El juez del caso Rubiales llama la atención a García Cuervo y Luis de la Fuente: "¡Basta ya!"

BarcelonaLas presiones que Jennifer Hermoso asegura que recibió para que avalara el beso en la boca no consentido de Luis Rubiales han tenido un papel central este martes en la segunda jornada del juicio del caso en la Audiencia Nacional. Uno de los testigos que han pasado por delante del juez ha sido el director de comunicación de la Federación Española de Fútbol en el momento de los hechos, Pablo García Cuervo, que redactó un primer comunicado supuestamente validado por Hermoso en el que sacaba hierro a la polémica por el comportamiento de Rubiales después de la final del Mundial. En su declaración ha puesto en duda la versión de la futbolista, a la que ha descrito como una persona que no es de fiar y dada a los cambios de opinión. "Es una persona bastante influenciable y bastante manipulable", ha dicho. Sus evasivas, como las del seleccionador Luis de la Fuente, han recibido una fuerte reprimenda por parte del juez, que les ha recriminado con un "¡Basta! ¡Quiero saber las cosas con claridad, no con chulería!".

García Cuervo: "Jennifer Hermoso es una persona bastante influenciable y manipulable"

García Cuervo es uno de los trabajadores de la RFEF que las jugadoras de la selección española pusieron en el punto de mira en septiembre del 2023 y que lograron apartar. Y él no ha estado de recordarlo a preguntas de la fiscal. Pese a asegurar que no tiene "ninguna animadversión" contra Hermoso, ha destacado que firmó con otras jugadoras un documento pidiendo su destitución y que, a raíz de esa petición, le despidieron. "Aún hoy estoy esperando a que alguien me dé alguna explicación", ha dicho, asegurando que no recibió ninguna, "tampoco de las jugadoras".

Con esta previa, y en una declaración en la que el juez ha llamado la atención al testigo en varias ocasiones por su actitud, la fiscal le ha preguntado por el comunicado con declaraciones de Hermoso que se difundió a los medios tras el beso forzado. En un primer momento, García Cuervo ha dicho que escribió unas "pequeñas declaraciones" que ella tenía que aprobar para ser difundidas, pero rápidamente ha matizado que lo que hizo es transcribir unas declaraciones que ella ya había hecho "libremente" a la cadena Cope. Sea como fuere, admitió que el texto fue "supervisado" por el propio Rubiales.

Según su relato, cuando Hermoso bajó del autobús del equipo le leyó las declaraciones y les dejó leer de su móvil. Y ella, ha dicho, las avaló. "Ella dice que okay, adelante. Pero que no le pida hacer nada más porque era lo último que haría al respecto", ha afirmado. El exresponsable de comunicación de la RFEF ha admitido que la futbolista le dio el sí con cierta "desgana", pero ha añadido que "una persona de 34 años" como Hermoso no habría dado el visto bueno si no hubiera querido. "No es no y sí es sí", ha llegado a decir. , ha continuado, surgió la posibilidad de que Hermoso grabara un vídeo con Rubiales para enterrar la polémica. fio, porque puede cambiar su versión. Debido a que yo ya tenía atado el suyo okay en el comunicado, yo con ella ya no hablaría más de este tema [...]. Porque yo considero que es una persona bastante influenciable y bastante manipulable, y entonces puede cambiar de opinión", ha dicho.

El testigo de Pablo García Cuervo ha sido especialmente tenso con el juez. El magistrado le ha recriminado en varias ocasiones sus palabras y su actitud, hasta el punto de que, ya a gritos, le ha dicho que quería "saber las cosas con claridad, no con chulería". Fue después de que el excargo de la RFEF reprochara a la abogada de la AFE (Asociación de Futbolistas Españolas), María José López, cuando le estaba interrogando, que no se había preparado el juicio.

De la Fuente se desvincula de las maniobras de Rubiales

Tras García Cuervo fue el turno del seleccionador masculino Luis de la Fuente, que negó tener nada que ver con la operación para exculpar a Rubiales por el beso no consentido. En este sentido, negó haber participado en la reunión de crisis que tuvo lugar en el despacho del entonces presidente de la Federación tres días después de la final del Mundial, en la que se habría condicionado la elaboración de un informe interno que blindó al máximo responsable de la RFEF.

Aunque De la Fuente ha asegurado que estaba en una sala al lado y que Rubiales iba y venía para hablar con él únicamente de una convocatoria que tenía lugar unos días después, la responsable de prensa de la selección femenina, Patricia Pérez, le había situado en el encuentro en el interior del despacho. Y no es la única: este mismo martes también le ha señalado como uno de los participantes del encuentro otro testigo, el exsubdirector de comunicación de la Federación, Enrique Yunta. En esa reunión se prestó declaración a Pérez y tanto ella como Yunta aseguran que Rubiales dictaba parte de sus respuestas.

El seleccionador, que ha mantenido que no fue consciente de la "dimensión" de lo ocurrido con Hermoso hasta su llegada a España, también ha rechazado haber sido testigo de las gestiones que se produjeron en el avión de vuelta, porque estaba "muy cansado" y "estaba centrado en descansar", ha dicho. La fiscal destacó entonces que en la fase de instrucción sí admitió haber oído en el avión algo sobre el comunicado. Él reconoció que en la zona donde estaba "seguramente" se habló de lo que se estaba haciendo con la polémica, pero negó "rotundamente" haberse enterado de nada.

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