canelón trufado de gallo del Penedès con salsa de foie, y meloso de carrillada de ternera Black Angus con parmentier de patata, que literalmente se deshace en contacto con el paladar.
El postre no puede faltar nunca, y en este caso nos negamos a compartirlo: un "Urruti, te quiero!", una crema catalana y un pastel de queso en salsa de dulce de leche y crumble. Hemos disfrutado mucho de la teca, y queremos disfrutar también de la conversación con Ferran mientras Satoko acaba el servicio con Inés, ayudante de cocina, y todavía vuelta por la sala Raquel Callao, que junto con Ferran tiene el contacto con el cliente: "Nunca habría pensado que estaría en la sala después de tantos años cocinando, pero me encantas, pero me encanta esta cocina nunca pasará de moda", explica contento. Han encajado de maravilla en el barrio, y tienen clientes que ya son amigos. Y esto es por el trato cercano que dispensan y por el amor que transmiten por nuestra cocina de siempre.