La pizza-tortilla de jamón ibérico, la receta del cocinero David Andrés

El cocinero del restaurante Via Veneto de Barcelona, David Andrés, revela cómo hacer en casa una pizza que no necesita harina, porque la base la prepara con huevos. El resultado es una preparación que algunos cocineros también llaman tortilla abierta, y que es tan sencilla de preparar como de comerla.

Ingredientes para 4 personas

• 6 tomates de pera
• Orégano
• Sal
• Azúcar
• Pimienta negra
• 200 g de mozzarella
• 16 lonchas finas de jamón ibérico
• Hojas de albahaca fresca
• Tomates cherry
• 8 huevos
• Aceite de oliva virgen extra

Elaboración

1. Triture los 6 tomates, enteros, con la ayuda de la batidora eléctrica. Cuele, y separe las semillas y las pieles de la pulpa. Quédese con la pulpa.
2. Cocine la pulpa del tomate con orégano, sal y pimienta a su gusto, y un buen pensamiento de azúcar, que nos ayudará a compensar un poco la acidez del tomate.
3. Dejar reducir un poco hasta que pierda el agua y entonces quede una salsa más consistente.
4. Prepare ahora las bases de la pizza.
5. Para empezar, bata dos huevos por cada una de las pizzas.
6. Poner al fuego medio-alto una sartén con un chorro de aceite de oliva virgen extra.
7. Verter los huevos batidos sin remover la sartén. Simplemente, reparte el huevo líquido por toda la superficie hasta que obtenga una capa de tortilla bien fina, cocida por debajo pero semicocida, es decir, un poco cruda por encima.
8. Traslade esta base de pizza a un plato grande plano y pinte con una cucharada generosa de la salsa de tomate reducida que ha hecho.
9. Decorar con mozzarella cortada en trozos pequeños, tomates cherry, hojas de albahaca y las lonchas de jamón ibérico.

Notas

• La tortilla-pizza la puede adaptar a su gusto con otros ingredientes que le gusten. El caso es que la base es una tortilla que debe estar sólo cocida por la parte de abajo, la que toca la sartén, y la de encima debe quedar medio cocida.
• Con los tomates cherry, puede hacer un juego de colores. Así que se puede poner de colores amarillos y rojos.
• Si prefiere otros tipos de quesos, póngalos sin problema.
• Es preferible que la preparación la coma en cuanto la haya preparado, que sea caliente. No la guarde de un día para otro ni en la nevera ni fuera de la nevera.
• Si desea jugar con el efecto pizza, y si tiene en casa, se la puede comer con el envase de una caja de pizza, pero servida en un plato plano será perfecto.

Mozzarella

Queso fresco italiano, destaca por su aporte de calcio al organismo (632 mg por cada 100 g de mozzarella), además de aportar antioxidantes, que ayudan a combatir los radicales libres, ligados con el envejecimiento.

Orégano

Es el condimento estrella de las pizzas pero no es un ingrediente secundario nutricionalmente. Sus beneficios nutricionales van ligados a las afecciones del aparato respiratorio, porque se considera que actúa como una especie de analgésico.

Huevos

Comer huevos significa ingerir grasas saludables, además de ingerir la deseada y conocida vitamina B12, que ayuda a funcionar correctamente el sistema nervioso, y que, entre otras propiedades, evita la anemia. Entre los minerales destacan el sodio y el zinc, que ayuda a tener una buena inmunidad.