'Milanización' completada en Múnich: los apuntes en caliente del Bayern-Barça
A corto plazo, la recuperación tendría que pasar por reforzar el equipo
BarcelonaDerrota clara y merecida en Múnich y victoria plácida del Benfica contra el Dinamo de Kiev. El Barça cae en la Champions y tendrá que jugar la Europa League. A continuación, los apuntes en caliente de la noche en Alemania.
Venganza bien entendida. Tercer bofetón en un año y medio del Bayern al Barça. Tercera demostración fehaciente de que el equipo azulgrana no está para competir por cosas grandes en Europa. La de este miércoles en el Allianz duele incluso un poco más, porque los alemanes no se jugaban nada y se impusieron casi silbando, sin esfuerzo aparente. También es cierto que Nagelsmann no escatimó recursos y plantó una alineación sin rotaciones, ajena al trámite de su conjunto. Cuando se rehaga, que se rehará, el Barça se tendría que vengar de tanta voracidad. El problema será llegar a tiempo antes de que se retiren Müller o Lewandowski.
Felicidades a todo el mundo. Se marcharon Messi y Griezmann y la respuesta fue pedir cedido a Luuk de Jong, porque Memphis y el Kun ya estaban fichados de antes. A corto plazo, la recuperación tendría que pasar por reforzar el equipo. Pero no será fácil, porque al ya conocido inconveniente salarial que se encontrará el Barça para operar en el mercado de invierno se sumará ahora el pequeño detalle de que los grandes jugadores se lo pensarán dos veces antes de ir a la Europa League. Se completa la milanización del Barça. Trabajazo para Xavi. Felicidades a todo el mundo. Sobre todo a los responsables de 10 años de imprudencia al frente de la nave.
Dest contra Davies. Hace gracia recordar que el Bayern rivalizó con el Barça, hace un año y pico, por el fichaje de Dest. Y que los alemanes volvieron a interesarse por el lateral culé en el mercado estival. La pregunta es: ¿exactamente para qué? Si no es para hacer negocio, cuesta de entender. Básicamente, porque Pavard y Davies le dan unas cuantas vueltas. Especialmente Davies, que se prestó a hacerle una demostración a la cara de cómo se tiene que comportar un futbolista de banda. Y esto que es solo un día más viejo que él. Qué bestia. Incluso se zampó a Araujo, que es muy fiable en la marca.
Lo que hay no rinde. Otro de los retratados de la noche muniquesa fue Mingueza, que entró por el lesionado Jordi Alba y sufrió una pesadilla con Coman. Se ha acabado el hype con el vallesano, sí, pero nunca tendría que capitalizar las críticas en un equipo con Piqué, superado un día más contra grandes delanteros; Memphis, un atacante con más cuerda que cometa; o Ter Stegen o Frenkie de Jong, dos jugadores poco acostumbrados a demostrar en grandes escenarios por qué se los considera de los mejores del mundo en su posición. El portero ya ha amortizado su fichaje, pero De Jong todavía no. Y ya van demasiadas noches europeas a remolque.