El Gobierno aprueba los presupuestos más expansivos: 43.673 M€

BarcelonaEl Gobierno ha aprobado este miércoles el proyecto de presupuestos para 2024, los más expansivos de la historia, que ascienden a 43.673 millones de euros, una cifra que se eleva hasta los 48.492 millones si se incluye a todo el sector público de la Generalitat. Unas cuentas que priman especialmente el gasto en salud, enseñanza, investigación y cultura. Los presupuestos parten de la base de un crecimiento del PIB de un 1,8% en 2024 (en 2023 creció un 2,6%), que permitiría crear 38.900 puestos de trabajo y alcanzar los 3,7 millones de ocupados.

El proyecto de presupuestos viene marcado en parte por la sequía y por el incremento de los intereses de la deuda por la subida de tipos. Las cuentas contemplan un déficit del 0,1% del PIB, que es la cifra marcada para las comunidades por parte del Estado, lo que equivale a 293 millones de euros, un 63% menos que en 2023, cuando el déficit permitido era del 0,3% del PIB. La deuda prevista se situaría en el 29,5% del PIB, alcanzando los 86.568 millones de euros, unos 400 millones más que la cifra a cierre del 31 de diciembre del 2023. Sin embargo, el Gobierno indica que cuando se cancela el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), tal y como se pactó para la investidura de Pedro Sánchez, habría una reducción de unos 15.000 millones y el ratio sobre el PIB bajaría hasta el 23,6%.

Parte importante del aumento del gasto es posible gracias al incremento de los ingresos, que crecerán un 9,7%, hasta los 41.887 millones de euros. De éstos, 35.337 millones corresponden a ingresos finalistas y 6.550 millones a ingresos no finalistas. El grueso de sus ingresos corresponde al modelo de financiación, que aportará 29.674 millones de euros. Un aumento que en gran parte responde al crecimiento de los anticipos de un 10,1%, así como a la liquidación prevista de 2022, que crece un 104,8% respecto al año anterior, hasta los 4.057 millones de euros , gracias al incremento de la recaudación que se produjo hace dos años. En total, los ingresos ligados al modelo de financiación crecerán un 17,6%.

Sin embargo, hay un descenso en los impuestos que recauda la Generalitat (propios y cedidos). El proyecto de presupuestos prevé una recaudación un 2,5% inferior a la de 2023 de estos impuestos (125 millones menos), básicamente por el descenso de transmisiones patrimoniales (-111 millones), actos jurídicos documentados (-77 millones) y patrimonio ( -27 millones).

El gasto social pierde peso, la sequía gana

La sequía marca en parte los presupuestos para 2024, mientras que el gasto social, pese a crecer, pierde peso relativo. Así, el gasto social respecto al total del presupuesto se sitúa en el 72,6%, es decir, seis décimas menos respecto a los presupuestos de 2023, cuando se situó en el 73,2%. Y supone una reducción de dos puntos si se compara con las cuentas de 2022, cuando el gasto social se fijó en el 74,6%. Se entiende por gasto social las relacionadas con salud, derechos sociales, educación, universidades, vivienda, fomento del empleo, transporte público e igualdad y feminismos. Según fuentes del Govern, la reducción del peso del gasto social responde a dos motivos. Por un lado, por el incremento de los intereses de la deuda. Y por otra parte, por el aumento del gasto en políticas del agua para hacer frente a la sequía.

De los 1.045 millones que la Generalitat prevé destinar a hacer frente a la sequía destacan los 327 millones para ampliar y mantener las infraestructuras de regeneración y desalinización; 86 millones para mejoras de riego con el objetivo de ahorrar agua; 32 millones para abastecer el agua de transporte en alta y 27 millones para ayudar a los ayuntamientos para que renueven las redes de suministro.

Los presupuestos de 2024 ya no incorporan los fondos Next Generation en el apartado de ingresos, aunque se continuarán desplegando las convocatorias y los proyectos iniciados el año anterior. Estas nuevas cuentas prevén un incremento del gasto primario (que excluye los intereses de la deuda) de 2.443 millones de euros, un 6,3% más que en 2023. El gasto específico de los departamentos del Govern crecerá en 2.568 millones de euros, un 7,9% más.

En valores absolutos, Ensenyament registra el aumento del gasto más elevado, de 682 millones de euros, que en gran parte se destinará al incremento de la plantilla, a reducir ratios ya la escuela inclusiva. Tras Ensenyament, Salut es el siguiente departamento donde más crece el gasto, con otros 636 millones de euros, que irán destinados en 190 millones al reforzamiento de la primaria y mejoras para los trabajadores sanitarios. Además, Salut cuenta con un fondo adicional de 800 millones de euros para reducir el gasto desplazado y apuntalar la sostenibilidad del sistema a largo plazo. Si se tiene en cuenta este fondo, el gasto de Salut crece en 1.436 millones de euros, un 12,6% más.

En términos relativos, es decir, en porcentaje, el mayor crecimiento es para Cultura, que suma 566 millones de euros, un 19,5% más. Por detrás de Cultura, en lo que se refiere al crecimiento proporcional, se sitúa el departamento de Igualdad y Feminismos, que se amplía un 14,2%.

Inversiones y aumento de coste de la deuda

Las inversiones previstas, especialmente en infraestructuras y equipamientos, sumarán 3.064 millones de euros, con un crecimiento de 270 millones (9,7%). Es el mayor nivel de inversiones desde el año 2011. Entre estas inversiones se encuentran varias ampliaciones de hospitales, la adecuación y mejora de centros educativos o la inversión en depuración, potabilización y desalinización.

Las cuentas del Gobierno también reflejan el fuerte crecimiento de los tipos de interés durante el último año. Así, los intereses de la deuda se elevarán hasta 1.372 millones de euros (591 millones más, un 75,6% más). Si a estos intereses se suman los 800 millones del fondo habilitado por el gasto desplazado de Salut, el incremento global es del 9,6% (3.834 millones de euros).

Sequía, transporte, vivienda y renovables

El Gobierno destaca cuatro ejes principales en los presupuestos para 2024: clima y equilibrio territorial; bienestar y servicios públicos; transformación económica e investigación, cultura y lengua. El primer apartado llega marcado por la sequía y la crisis de la vivienda. Así, en la gestión del agua y la lucha contra la sequía se destinarán 1.045 millones, en el transporte público 2.627 millones, en la vivienda 1.219 millones (500 a través del ICF) y en las energías renovables 300 millones.

En cuanto a bienestar y servicios públicos, destaca la ampliación de plantillas en el ámbito de la educación (2.280 nuevas plazas), en salud (3.257 nuevas plazas) y en los cuerpos de seguridad (1.515 plazas). También se destinan 48 millones de euros a ampliar los servicios de atención a las violencias machistas. En las políticas de transformación económica e investigación destacan los 697 millones destinados al Pacto Nacional para la Industria, así como 83 millones en el fondo de transición nuclear, 195 millones destinados a inversión en infraestructuras del conocimiento, 87 millones para ayudas al sector agroalimentario y 41 millones por territorializar políticas de empleo.

En cuanto al ámbito de cultura y lengua, se destinarán 111 millones a fomentar el aprendizaje del catalán y potenciar su uso, 104 millones para fortalecer la industria audiovisual y 17,5 millones para el programa Cultura Joven.