Los expertos avalan el plan de Escrivá para aplazar jubilaciones

BarcelonaEl ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, sorprendía este lunes con su plan para intentar aplazar el incremento de jubilaciones y prejubilaciones que se prevé a corto plazo por la incertidumbre económica. La propuesta, que de momento es solo esto porque se tiene que acabar de negociar con los agentes sociales y aprobar en el consejo de ministros, prevé a grandes rasgos un pago anual de hasta 12.000 euros o aumentar la pensión un 4% a los trabajadores que decidan seguir trabajando a pesar de tener la edad y los años cotizados para retirarse. A la vez, se quiere endurecer el sistema de penalizaciones para los trabajadores que se quieran jubilar anticipadamente. ¿Pero es factible el plan? Tal como está planteado, ¿conseguiría el objetivo?

Montserrat Guillén, catedrática del departamento de Economía de la UB, deja claro que técnicamente el plan es correcto y es "un incentivo" para que la gente se jubile más tarde. Los motivos –añade– para sacarlo adelante se basan en el alud de jubilaciones que habrá a corto plazo y que el gobierno español "tiene que frenar como sea". "El plan, pues, no es una medida para arreglar el actual sistema de pensiones, sino la incertidumbre causada por la pandemia y que provocará que los que puedan se jubilen", matiza.

Guillén puntualiza que es una medida que ya han sacado adelante otros países, como Alemania y Francia, pero lo que sí es insólito es que se haga un único pago. "La mayoría de países de la Unión Europea premian que la gente siga trabajando porque continúan cotizando y no suponen una carga para la Seguridad Social", concreta. Ahora bien, la catedrática de la UB también apunta que la ambigüedad con la que Escrivá hizo el anuncio, sin dar muchos detalles, puede tener el efecto contrario al que busca. "Hay un alto porcentaje de población que es incrédula ante este tipo de reformas a medio plazo", deja claro.

64 años y 5 meses, la edad real de jubilación

Para el catedrático de economía de la UPF, José García Montalvo, la última reforma del sistema de pensiones constata que la edad de jubilación teórica y la real se han ido distanciando (la real es de media 64 años y 5 meses y la teórica de 65 años y 10 meses). "Hace muchos años que se intenta ajustar esta brecha”, explica. Montalvo recuerda que antes la prejubilación no tenía un coste tan importante para la empresa, pero el gobierno endureció las penalizaciones para intentar desincentivar este tipo de acuerdos, a pesar de que sin mucho éxito.

El académico confía en que este pago único pueda ser más útil que la vía sancionadora. “Con el bastón no hemos conseguido mucho, ahora probamos con la zanahoria. Se tiene que hacer algo, porque si no los problemas de financiación de la Seguridad Social serán imposibles de resolver”, insiste Montalvo.

El profesor de economía aplicada de la UB, Raül Ramos, coincide con el catedrático de la UPF y añade que con este plan, además, se conseguiría hacer convivir el talento sénior con el de los jóvenes. "Permite facilitar la adaptación de los jóvenes a la empresa aprovechando el conocimiento que tienen los trabajadores más grandes y que actualmente se está perdiendo porque se hacen muchas jubilaciones anticipadas".