Ángel Simón, un mandato de 15 meses

Barcelona"Me ha sorprendido, no hace mucho que le habían nombrado", dice al ARA un alto representante de la sociedad civil catalana. "Era un nombramiento que sonaba a largo cuando aterrizó en Criteria", añade esta fuente, que trató con Àngel Simón durante unos años. De hecho, ésta es la opinión mayoritaria de las personas consultadas por este diario ante una noticia de envergadura: el prematuro cese de Simón como consejero delegado de Criteria. "¿Qué dices? ¿Esto ha pasado hoy?", dice otro representante de la sociedad civil. La sorpresa, un año después, se mezcla con la incredulidad.

"Tiene una muy buena mirada política, no es un directivo sólo fijado en las cuentas de resultados. Mira por el interés del país", dice la primera fuente sobre Simón. sustituir hace un año a Marcelino Armenter, que era consejero delegado del holding inversor de la Fundación La Caixa desde el 2019. Y así fue, aunque en las quinielas de entonces ya había auténticos pesos pesados, como José María Álvarez-Pallete (ex presidente de Telefónica) y Francisco Reynés ahora. por ser vicepresidente ejecutivo y acompañar a Isidre Fainé, presidente de la Fundación, en uno de los puestos de poder que se consideran más influyentes de la política catalana y española.

"En el caso de Agbar, supo gestionar varios procesos de compraventa y que Agbar no perdiera la personalidad de empresa de aquí", dice una de las fuentes, y da otra de las claves que explican su sonado aterrizaje en la cúpula de La Caixa. En el último año, su brazo inversor ha pulsado el acelerador a través de su estrategia de reinversión en sectores más estratégicos e industriales de la economía española. Primero fue Telefónica, después Europastry y Celsa, y el grupo belga Interparking. El colofón de este breve legado de Simón al frente de Criteria ha sido la vuelta de la sede social de La Caixa a Barcelona. El episodio más controvertido fue la entrada en el capital de Celsa, un anuncio que se enfrió dos semanas después. "Se encuentra todavía en fase de estudio", decía en un comunicado el holding.

"El motivo se me escapa", dice otra persona también consultada por este diario. Nadie parece tener respuestas claras ante la fugacidad de Simón como consejero delegado de Criteria. Hace un año fuentes cercanas a La Caixa enfriaban una de las hipótesis más esperanzadoras para la carrera de Simón, defendida por varias voces del sector financiero: ser el hombre llamado a suceder a Fainé. Ahora la eventual sucesión del presidente de la Fundación La Caixa, que tiene más de 80 años y un mandato vigente hasta el próximo año, vuelve a la casilla de salida. "Simón tiene un trato difícil. Es un buen profesional, pero es difícil entenderse. Exige lealtad a él, no al proyecto", detalla una persona que ha tratado de cerca con él. Las cruentas luchas de poder en estos entornos pueden desgastar relaciones fuertes, no es la primera ni la segunda vez que alguna de las personas más cercanas a Fainé deja a La Caixa. Muy bien conectado con la órbita socialista, hay quien dice que esa sintonía también acaba pasando factura a Simón. "En Madrid, se presentaba en demasiados lugares como el próximo hombre fuerte y sucesor", dice otra fuente, que apunta a que Simón solía cenar con destacados dirigentes socialistas. Fainé lo sabía, y esa "imprudencia" de Simón, unida a una "desconfianza creciente" para con él del presidente de La Caixa, ha acabado siendo decisiva, remarca la misma fuente.

Vecino de Manresa e ingeniero de caminos, canales y puertos de formación, Simón inició su carrera profesional como gerente del Área Metropolitana de Barcelona. En 1995 aterrizó en Agbar, primero como delegado en Portugal y después como director general internacional del sector agua y saneamiento. Tras su paso por Chile, fue designado director general de Aguas de Barcelona. Antes de llegar al universo de La Caixa, Simón fue presidente del grupo Agbar de 2010 a 2024, un cargo que combinó con la vicepresidencia ejecutiva de Suez, un cargo de Europa del Sur y Latinoamérica (2013-2022). Una trayectoria que según una voz que ha tratado con él también le ha definido: "Él no viene del mundo financiero, el mundo financiero pide discreción. Luego aprendió, pero al principio no fue discreto", dice.