Agricultura

Las heladas en el Segrià y la Noguera afectan alrededor del 15% de la producción de fruta en Cataluña

Las fincas más afectadas registraron temperaturas de hasta -4 grados la pasada madrugada

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Las consecuencias de la helada de la última madrugada.

Lleida / BarcelonaLas últimas heladas han sorprendido a los campesinos de Lleida. Acostumbrados a afrontar bajas temperaturas durante el mes de marzo, a muchos les ha cogido ahora, en abril, con el pie cambiado. Gran parte de los árboles ya habían formado frutos (del tamaño de una uña) que, al estar compuestos de un 99% de agua, han acabado congelándose y estropeándose completamente con las heladas de la pasada madrugada. Además, en algunos lugares, las grandes cantidades de hielo depositadas sobre las hojas ha terminado destruyendo ramas y árboles enteros.

Decenas de municipios situados en la ribera de los ríos Segre y Noguera Ribagorçana, entre el embalse de Santa Anna y Balaguer, han quedado afectados por dos noches seguidas de bajas temperaturas. La más cruda de todas, esta pasada madrugada. La masa de aire muy frío de origen continental que afecta a Catalunya estos días ha provocado una situación totalmente atípica, y algunas hondonadas han registrado 4 grados negativos durante más de tres horas.

A la espera de realizar un balance cuidado de las afectaciones durante los próximos días, organizaciones agrarias calculan que se ha perdido entre el 15% y el 20% de toda la producción frutal catalana (sobre todo de melocotón, nectarina y paraguayos, además de manzana y pera). Ivares de Noguera, Algerri, Alfarràs, Corbins, Térmens, Albesa, Torrelameu y Almenar han sido algunos de los municipios más afectados. "Cerca de la mitad de las fincas en estos pueblos no disponen de sistemas de protección", calcula Jaume Gardenyes, responsable de la fruta dulce de Unió de Pagesos. "Aunque en estos lugares están acostumbrados a afrontar bajas temperaturas y disponen de medidas, ha sido una helada demasiado tardía", apunta Sergi Balué, jefe sectorial de fruta dulce del sindicato JARC.

Ivars de Noguera ha sido uno de los municipios más castigados de Ponent. "Aquí se han perdido más de 150 hectáreas de frutales", asegura el alcalde, Josep Magrí. La mayor parte de las fincas afectadas, de paraguayos y nectarinas, se encuentran en lo que ellos llaman la huerta vieja, cerca del Barranco del Valle. "Esto no ha sido nada normal", lamenta Ramon Gasol, un labrador de Ivars de Noguera que ha perdido el 70% de toda su producción de melocotones, peras y manzanas. Gasol dispone de treinta hectáreas y reconoce que, a pesar de vivir en una zona "donde estamos acostumbrados a las heladas, ésta nos ha destruido la plantación de los árboles más jóvenes". Además de eso, otras zonas del Pla d'Urgell, como Bell-lloc, quedaron afectadas el martes por una granizada que ha dañado algunos cultivos.

Continuará el frío

Estos días se han registrado las heladas intensas más tardías de los últimos años fuera del Pirineo. En varios puntos del interior y en algunos del prelitoral se han alcanzado mínimas entre -2 y -6 °C. Escarchas fuertes que han durado horas y que han afectado a zonas agrícolas. La buena noticia es que los termómetros subirán claramente en las próximas noches. Continuará haciendo frío, pero ya sin las heladas intensas de las últimas horas en zonas agrícolas. En los próximos días llegará más aire frío proveniente del noroeste del Atlántico que provocará un aumento de las nubes y de la inestabilidad con temperaturas que se mantendrán a raya y frescas, pero sin escarchadas.

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