Los peligros del préstamo puente de Goldman Sachs para el Espai Barça
Entre las diferentes opciones que tenía, el Barça ha optado por seguir con la banca de inversión norteamericana, que puede llegar a tener mucho poder
BarcelonaEl Barça ha tenido que buscar una solución ante la imposibilidad de cerrar una financiación de hasta 1.500 millones de euros para las obras del Espai Barça, tal como se propuso en octubre en la asamblea de compromisarios: pactar el crédito a principios de este verano como muy tarde. Goldman Sachs no ha querido vehicular una cifra tan elevada de dinero en un momento en que el club azulgrana todavía sigue en una situación económica muy delicada y hay una guerra en Europa. Ante este hecho, había tres opciones: pactar una solución provisional con la banca de inversión norteamericana, buscar una vía de financiación alternativa (una idea que, según ha podido saber el ARA, se ha explorado) o dejar el asunto por cuando la economía del Barça y la salud de los mercados hayan mejorado.
Finalmente, tal como avanzó el portal Goal.com y ha confirmado el club, se ha optado por la primera opción. La junta directiva de Joan Laporta ha pactado un préstamo puente de 90 millones de euros con Goldman Sachs que se suma al que ya se hizo efectivo, también de 90 millones, durante el mandato de Josep Maria Bartomeu. Un préstamo, el de la junta anterior, que lleva dos años de retraso respecto a los plazos iniciales para devolverlo debido a las dificultades económicas de la entidad. Estos 180 millones en total se engloban dentro de la financiación de 1.500 millones de euros que el club quiere acabar cerrando para poder hacer realidad el Espai Barça.
Desde el inicio del proyecto, el club ha optado por vehicular la financiación mediante un tercer actor, una decisión que tiene ciertas ventajas, pero que también comporta unas obligaciones que pueden llegar a atar de pies y manos la entidad. “Con este crédito puente el Barça ha perdido el control de la operación”, sentencia Marc Ciria, experto financiero en el club azulgrana. “El Barça tenía dos opciones para buscar financiación: una en que el Barça tuviera el poder de la gestión sobre el préstamo haciendo un tender. Así ponía en competencia las diferentes empresas y entidades financiadoras con la intención de obtener el mejor precio para el proyecto; y otra, la que ha elegido, que es coger a alguien que entienda en este tipo de operaciones y que lo lidere, cosa que seguramente te permitirá conseguir la financiación de una manera más rápida”, expone el director general de Diagonal Inversiones.
El hombre de negro
“El hecho de elegir la opción de que lo lidere un tercero puede comportar que el Barça tenga un controller que se tendrá que asegurar que el dinero va donde tiene que ir y se devuelve cuando toca”, advierte Ciria. Pero ¿hasta dónde puede llegar el poder de este hombre de negro puesto por Goldman Sachs? “Puede exigir que no se hagan ciertos fichajes o renovaciones de jugadores. Podría vetar operaciones de inversión si el Barça no cumple el plan financiero de regreso (que implica incrementar en un 60% los ingresos del día de partido). El club tendría muy restringida su política de actuación en el ámbito económico”, explica.
La información revelada por Goal.com habla de un interés del 3,5% en este préstamo puente. Pero falta saber si es fijo o variable, condicionado a las fluctuaciones de los tipos de interés. Preguntada por el ARA, la junta de Laporta ha preferido no responder a esta cuestión. “Si es variable es una operación cara”, considera Ciria. Por otro lado, se pregunta si Goldman Sachs se llevará una contraprestación o una comisión para levantar esta operación. “Porque entonces la operación ya sería superior al 3,5%”, puntualiza.
El vínculo con Goldman Sachs
La relación entre el Barça y Goldman Sachs va más allá del Espai Barça. La entidad norteamericana también vehiculó una refinanciación de la deuda por valor de 595 millones de euros el verano pasado que permitió a la junta de Joan Laporta poder afrontar los pagos urgentes que la situación económica heredada le imposibilitaban satisfacer. Ahora un extrabajador del Espai Barça explica que, “si Goldman Sachs quiere recuperar el dinero que ya ha dejado al club, no le queda más remedio que ayudarlo, no puede cerrar el grifo de repente porque se pegaría un tiro en el pie”. En estas nuevas negociaciones ha cogido relevancia el tesorero del club, Ferran Olivé, después de la salida del director general, Ferran Reverter.
Por otro lado, fuentes del Ayuntamiento de Barcelona informan al ARA que “la siguiente parte del trabajo” que tienen que hacer con el Barça “será la adaptación de Montjuic”, donde el primer equipo de fútbol masculino irá a jugar la temporada 2023-2024 mientras avanzan las obras del Camp Nou. El coste que tendrá para el club azulgrana trasladarse al Estadio Lluís Companys se sitúa en unos 20 millones de euros.