¿Por qué volver a hacer 'Twister' si la nueva versión es peor que la original?
Lee Isaac Chung retoma las historias de tornados que amenazaban a los protagonistas del filme de 1996
'Twisters'
- Dirección: Lee Isaac Chung. Guión: Mark L. Smith y Joseph Kosinski a partir del guión original de Michael Crichton y Anne-Marie Martin.
- 128 minutos
- Estados Unidos (2024)
- Con Daisy Edgar-Jones, Glen Powell, Anthony Ramos y Maura Tierney
En 1996, la efectiva Twister planteaba una cuestión fundamental: la del papel cada vez más limitado que jugarían las estrellas de cine (y, en consecuencia, las historias a escala humana) en el Hollywood contemporáneo frente a la hegemonía de los efectos digitales. En cierto modo, el tornado creado por CGI que asediaba, como un invencible malvado, Helen Hunt y Bill Paxton al final de la película, constituía la encarnación visual de un cambio de paradigma iniciado con Jurassic Park.Twisters podría ser el resultado desmayado, sin alma, de esa transformación; a pesar de la voluntad de Lee Isaac Chung (Minario) de convertir la película en un homenaje al filme original y al cine comercial de los años 90, esta es una obra impersonal que orbita sobre sí misma sin llegar a ninguna parte y en la que sus protagonistas (los caçatornados interpretados en piloto automático por una Daisy Edgar-Jones vestida como Laura Dern en Jurassic Park y un siempre carismático (Glen Powell) presentan un comportamiento tan errático como el de una hoja en una tormenta.
Aparte del discurso negacionista y trumpista del filme –ni una sola vez se menciona el cambio climático en una película sobre desastres naturales cada vez más devastadores y frecuentes–, lo que resulta imperdonable son las confusas y poco inspiradas secuencias de acción (la que transcurre en un cine devastado por un tornado funciona como involuntaria metáfora y como ejemplo de buena idea desperdiciada), un mareante remolino de efectos digitales que acaba arrasando con el interés del público.