Apuntes en caliente

Con todos ustedes, la peor salida ensayada de la historia: los apuntes en caliente del Barça-Alabès

La victoria azulgrana sólo sirve para recuperar a Lewandowski y mantener la distancia con el Girona y el Madrid

Los jugadores del Alavés celebrando el 0-1 en Montjuïc.
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BarcelonaVictoria pobre del Barça contra el Alavés en Montjuïc. Tres puntos sudados en la segunda mitad, cuando Robert Lewandowski ha marcado dos goles balsámicos para darle la vuelta a una primera parte paupérrima. Con este marcador, los culés mantienen el Girona y el Madrid a 4 y 2 puntos, respectivamente. A continuación, unos apuntes en caliente.

Un regalo a los 20 segundos. El día que el Barça debía reaccionar, el día en que el equipo de Xavi debía reconectar consigo mismo, volver a ser sólido y reconciliarse con el juego de posición, resulta que la primera jugada desde el saque de centro ha sido un balón largo de Iñigo Martínez para Araujo, que ha corrido desde el campo propio para descolgar el balón en torno al área rival. El plan no sólo no ha salido bien, sino que ha motivado una pérdida de Gündogan y una fantástica transición del Alavés, que ha aprovechado que Cancelo cerraba de central (?) para que el joven y cepado Samu superara a Ter Stegen por debajo de las piernas. Si la acción estaba ensayada, no la entiendo. Y si fue improvisada, menos. Desbarajuste.

Desdibujado. El día que el Barça debía dejar atrás la frustración del clásico, el mal partido en Anoeta y el descalabro preocupante en Hamburgo, Xavi ha sentado a Balde en el banquillo y lo ha probado con Cancelo de lateral izquierdo. El resultado ha sido un drama, porque el portugués no sabía por dónde moverse, se ha estorbado a menudo con Joao Félix y, encima, ha abierto un agujero enorme a sus espaldas para que el Alavés generara peligro. El ex del City de Guardiola aterrizó en Barcelona como un prodigio que debía corregir una carencia histórica, pero con el paso de las semanas, combinado con otros factores, se ha convertido en el clásico jugador que sólo goza cuando recibe la pelota. Colectivamente, su impacto no es satisfactorio.

Kounde, el mejor lateral derecho. El día que Lewandowski tenía que romper su peor racha en más de una década, el polaco ha empatado el partido con un gol de cabeza sólo al alcance de un especialista. Sin embargo, quiero fijarme en el centro, obra de un Kounde que ha iniciado el partido jugando de central derecho. Viendo cómo sufría con Samu en todos los duelos cuerpo a cuerpo, Xavi le hizo el favor de colocarlo de lateral, desde donde minutos después pudo activar su buen pie para servir el 1-1. El cambio ha movido al eje Araujo, que sí ha mantenido a raya al corpulento punta del Alavés. Sí, sabemos que Kounde prefiere jugar de central, pero hay una máxima irrefutable: el mejor Barça de Xavi está con él abierto a la derecha. Cancelo no ha variado esa tendencia.

Otra bala superada. El día que el Barça recuperaba a Pedri como titular en la sala de operaciones, el canario ha perdido 12 balones sólo en la primera parte. Sirva este dato para ilustrar lo pésima que ha sido la actuación de los azulgranas durante los primeros 45 minutos. Después del descanso ha habido reacción, pero más por genio e intensidad que por fútbol. La propuesta de juego ha continuado siendo discreta contra un oponente llamado a luchar por evitar el descenso. La única lectura positiva es que Lewandowski vuelve a marcar goles de dos en dos. Dicho esto, ya queda menos para que De Jong vuelva a jugar. En cuanto a Xavi, sortea una bala gracias al resultado y gana tiempo para que su equipo vuelva a tener sentido.

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