«Cuando alguien dice "sexo", lo primero que me viene a la cabeza es "penetración"»

Barcelona"Cuando alguien dice sexo, ¿qué te viene a la cabeza?" "¿Qué requisitos habría que cumplir para ver porno con seguridad?" "¿Sabéis qué es la cosificación?" adolescentes de entre 2º y 4º de ESO que susurran y ríen.El micrófono aterriza en Bernat: "Yo pienso en una persona del sexo femenino, una habitación y, siendo sinceros, tetas". Omar también se anima: " Cuando alguien dice sexo, lo primero que me viene a la cabeza es penetración. Y después todo el tema del embarazo y las enfermedades". La sexóloga Lídia Duran intenta tranquilizar al gallinero, cada vez más alborotado: "¿Veis cómo todos tenemos una idea del sexo bastante limitada? ¿De dónde sale todo ello?".

Los jóvenes de los institutos Príncipe de Viana y Montserrat Roig de Barcelona y Olorda de Sant Feliu de Llobregat acaban de asistir al estreno de La fiesta, un espectáculo de Daniela Feixas sobre sexualidad, adolescencia y violencia que ha dirigido Ricard Soler Mallol. El montaje da voz a seis adolescentes –interpretados por Laura Gaja, Eloi Jaume, Abril Julien, Julia Mascort, Ravina Raventós y Biel Rossell– que relatan experiencias insatisfactorias sobre las primeras relaciones sexuales, el uso del porno, vínculos afectivos tóxicos y el impacto de la presión social y el patriarcado.

"Salen siempre cuerpos perfectos"

Tras el espectáculo, el público pone énfasis en cómo el consumo de pornografía modifica su idea de sexualidad. "Todo el que mire porno debería saber que no es real", dice Ilán, y Duran le responde que estos contenidos "están marcados por la heteronormatividad, el falocentrismo, la banalización de la violencia y la cosificación". Algunas palabras les suenan, otras las desconocían. "Salen siempre cuerpos perfectos, chicas muy delgadas con tetas grandes y chicos muy cachas", subraya Elisenda.

¿Qué les empuja a consumir pornografía? Algunos admiten que lo hacen para adquirir conocimientos sexuales. "La educación sexual llega muy tarde, y nosotros tenemos acceso al porno antes", dice Flavia, y la Blanca añade: "Vemos porno porque nos da miedo o vergüenza hablar con los padres, falta conocimiento". Este hecho, precisamente, ha empujado a las escuelas a avanzar el momento de hablar de sexualidad en el aula. "Antes empezábamos primero de ESO, ahora ya lo trabajamos en quinto de primaria. Vemos que, si no, se avanza por otro lado", señala Duran.

El objetivo de La fiesta es, precisamente, acercar la sexualidad a los adolescentes a través de experiencias que puedan concebirse como propias. "Demasiado a menudo he visto ficciones que utilizan la adolescencia desde un punto de vista muy adulto, que cosifican y sexualizan a los adolescentes", afirma Feixas. El espectáculo se ha construido a través de las conversaciones con jóvenes entre 14 y 20 años que expusieron sus historias vividas en primera persona. "Se abrieron muchísimo, especialmente las chicas. El mensaje que he extraído es que necesitan hablar de ello y que necesitan información, porque sin ello se golpean las paredes. Se mueven por el ensayo y error en un tema tan importante como es el sexo y sus efectos", dice Feixas. La fiesta se representará hasta el 3 de diciembre en diversas funciones escolares y tendrá sesiones abiertas al público general.