El regreso más esperado: Marc Márquez volverá a competir este fin de semana
Más de 100 días después de su último Gran Premio, el piloto catalán vuelve a la competición oficial en Aragón
BarcelonaCien diez días después de la última vez que compitió en un Gran Premio, el de Italia, el 29 de mayo, Marc Márquez volverá a la competición en el Gran Premio de Aragón de este fin de semana. Desde que se sometió con éxito a una cuarta operación en el húmero derecho, el ocho veces Campeón del Mundo ha seguido las estrictas indicaciones de su equipo médico hasta lograr una recuperación completa.
Después de numerosas revisiones, consultas y pruebas, todos los implicados están satisfechos con la recuperación y el piloto del equipo Repsol Honda ya dará este fin de semana el paso siguiente del proceso: volver a disputar un Gran Premio. El objetivo será continuar mejorando la forma física sobre la moto y evaluar el rendimiento durante la intensidad de un fin de semana de Gran Premio y de una carrera. El Circuito de MotorLand Aragón se puede considerar un trazado de casa para Márquez y la afición local siempre es un punto de apoyo más.
Después de cuatro meses de reposo y trabajo físico gradual, Márquez está preparado para volver a sentirse piloto. "Parece una pesadilla, pero pronto volveré. Será duro, pero el momento de hacer la intervención es ahora", decía en mayo cuando paró para hacerse la cuarta intervención en el húmero. Necesitaba volver a recuperar la movilidad perdida que le condicionaba a la hora de competir: tenía que regular una rotación excesiva que le causaba dolor y sobrecargas permanentes. "Tengo limitaciones importantes en el húmero que no me permiten pilotar la moto de una manera adecuada para conseguir los objetivos que siempre me he marcado", añadía. Ahora esto por fin se ha acabado.
El de Honda es consciente que esta es "la última" oportunidad, como confesó a DAZN hace algunos días. Si esta vez no sale bien se ha acabado. Así se lo ha prometido a su abuelo y así lo piensa hacer. Han sido cuatro operaciones en el mismo hueso, por cuatro lugares diferentes, para intentar resolver los problemas que arrastra desde la fatídica caída en el Gran Premio de España del 2020. De aquel momento clave en la carrera de Marc Márquez ya han pasado más de dos años. Además, si no hubiera suficiente con el culebrón del húmero, la diplopia (visión doble) también ha sido protagonista y lo ha alejado del asfalto dos veces más.
Todo esto ahora queda en el pasado. "Me he levantado con unas agujetas que no es ni medio normal", tuiteaba con emoticonos de risa Marc Márquez después de las pruebas en el circuito de Aragón de hace algunos días. Las ganas eran enormes y el catalán no esperó ni un minuto para volver a poner la moto al límite, pero siempre con precaución. Ya sin dolor, vuelve a sentir que controla la moto y no al revés. Ha podido volver a pilotar como él le gusta, a trazar sus líneas –obviamente, teniendo en cuenta que todavía está acabando de recuperarse físicamente–, y ya ha podido dejar de lado los miedos y las desazones para centrarse en lo que pasa sobre la moto.
El pasado doloroso queda atrás y Marc Márquez solo piensa en su futuro y en el de Honda, que como mínimo continuarán yendo de la mano los dos años que le quedan de contrato. Los tests de Misano eran imprescindibles para este futuro juntos y por eso el catalán estaba, desde el viernes por la tarde, en el circuito italiano. Sin él en el box, Honda ha perdido el norte. Ahora, con un Márquez en buenas condiciones, sin dolor y con muchísimas ganas, la marca japonesa quiere trazar una hoja de ruta que acompañe al ocho veces campeón del mundo, una vez más, al puesto más alto del podio.