Barcelona encuentra destino en un edificio icónico de la Exposición Internacional
La Casa de la Prensa será un centro de investigación vinculado al Institut del Teatre
BarcelonaBarcelona tendrá un centro dedicado a las artes escénicas y se instalará en la Casa de la Prensa de Montjuïc, uno de los edificios emblemáticos levantados con motivo de la Exposición Internacional de 1929. Rueda el mundo y vuelve al Born. Después de casi quince años de haber firmado un acuerdo entre el Ayuntamiento de Jordi Hereu y la Diputación de Barcelona para dedicar este espacio al Museo de las Artes Escénicas (MAE), y de haber guardado el documento en un cajón, las mismas instituciones anuncian ahora, de nuevo, un acuerdo que va en la misma dirección de vincularlo al Institut del Teatre. El consistorio cederá el edificio a la Diputación, que se ocupará de la rehabilitación integral y la creación del nuevo equipamiento de cara al 2029, año en el que Montjuïc celebrará el centenario de la Expo.
Dos décadas después, sin embargo, el nuevo proyecto irá más allá de ser un museo tradicional y tendrá usos más híbridos. De hecho, incluso cambiará de nombre para convertirse en el Centro de Investigación y Acción Comunitaria en Artes Escénicas del Institut del Teatre. "Es un cambio de paradigma. Queremos inventar un nuevo modelo que puede ser referencia a nivel europeo y mundial", dice el diputado de Cultura, Pau González. Además de mantener las labores de conservación y divulgación del patrimonio escénico, el proyecto incorporará residencias para artistas e investigadores; laboratorios que vinculen artes, tecnología y sociedad; proyectos de investigación que pivoten sobre la escena contemporánea y el pensamiento crítico; y proyectos colaborativos con el tejido social. La Diputación está en proceso de adscribir el Institut del Teatre a la Universidad de Barcelona.
Para el diputado de Cultura, el nuevo proyecto mata a muchos pájaros de un disparo: "Rellenamos de vida un espacio que merece volver a tener usos, actualizamos una joya como es el Centro de Documentación y Museo de las Artes Escénicas, garantizamos un espacio vecinal y dignificamos la memoria de las artes teatroro como es Catalunya". Además del nuevo centro de Investigación, el proyecto hace que el edificio mantenga los usos vecinales previstos y continuará acogiendo a la Asociación de los Amigos de la Casa de Prensa.
La biblioteca 'marcha'
Tal y como avanzó el ARA, el Ayuntamiento había paralizado en verano de 2024 el último proyecto previsto para este edificio de la avenida Rius i Taulet, que debía ser una biblioteca y un centro vecinal del Poble-sec, porque pretendían encontrar un espacio más grande y más central. En julio anunciaron la expropiación de una finca en la calle Blesa, donde ensayan los Castellers del Poble-sec, para hacer un gran equipamiento de barrio donde deben ir la Biblioteca Francesc Boix y diversas asociaciones de cultura popular y del barrio.
Esto ha abierto camino a la reclamación histórica de que Barcelona tenga un gran museo del teatro –aunque, con el anuncio actual, tampoco se dibuja un espacio de exhibición que permita desplegar el vasto patrimonio que conserva el MAE, desde los trajes de Xirgu y Caballé hasta las escenografías de Fabià Puigserve la Barca–. El Museo de las Artes Escénicas ocupa ahora los bajos del Institut del Teatre y depende de la Diputación de Barcelona, porque su fundación se remonta a hace un siglo, en la época de la Mancomunitat de Catalunya. El nuevo espacio reforzaría el triángulo teatral que forman el Mercat de les Flors, el Teatre Lliure y el Institut del Teatre, y de hecho ya históricamente el museo debía ser una pata más de la Ciudad del Teatro.
En desuso desde hace 30 años
El majestuoso edificio modernista de Pere Domènech i Roura, hijo de Lluís Domènech i Montaner, acogió a la prensa que cubría la Expo de 1929, y ahora está desocupado y en estado de abandono. Hasta finales de los noventa fue una jefatura de la Guardia Urbana, pero después sólo ha tenido usos puntuales en los bajos. El edificio, que tiene 1.500 m2, seguirá acogiendo a la Asociación de los Amigos de la Casa de Prensa –formada por entidades vecinales y organizaciones de periodistas–, "que lleva años luchando por recuperar un espacio tan emblemático", explica Raquel Gil, quinta teniente de alcalde y concejala de Sants-Montjuïc. Los espacios dedicados a los vecinos y entidades se mantendrán tal y como eran.
El Ayuntamiento y la Diputación quieren que este espacio recoja su legado histórico vinculado a la comunicación y, por tanto, sea un lugar para reflexionar "sobre el consumo crítico de la información" y "conceptos como verdad, pensamiento crítico, confianza pública y democracia cultural", apuntan. En 2018 el estudio ONL Arquitectura ganó el concurso para la rehabilitación del espacio y ahora se tendrá que modificar ese proyecto para adaptarlo a los nuevos usos del Institut del Teatre. Aunque las pagará en su totalidad la Diputación de Barcelona, las obras las hará como estaba previsto la sociedad municipal BIMSA para acelerar tempos. Se prevé que el proyecto ejecutivo esté listo en 2026 y el edificio esté terminado en 2029.